Crónica Real | El Real Madrid, a octavos con revancha (0-3)
El equipo madridista consigue su pase a octavos tras conseguir una victoria a domicilio que le valió además de los tres puntos devolverles la derrota que le endosaron en el Bernabéu, esta vez en campo rival.
El Real Madrid obtuvo su pase a octavos fuera de casa tras conseguir una victoria a domicilio ante el Sheriff de Tiraspol en el estadio «Sheriff» Sport Complex por un cero a tres. El equipo blanco se asegura a falta de un partido pasar a la siguiente fase y solo se jugará la siguiente jornada el ser primero o segundo del Grupo D.
La victoria fue fundamentalmente gracias a dos buenas faltas botadas cerca del área rival. David Alaba con la pierna izquierda tras una falta sobre Casemir en el minuto 30 de partido y Kroos pasados ya los 45 reglamentarios. El equipo rival intentó poner en alguna jugada en aprietos al equipo madridista pero no llegó con excesivo peligro en ninguna de ellas. De hecho, pudo haber llegado el primer tanto en el minuto 19a través de las botas de Karim Benzema. Sin embargo, el colegiado anuló el tanto del francés por fuera de juego.
Llegado el segundo tiempo a los diez minutos de haber comenzado Benzema puso su tanto y el tercero para el equipo blanco en el luminoso. Un tanto que permitió a Ancelotti comenzar a mover el banquillo para dar descanso a los suyos. En el 61′ Mendy dejó su sitió a Marcelo. El siguiente cambio fue obligado y es que David Alaba tuvo que retirarse del campo lesionado. El austríaco y Carvajal fueron el doble cambio del 65′ dejando su sitio a Lucas Vázquez y Nacho. Ese cambio pareció trastocar en los primeros compases tras el movimiento de fichas. Y es que una doble ocasión hizo que primero el meta Courtois y luego el palo salvaran al equipo madridista de un 1-3.
El míster madridista siguió metiendo jugadores para rotar pero el resultado no cambió, algo que hace que el equipo madridista sea matemáticamente equipo de octavos. Ahora toca pensar en el próximo duelo de Liga Santander ante un difícil Sevilla que se juega lo mismo que el blanco: no salirse de la zona de arriba.
Foto: Real Madrid
Texto: Mozart Ballesteros