Desde el Bernabéu : La ilusión del debutante.
Voy a tomarme la licencia (poco periodística, quiero pensar) de empezar esta crónica con un poco de autobombo. Cuando supe que tenía que escribir la crónica del partido me sentí como Isidro en aquel partido de los 80 que estando fuera de la convocatoria y ya paseando por Concha Espina, alguien tuvo que llamarle para completar la lista. Con esa ilusión del debutante, inicio por tanto está crónica de lo sucedido esta tarde en el Bernabéu. Quiero pensar que la misma ilusión que debía tener Cristiano, ya que si la memoria no me falla, debutaba con el brazalete de capitán esta temporada.
El partido comienza después de un minuto de silencio en memoria de un policía fallecido durante los incidentes acaecidos en el partido del jueves de la Europa League entre el Athletic de Bilbao y el Spartak de Moscú. Ojalá sirviera para que todos reflexionáramos sobre ello.
El partido comienza con un dominio abrumador del Madrid, que arranca de inicio con un 4-3-3 con Nacho por Ramos, Theo por Marcelo, Kovacic, Lucas y Casemiro, y la BBC arriba de nuevo. Sí, la BBC; pese a todo lo que se dice extramuros, si de algo no puede acusarse a Zidane es de no tener personalidad. Cristiano tuvo la primera ocasión en el minuto 13, en lo que estaba siendo un monólogo del Real Madrid. Una contra cuatro minutos después, nos demostró que algún tuerto ha tenido que mirar a Karim, que volvió a fallar una ocasión cantada tras resbalar.
El Madrid presionaba en cada perdida del rival, fruto de lo cual llegó otra gran jugada de Lucas en el minuto 23 pero el gol seguía sin llegar.
En este periodo, volvimos a ver a Bale por la izquierda, su lado natural. En general los tres de arriba se movían como en otras épocas no tan lejanas, y en una jugada de Benzema por la izquierda, Bale remató de una formidable chilena.
A partir de la media hora y hasta casi el descanso, caraja general de los blancos. Nada que no hubiéramos visto en otras ocasiones, y que no por visto deja de ser preocupante. El Madrid debe pensar en ello, porque en otro tipo de envites que vienen a partir de ahora, este tipo de despistes colectivos pueden resultar fatales.
Un par de ocasiones aisladas en este desbarajuste, dieron paso a una asistencia de tacón de Benzema dentro del área a Cristiano para que CR7 convirtiera el 1-0 (min. 43)
Una parada de Keylor a Alexis en el 44 y una postrera jugada de Theo que acabó con un disparo fuera de Karim nos llevaron al descanso.
La segunda parte no tuvo historia. Y no la tuvo porque a los 31 segundos, un robo de Benzema en el centro del campo, terminó con asistencia a Bale y gol. Ahí terminó el partido porque el Alavés terminó de desaparecer del encuentro por completo.
Aún pudimos ver un par de galopadas de Theo, que se prodigó más que de costumbre demostrando su potencia física y a Ceballos recibir un cariñoso aplauso del público merengue al entrar al campo, después del cambio el pasado miércoles en Leganés (Míster, todos nos equivocamos). El Madrid anotó dos goles más en este periodo: el tercero en jugada de Kovacic en la que interviene medio equipo y un pase de Lucas a CR7 para que éste anote el 3-0 (min.61) y el cuarto en un claro penalty a Bale en el 88 en otra gran jugada colectiva. El bonito detalle de Cristiano, quizá ayudado por ese brazalete de capitán, que dejó apartada por un momento la lucha por el pichichi y el logro de hacer otro hat trick, y le dejó tirar a Benzema. El francés, en medio del run run de la grada, marcó el cuarto y cerró un partido tranquilo, con cosas por corregir pero que por contra, dejó la portería a cero (no pasaba desde el día del Sevilla) y permite seguir la buena racha del equipo en LaLiga.
Autor: @pepo2204
Imagen: Twitter @7Sempiterno7 y @nuevobernabeu