Rüdiger: «Tengo mucha hambre de títulos»
El alemán habla sobre su primera temporada, su familia, su vida en Madrid, la Champions, Vinicius…
Rüdiger afronta su segunda temporada en el Real Madrid. En una entrevista con la revista GQ España analiza lo que fue la primera, la que le sirvió para captar algo que solo es posible en el Madrid: que no ganar la Champions, aunque se llegue a semifinales, se perciba como un fracaso. Por eso, el central berlinés marca la competición que va en el ADN blanco como una prioridad.
A sus 30 años, está a punto de emprender su segundo año en la capital de España, en el Real Madrid. El central se volverá a disputar el puesto con dos fijos como Eder Militao y David Alaba, pero tiene la confianza suficiente en sí mismo como para brillar en noches importantes como la del partido de Champions League ante el Manchester City en el Santiago Bernabéu.
Aquel día, consiguió algo prácticamente imposible hasta la fecha: frenar a Haaland. Sobre este y otros temas, como los insultos racistas sufridos por su compañero Vinicius en algunos campos españoles, habló Rüdiger. También desveló su principal fuente de motivación, que dice estar en su «familia», puesto que ven en él «lo que nadie más que ve», algo fundamental si «juegas en el Real Madrid», donde si «no estás motivado tienes un problema».
El alemán fue capaz de frenar a Haaland en la ida de las semifinales de Champions en el Bernabéu, un partido de alto voltaje en el que cumplió a la perfección. «Estaba absolutamente tranquilo. Sé hasta dónde puedo llegar si estoy al 100% tanto física como mentalmente. Se creó una circunstancia que me encanta. Los días previos, los medios de comunicación se preguntaban si yo iba a ser capaz de defender a Haaland. Había muchas dudas en el ambiente y si te soy sincero, me encanta esa atmósfera: brillo más cuando la gente duda de mí», sentenció Rüdiger.
La Champions, su mayor deseo
«La motivación más importante para mí proviene de mi familia. Ellos ven en mí lo que nadie más ve. Saben mejor que nadie cuando no estoy de buen humor y me ayudan. Para mí la familia es una motivación y es una emoción, es algo que me empuja hacia delante. Si juegas en el Real Madrid y no estás motivado por ello, tienes un problema. Soy musulmán, creo en Dios y por eso me gusta rezar antes de los partidos. Rezo para que todos los jugadores, los de mi equipo y los rivales, no se lesionen y también rezo por todas las personas que han venido a vernos al estadio. No necesito más, solo rezar».
«No siento que lo haya ganado todo, para ser sincero. Uno de los grandes objetivos que tengo es ganar la Liga de Campeones con el Real Madrid. Si no la ganas, es como un fracaso. Tengo 30 años, estoy en mi ‘prime’ y tengo mucha hambre de títulos».
A propósito del ‘caso Vinicius’, Rüdiger fue preguntado sobre si él había sufrido ese tipo de ofensas en los campos españoles, pero su situación es distinta a la del brasileño, al que defendió a capa y espada. «Si me preguntas si alguien ha sido racista conmigo en España, la respuesta es no».
Foto: MARK FELIX/AFP via Getty Images