Pedro Ferrándíz: el arquitecto de sueños, por @AbrahamR_82
Pocos adjetivos son suficientes para describir lo que es y lo que significa Don Pedro Ferrándiz González para el mundo del baloncesto. No sólo en el Real Madrid, sino en todo el país.
Un 20 de Noviembre de 1.928 en Alicante, dos días después de la creación del ratón más famoso de la historia del cine; Mickey Mouse. Y diez días después del nacimiento de uno de los mejores compositores de bandas sonoras de la historia del cine; Ennio Morricone, venía al mundo un niño que en sus inicios quería ser futbolista pero que al ver su primer partido de baloncesto tal fue su enamoramiento que decidió dedicar su vida a este deporte. Así lo describió el propio Ferrándiz: “el baloncesto fue para mí como la luz para San Pablo cuando se cayó del caballo camino de Damasco”.
Tras unos inicios muy duros a causa de la postguerra que le obligaron a dejar los estudios para ponerse a trabajar y así ayudar a su familia, su primer contacto como entrenador de baloncesto fue durante su estancia en la mili. Al ver que el entrenar a gente se le daba muy bien, fue en 1.951 cuando se sacó el curso de entrenador nacional en Alicante. Empezó a entrenar al Frente Juventudes y los éxitos pronto llegaron en forma de campeones de Alicante y terceros de España.
Fue entonces cuando gracias a sus contactos en el mundo del baloncesto se trasladó a Madrid, en donde sus inicios tampoco fueron fáciles, encontrando rápidamente empleo de mecanógrafo. Gracias a una final del campeonato de España en Alicante, Don Pedro conoció a Don Raimundo Saporta. Y fue Don Raimundo quien encargó a Don Pedro Ferrándiz la organización de los torneos sociales del club, trabajo que compaginó con el de secretario del jefe de Deportes, Educación, y Descanso.
Así estuvo hasta el año 1.955, en donde entra a formar parte de la sección de baloncesto del Real Madrid como entrenador de las categorías inferiores. Rápidamente empezaron a llegar los éxitos, lo que significó el inicio de su etapa tan exitosa. Tras dos años entrenando al Hesperia (1.957-1.959), filial del Real Madrid que competía también en Primera División, que le sirvieron para curtirse fue en 1.959 cuando coge las riendas del primer equipo del Real Madrid, sustituyendo en el cargo a un Jacinto Ardevínez que esa temporada 1.958/59 había sustituido al siempre recordado Ignacio Pinedo.
Fue llegar Ferrándiz al banquillo blanco y revolucionar este deporte. En un baloncesto en el que esos años se llevaba el jugar con dos bases, dos aleros, y un pívot el hizo hincapié en los jugadores altos para dominar el rebote y así salir al contraataque con los bases y aleros. Los éxitos no tardaron en llegar en forma de títulos, sobre todo en España en donde el Real Madrid ganó 7 títulos de liga consecutivos (De 1.959 a 1.966)
Siendo el claro dominador del baloncesto en España, en Europa el Real Madrid, de la mano de Don Pedro Ferrándiz, ya empezaba a asomar en la pugna por la conquista del cetro europeo. En el partido de ida de los octavos de final de la Copa De Europa de la temporada 1.961/62 una maniobra de pillo de Don Pedro Ferrándiz pasó a la historia de este deporte por lo que significó. A dos segundos del final, y con el Real Madrid ganando por dos puntos, el Pallacanestro Varese empató y Don Pedro, viendo que Hightower estaba lesionado y Carlos Sevillano y Morrison estaban eliminados por faltas personales, metió en pista a Lorenzo Alocén.
