Los ‘brasiniños’ mandan en Europa
Rodrygo y Vinicius lideran el ataque de Ancelotti que cada vez es más efectivo en Champions. Benzema, que también hizo un gran partido, ya se suma al barco del equipo
El Madrid de la Champions es cada vez más el Madrid de los brasileños. Un gol de Vinicius extendió en París el dominio abrumador de los blancos hasta las 14 Copas de Europa que lucen orgullosas en su museo. Y el arranque de esa defensa de lo logrado en Saint-Denis en junio sigue lanzando mensajes en el portugués que se habla al otro lado del Atlántico.
Los pasos al 9 de 9, un arranque en la Champions que no vivía el Madrid desde la 2014-15, con Ancelotti en su banquillo, comenzó a marcarlo Rodrygo. La excelente relación del paulista con la competición estelar del Madrid dio con las redes de Trubin a los 13 minutos de partido. En una acción en al que anduvo más listo que sus rivales para leer lo rebotes, su derechazo alargó una historia con Europa que arrancó en su debut ante el Galatasaray y que tiene en sus dos goles en la noche surrealista del Manchester City su momento cumbre. Rodrygo se marchó al descanso con un global en el torneo de 11 goles y ocho asistencias, con un promedio de intervención en un gol cada 65,68 minutos.
🙌 ¡Gracias por hacernos felices, @vinijr! 🙌#UCL pic.twitter.com/91W3oUq9kY
— Real Madrid C.F. (@realmadrid) October 5, 2022
Desde el otro lado del campo, la banda izquierda, Vinicius dejó dos veces a la grada con la boca abierta antes de poner el 2-0 en el marcador y elevar su cuenta de goles de esta temporada a siete, mirando a los 22 firmados la pasada campaña. El segundo gol del Madrid fue una obra perfecta en la que su tridente ofensivo hizo encaje de bolillos entre la defensa ucraniana para que fuera Vinicius el que mandara la pelota a la red. Con 10 goles y 13 asistencias en Champions, la media al descanso de Vinicius en la competición para producir un gol es de cada 107,65 minutos de media.
Benzema, evidentemente, es el jefe del tridente, pero sus escoltas son cada vez más importantes en un equipo en el que la delantera tiene un interrogante. Es el de la banda derecha, porque Rodrygo no está dispuesto a que su sitio sea para Valverde por decreto.
Foto: Real Madrid