Crónica Real | El Madrid se da un festín y se corona campeón del mundo (5-3)
Los blancos vencieron al Al Hilal por 5-3 y se proclaman campeones del mundo por octava vez en su historia. Título número 100 para las vitrinas del Real Madrid.
Real Madrid y Al Hilal se enfrentaban en Rabat, en el Estadio de Moulay Abdellah (20:00 horas) en busca del título que les alzaría como campeón del mundo de clubes en la ciudad marroquí. Los blancos llegaban a la final tras eliminar al Al Ahly por 1-4 con goleada incluida, mientras que el equipo asiático daba la sorpresa eliminando al Flamengo (2-3).
En las grandes noches, Carlo Ancelotti rebobina y acaba en lo bueno conocido frente a lo bueno por conocer. Así que, cogido con pinzas, con un solo entrenamiento en Marruecos, en una temporada en que no ha podido enlazar una racha de más de siete partidos, jugó Benzema, al que el técnico le aseguró la renovación en la víspera. Medio Balón de Oro sigue siendo de oro. Y con él, la antología de los clásicos: Carvajal, Alaba, Modric, Kroos… Todos conocieron tiempos mejores, pero el italiano cree que, en pequeñas dosis, siguen siendo insuperables.
El primer gol exigió de todo el ataque. Empezó Valverde, Benzema le abrió paso a Vinicius y este superó a Al Mayouf con un remate manifiestamente mejorable. Cinco minutos después el propio Valverde enganchó un disparo raso en el área que pasó entre las piernas de Abdulhayi para confundir al meta del Al Hilal. El Mundial de Clubes es un revitalizante natural para el uruguayo. Dos goles en un pestañeo y medio título en la mochila.
El partido era un spa en el que todos querían divertirse, ambiente perfecto para un descuido. Y llegó. Un pase en profundidad de Kanno plantó ante Lunin a Marega, que marcó de tiro raso. Vale lo mismo que para el tanto de Vinicius. El disparo no estará entre sus cincuenta mejores definiciones, pero Lunin se fue al suelo una décimas de segundo tarde.
Tras el descanso el partido era otro pero el Madrid, el mismo, un equipo que a falta de otras razones, saca la pegada. También está en su ADN.
Un gol de Benzema lo aclaró todo. Se lo había ganado el francés, delantero latifundista que se movió mucho por todo el frente de ataque, pero se lo regaló Vinicius, que esperó el momento preciso para enviar un centro con el exterior de su pie derecho al que Benzema solo tuvo que ponerle firma.
Un tanto oportuno en un momento en que el encuentro se amodorraba y el punto final a un partido de tremenda desigualdad. El Hilal había empezado a decolorarse definitivamente cuando desde la otra banda le llegó el cuarto mazazo. Se alargó Carvajal por su banda y le acompañó Valverde, que recibió y ejecutó. La octava estaba en el bote.
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— madridistaReal (@RMadridistaReal) February 11, 2023
e marchó Benzema entre vítores y Tchouameni tocado y entraron Rodrygo y Ceballos, que ha pasado de suplente profundo a primer cambio. Quién sabe se será suficiente para pactar una renovación. Mientras el Madrid recalculaba el dibujo marcó Vietto por ese agujero abierto entre Alaba y Camavinga, ángulo muerto que merece corrección. Lo remedió Vinicius, que se entrometió en un autopase de Ceballos para firmar el doblete.
Ancelotti repartió premios (Nacho, Asensio, Vallejo) en un partido que ya era una verbena. Lo demostró el tercer gol del Al Hilal y que Marega perdonara el cuarto. Rüdiger y Vallejo salieron en las dos fotos. El partido, para entonces, ya lo había decidido Vinicius. Lo disfrutó a lo grande, baile incluido.
Tras ganar la Decimocuarta en París en el mes de mayo, en agosto, este camino continuó con la Supercopa de Europa que el Real Madrid ganó al Eintracht de Frankfurt en Helsinki. Y termina en Rabat, donde Ancelotti y sus chicos doblegaron al Al Ahly egipcio en semifinales el pasado miércoles, y hoy alzan al cielo del Moulay Abdellah su octavo Mundial ante el Al-Hilal.
Título 100 para las vitrinas del Real Madrid y el 55 para Florentino Pérez desde que se hizo con el cargo en el club de Chamartín. 31 de ellos los ha logrado con la sección de fútbol, mientras que 24 con el equipo de baloncesto.
Foto: KHALED DESOUKI/AFP vía Getty Images