Viendo que la prórroga no le convenía nada a un Real Madrid que se encontraba en inferioridad, Don Pedro pidió a Alocén que anotase en su propia canasta tras el saque de banda. Alocén cumplió al pie de la letra la orden de Ferrándiz ante la sorpresa de los asistentes que empezaron a mofarse del Real Madrid hasta que se dieron cuenta de la artimaña de Don Pedro Ferrándiz, y lo que buscaba con ella. Una artimaña que valió la pena porque en la vuelta el Real Madrid ganó de 21 puntos para pasar a la siguiente ronda de esa Copa de Europa que el equipo de Don Pedro Ferrándiz no consiguió ganar ya que sucumbió en la final disputada en Ginebra por 90-83 ante el Dinamo Tblisi, que en semifinales había eliminado al potente TSKA Moscú. Esta maniobra de Don Pedro hizo que la FIBA cambiase la norma sancionando con 1.000 y la expulsión de la competición al siguiente que hiciese esa acción de anotar en su propia canasta a propósito.
Fue en 1.964 cuando Don Pedro Ferrándiz consiguió por fin llevar al Real Madrid a ganar su primera Copa De Europa tras derrotar en la final al Spartak De Brno, y un año después le llevó a ganar su primera triple corona (Liga, Copa, y Copa de Europa) tras ganar en la final de Copa al R.C.N. Tenerife por 102-82, remontar en el mítico frontón Fiesta Alegre al TSKA de Moscú en la final de la máxima competición Europea, y llevarse la Liga por delante del Picadero J.C.
Don Pedro Ferrándiz ya había conseguido lo que tanto anhelaba, pero lejos de conformarse nunca se cansó de ganar. Sus continuos viajes a Estados Unidos en busca de jugadores le sirvieron también para traer conceptos tácticos que luego aplicaría en este país. Prueba de ello fue que gracias a él se vio por primera vez en este país la defensa con ayudas así como el trailer en el contraataque. Conceptos que ayudaron a que el Real Madrid de la mano de Don Pedro siguiese cosechando éxitos.
Tipos de la talla de Emiliano Rodríguez, Clyfford Luyk, Wayne Brabender, Carmelo Cabrera, Vicente Ramos, Juan Antonio Corbalán, Rafa Rullán, Wayne Hightower, Cristóbal Rodríguez, o Walter Sczerbiak fueron algunos de los muchos jugadores que estuvieron a las órdenes de un Don Pedro Ferrándiz, jugadores a los que supo sacar lo mejor de ellos bajo la consigna principal de jugar en equipo para ganar. Un verbo ganar que era la obsesión de Don Pedro.
Tras 14 años en tres etapas diferentes como entrenador del Real Madrid en 1.975, Don Pedro Ferrándiz cedía su cetro en el banquillo a Lolo Sainz. Se marchaba dejando un legado muy difícil de superar; 12 ligas, 11 Copas Del Rey, y 4 Copas De Europa. Además de 264 victorias y 18 derrotas en las trece ligas que disputó, y tres años y tres meses sin conocer la derrota cosechando 88 victorias consecutivas en la competición nacional. Como el mismo reconoció, su marcha fue una decisión muy meditada, y lo hizo porque le salían los títulos por las orejas.
Regresó al Real Madrid como director de la sección durante las etapas de Ramón Mendoza y Lorenzo Sanz como presidentes del club. Con él al mando de la sección llegaron jugadores como Zoran Savic, Dejan Bodiroga, Pablo Laso, o Alberto Herreros.
En marzo del año 2.007 todo el trabajo realizado por Don Pedro Ferrándiz, además de todo lo que aportó al baloncesto y significó para este deporte, se vio recompensado con su ingreso en el prestigioso Hall Of Fame de Springfield. Y dos años después, en Septiembre del año 2.009 fue elegido para ingresar en el Salón de la Fama de la FIBA. 18 años antes, en 1.991, Don Pedro Ferrándiz vio cumplido su mayor deseo; la fundación Pedro Ferrándiz era una realidad. Una fundación que a día de hoy es el mayor centro de estudios sobre el baloncesto.
Su última gran distinción se ha producido este pasado 27 de Febrero cuando el Real Madrid le ha nombrado socio de honor, que es la mayor distinción que se otorga en el club.
Genio y figura, y un luchador y ganador incansable al que el madridismo y el mundo del baloncesto nunca podrán agradecerle lo suficiente todo lo que ha hecho por ambos.