Crónica ACB | El Real Madrid sobrevive en Manresa (88 – 94)
El equipo blanco sufrió de lo lindo para superar al Baxi Manresa de Pedro Martínez. El equipo catalán lleva ya unas temporadas siendo un hueso duro de roer para el Madrid y esta vez no fue una excepción. La baja de Tavares fue clave para el partido siendo un claro factor para el rebote ofensivo en el que al equipo se le vio por momentos muy superado. En ataque fueron Llull, Campazzo y de nuevo Musa, que está a nivel de MVP, los que sacaron las castañas del fuego. El bosnio se marchó con 23 puntos y 31 de valoración. Espectacular Ndiaye en defensa.
Mala primera parte
El Real Madrid sumaba de tres en tres escapándose con la primera ventaja del partido, pero la alegría no iba a durar mucho. Yabusele tenía que marchar al banco por sumar su segunda personal dando así salida a Ndiaye. El canterano se está ganando minutos por su rendimiento defensivo, una faceta en la que se le ve un techo altísimo y que se antoja vital como contraportada de los atributos de Gerschon, jugador de un corte mucho más ofensivo. El Madrid fue claramente de más a menos en el primer cuarto, llegando a conceder muchísimo en la segunda mitad. El conjunto catalán aprovechaba el mal momento defensivo de los blancos para ganar el primer asalto por 26 – 22.
La reanudación iba a seguir la misma dinámica, defensa blanda y Manresa imponiendo su ritmo. La incomodidad del cuadro madridista se reflejaba en una falta de ideas en ataque, como viene siendo costumbre la mayoría de posesiones desembocan en un uno contra uno. Un arma de doble filo, pues aunque es cierto que el Madrid dispone de una plantilla repleta de talento y recursos ofensivos, también se convierte en predecible para las defensas. El equipo blanco recuperó sensaciones llegando incluso a colocarse por delante en electrónico. Los manresanos se negaban a dejar escapar al Madrid y apretaban para llegar al descanso con un marcador de 42 – 43.
Reacción en la segunda mitad
La reanudación nos traía un ritmo frenético. Intercambio de golpes en el que Manresa no bajó el ritmo. Queda claro que a falta de Tavares y con el permiso del Facu, Dzanan Musa es el factor diferencial de este Madrid. Su arsenal ofensivo lleva ya tiempo catalogado como elite europea y en partidos como este lo saca a relucir. El bosnio acalló el Nou Congost llegando a los 20 puntos en un tercer cuarto en el que el parcial fue favorable a los blancos por dobles dígitos. El Madrid con diez puntos de ventaja tenía la oportunidad de matar el partido, pero Chus decidió dar relevo al hombre más enchufado, Musa y con ello el ataque se empobreció. Llegó la reacción de Manresa colocándose a 4. Un Alley-Oop para Poirer salvaba el parcial y mandaba el choque a los últimos 10 minutos con 67 – 73.
Desastroso el arranque del cuarto período. El rebote defensivo del Madrid estaba siendo una absoluta calamidad, así como la defensa de las penetraciones. Noche para olvidar de Vincent Poirier que tras protestar una dudosa falta era amonestado con técnica que suponía su quinta personal. El pívot francés estuvo muy incómodo durante todo el choque y esta vez no estaba Tavares para arreglarlo. El relevo lo daba Eli Ndiaye que de nuevo iba a dar unos minutos estupendos. Pasado el ecuador del último asalto, aparecían Campazzo y Musa para poner tierra de por medio. El cuadro catalán resistía pero el tiempo sería un rival más. Marcador final de 88 – 94, los blancos se colocan 2 – 0.
¿Tavares dependencia? La respuesta está en casa
El Madrid sufrió claramente en el poste con la ausencia del caboverdiano. Poirier tuvo una de sus peores noches en mucho tiempo y Yabusele solo dejó fogonazos de lo que acostumbraba a hacer en liga. Ante todos estos problemas surgió una solución, la del canterano Eli Ndiaye. Eli se ha consolidado como un especialista defensivo capaz de actuar en los escenarios más exigentes. Su gran actuación hoy en los minutos finales no hacen sino aumentar su confianza y darle al equipo blanco un elemento más importante en la rotación. Ante las dudas con los no fichajes en el cuatro, Ndiaye ha dado un paso al frente para decir ‘aquí estoy yo’. En ataque fue Musa de nuevo el que se echó el equipo a la espalda para reaccionar tras el descanso. El verano parece haberle venido de escándalo al bosnio. Se le ve más aplicado en defensa, atento para rebañar balones y lanzarse al contraataque, en ataque, pues sigue siendo Musa. En un arranque impresionante Dzanan se postula como MVP en esta nueva temporada.
