#MiJugadorReal | @FranciscoQuiros
Incluso los madridistas más equilibrados, aquellos que subordinan cualquier jugador a la pureza del escudo, incluso aquellos guardan en sus retinas episodios sentidos protagonizados por algún héroe blanco. Para compartir y en algún caso divulgar esas reminiscencias madridistas, MadridistaReal lanza esta iniciativa.
Estoy seguro de que con la excusa los madridistas podremos remontarnos a la arcadia de nuestra existencia, a nuestra cándida niñez, momento en el que muchos nos dejamos contagiar por el sentimiento madridista. Nuestro compañero @Rancoma_ sabe muy bien de lo que hablo, ha ahondado en ese magnetismo que se siente especialmente en una etapa.
Personalmente aunque Bale me hizo vibrar en la final de Copa de 2014, esa actuación fue ya disfrutada desde la madurez. Algo muy distinto a lo percibí de niño con #MiJugadorReal.
#MiJugadorReal | @FranciscoQuiros
Si tuvieses que elegir un exjugador histórico del Real Madrid como tu favorito, ¿a quién elegirías? ¿Por qué?
Tengamos en cuenta que nací en 1982 y que mis primeros recuerdos futbolísticos no se remontan hasta, más o menos, seis o siete años después. Pongamos que desde entonces he visto cientos de jugadores vestir esta bendita camiseta, pero, como en el amor, es al primer ídolo al que no se olvida jamás. Para mí, ese fue Don Emilio Butragueño.
Elijo al ‘Buitre’ porque creo que fue el destino el que lo escogió por mí. Uno empieza a dar las primeras patadas a un balón y quizás por una cuestión de empatía tiende a fijarse en aquel jugador con el que pueda guardar alguna similitud. Bajito como él y natural de un pueblo de Ávila donde veraneaba en su infancia el ‘7’ blanco, a uno ya le vino todo rodado para ser fan incondicional de Butragueño.
¿Qué cualidad destacarías de él? ¿Por qué fue importante en el Real Madrid?
Es curioso que, con el paso del tiempo, la gente recuerde a Butragueño, fundamentalmente, por la mágica tarde Querétaro ante Dinamarca en el Mundial del 86. Mi recuerdo tiene más que ver con esa capacidad de sortear contrarios, la pausa en el momento adecuado para arrancar de manera fulminante segundos después, esquivando patadas y agarrones, porque en aquellas décadas sí tenía mérito destacar con pocas cualidades físicas.
La historia del Madrid no se comprendería de forma completa sin la ‘Quinta del Buitre’. Pero aunque no hubiera dado nombre a esa magnífica generación, Butragueño hizo méritos de sobra para tener una página escrita con letras de oro en la historia del club: marcó 171 goles y contribuyó a conquistar cinco Ligas, dos Copas, cuatro Supercopas, dos Copas de la UEFA y una Copa de la Liga.
¿Qué exhibición suya en un partido recuerdas con más cariño vistiendo la camiseta del Real Madrid? ¿Por qué?
He podido ver partidos históricos como el 6-1 al Anderlecht, pero varios años después. El primer gran recuerdo que tengo de un partido suyo fue en la vuelta de la Supercopa de España de 1990. La ida había terminado con 0-1 a favor del Madrid y, aunque el Barça igualó la eliminatoria a los pocos minutos de empezar el partido del Bernabéu, la sociedad Míchel-Butragueño destrozó a los de Cruyff antes del descanso. Para los más despistados, esa final se hizo famosa por el gol de Santi Aragón desde el centro del campo.
¿En qué título del Real Madrid consideras que fue más determinante?
Aquí radica una de las grandezas de Butragueño: no fue determinante en un título, pero sí clave en muchos. Encadenar cinco ligas consecutivas es un hecho a destacar, a pesar de que aquel equipo fenomenal se quedara sin la guinda de la Copa de Europa.
¿Qué sentiste cuando abandonó el Real Madrid?
Su salida del Madrid fue agridulce. Con su marcha al fútbol mexicano se acababa una era para el club en general y en particular para mí como aficionado. Pero también es cierto que su último año estuvo marcado por la suplencia a la que le condenó la eclosión de una estrella llamada Raúl González Blanco. Hasta para eso, en la despedida, fue elegante Butragueño.
¿Tienes alguna prenda u objeto con su nombre o que te recuerde a él?
Casi todo lo que guardo de mi infancia, que es mucho (revistas, libros, bufandas, llaveros…), pero me quedo especialmente con que las primeras botas de fútbol fueron unas Joma Emilio Butragueño. Casi nada.
Si tuvieses que compararlo con un jugador actual de la plantilla del Real Madrid, ¿con quién sería? ¿Por qué?
Es difícil compararlo con alguien de la actualidad, porque el fútbol ha cambiado tanto que el rol que ejercía Butragueño, el de segunda punta, parece haber desaparecido. Sin embargo, me atrevo a decir que, en lo futbolístico, tiene rasgos de Benzema, por la capacidad de asociarse con compañeros. En lo espiritual lo emparejo con futbolistas como Lucas Vázquez, canterazos que han mamado los valores del club y que anteponen el bien del equipo por encima de egos e individualidades. Ahora que lo pienso, también se parece al gallego en la facilidad para provocar penaltis.
Si hubieses podido conocerlo en persona, ¿qué le hubieras dicho?
Una sola palabra: gracias.