Opinión | Un derbi siempre es un derbi
Derbi raro el que se disputará en unas horas en el Santiago Bernabéu. Ambos equipos se juegan poco desde el punto de vista de la clasificación al encontrarse alejados de la posibilidad de luchar por el título y tener prácticamente asegurada la plaza Champions para la próxima temporada.
Además, desde la óptica madridista este partido es como el queso de un sándwich mixto, ya que nos pilla en el medio de los dos trascendentes partidos contra la Juve, lo cual obligará a dosificar esfuerzos; no de los que salten al campo, que estoy seguro que lo darán todo por nuestro escudo, pero sí de los que descansen para centrarse en la batalla europea del próximo miércoles. Por lo que cualquier rotación que Zidane decida será, bajo mi humilde punto de vista, absolutamente comprensible; ya que a pesar del resultado de la ida nunca se puede bajar la guardia contra un equipo italiano.
Pero sin embargo, esta tarde, todos los madridistas estaremos pendientes del partido, como si los condicionantes expuestos con anterioridad no existiesen. El Bernabéu estará a reventar, los bares harán su agosto a principios de abril y las redes sociales arderán de la misma manera que si nos jugáramos algo más de tres puntos.
¿Y por qué? Pues porque un derbi siempre es un derbi, y no sólo porque el Madrid esté obligado a ganar todos los partidos, que evidentemente lo está, sino porque se trata de un enfrentamiento en el que la rivalidad entre los contendientes es tal, que cuando comienza a rodar el balón todo se olvida. Una rivalidad que data de años y que se alimenta del roce diario de dos aficiones que conviven en la misma ciudad.
Quién no tiene un familiar, amigo o compañero de trabajo, que continúa escocido por lo sucedido en Lisboa y Milán, y que sigue pensando que ganar al Madrid un partido de Liga les hará mandar en la capital; sin querer caer en que la diferencia entre nuestros títulos y los suyos es tan abismal que aquello nunca sucederá.
Por eso un derbi siempre es un derbi, porque cada partido que se juega es una oportunidad de “minirevancha” para ellos y de aumentar nuestra leyenda para nosotros. Descafeinados podrán ser los cafés pero nunca los partidos como este.
Texto: @carolo_73
Foto: El Español