Crónica ACB | Un ataque blanco brillante no es suficiente para el primer puesto (106-100)
Daniel Martínez/ madridistareal
El Real Madrid vence pero no es suficiente para conseguir la primera plaza. El equipo de Chus Mateo se enfrentará al Gran Canaria en los cuartos de final de Liga Endesa
El Madrid recibía al Baskonia en la última jornada de la temporada regular. El equipo de Chus Mateo venía de perder contra Valencia Basket y romper su racha de victorias en competición doméstica. La última victoria en casa no fue suficiente, ya que el Unicaja ganó su partido que le permitía clasificar como primero para la fase de playoffs.
La puesta en escena comenzó con la entrega a Edy Tavares del premio a mejor defensor de la temporada de la Liga Endesa. El protagonismo pre-partido también lo protagonizaron las bajas importantes para ambos clubes, la reciente lesión de Gabi Deck por parte del conjunto madridista, y la de Howard y Moneke para los visitantes.
- Un Real Madrid exhibicionista
El quinteto propuesto por Chus Mateo que entraba en pista estaba formado por Campazzo, Abalde, Yabusele, Musa y Tavares. El Real Madrid salió muy enchufado al ataque en los primeros minutos. Fueron Musa y Tavares los que tomaron el protagonismo en el primer cuarto, anotando más de la mitad de los puntos del conjunto blanco. Cabe añadir que el caboverdiano acertó todo lo que intentó en el inicio de partido.
El primer momentazo del partido nos lo dejó Campazzo. El base argentino hizo una finta que quebró a los defensores vascos para finalizar con un lanzamiento directo al aro que dejó sin aliento a los aficionados, aunque no fue el único que dejó algún highlight en Goya, ya que Yabusele o Musa consiguieron levantar al graderío con varias de sus canastas.
El cuadro de Chus Mateo proponía mucho más durante los primeros minutos. No obstante, varios errores defensivos, hacían que el Baskonia aprovechase los huecos en la zona de 3 para disminuir diferencias, estos 10 minutos iniciales terminaban con dos por encima a los merengues.
- Rudy y cuatro más
El Madrid jugó el segundo parcial con un equipo totalmente diferente al de la primera parte. Los jugadores de refresco funcionaron en los primeros compases de esta parte. El Baskonia que tuvo una gran puesta en escena fue capaz de darle la vuelta al marcador por primera vez en el partido. La alegría de los pupilos de Ivanovic iba a ser muy corta, en un segundo cuarto muy reñido el factor diferencial fue Rudy Fernández.
El mallorquín hizo unos números sensacionales en los ocho minutos que disputó. Con un acierto del 100% en dos tiros desde la zona de 2 y lo mismo en sus tres triples intentados. Logró así coronarse como máximo anotador hasta el momento, superando a su compañero Musa y al serbio Marinkovic del equipo visitante.
Y como si de cine se tratase, el final de la primera parte terminó de la mejor manera posible para los locales. Una recuperación en campo propio de Campazzo y una asistencia debajo del aro daba a Hezonja un mate que ponía a los blancos nueve por encima con un total 56-47 sobre las pantallas del Wizink.
- Poca intensidad defensiva
Lo más destacable de los primeros minutos fue la falta de concentración de Dzanan Musa. Perdió un balón que botó en su pie y casi de seguido falló un mate en el que no tuvo ningún oponente que le frenase. El principal problema de los blancos en el terreno de juego no cesaba. Tenían el control ofensivo del partido, pero permitían demasiadas oportunidades que el Baskonia supo aprovechar con gran acierto – desde la zona de 3 de nuevo -, con Matt Costello y Miller-McIntyre como máximos beneficiados.
El Real Madrid permitió que el Baskonia anotase 29 puntos y se reenganchó a un partido que dejaba todo abierto para el último cuarto.
- Una victoria sin premio
En el último cuarto se decidía quién se llevaba la última victoria de liga regular para casa. Los vikingos no dejaron tiempo para dudas y realizaron un inicio de cuarto perfecto. Con un 8-0 consecutivo en los primeros cuatro minutos. Rudy Fernández seguía imparable con otro triple para la suma personal, que no le permitía ningún fallo hasta el momento.
A partir de aquí la moral tan característica que siempre acompaña al Real Madrid impregnó a todo el equipo para realizar un final de partido fantástico. Todo llegaba al Palacio de los Deportes en forma de ovación; taponazo en defensa, canastón del Chacho y ovación a Rudy en el momento de su cambio.
El cuadro local solo tuvo que mantener su ventaja, que no fue nada fácil con un Baskonia que no se rendía ya que tenía opciones de jugar playoffs. El Real Madrid traspasó la línea de 100 puntos y dejó el marcador final en un 106-100.
El Real Madrid finalmente clasifica como segundo en la temporada regular con una racha de 28-6 a favor en los 34 partidos disputados. Esto hace que se enfrente al Gran Canaria en cuartos de final y el posible cruce con el FC Barcelona en semifinales, seguramente hará que los planes de Chus Mateo cambien para la carrera final de la temporada.