REAL MADRID
El Real Madrid dejó ver un buen nivel ante Partizan el pasado martes en el primero de los dos partidos de la doble jornada de Euroliga y buscará en su visita al feudo rojiblanco de Belgrado la cuarta consecutiva en la competición continental.
El conjunto blanco sacó a relucir la mejor de sus versiones en los tres primeros cuartos del encuentro ante Partizan del pasado martes en el Movistar Arena. Brilló una defensa magnífica y los buenos partidos de tres de los fichajes de este verano, Okeke, Lyles y un Maledon que debutó en Euroliga y ante su público con una gran actuación. No fallaron a su cita, por su puesto, los más habituales. Buenos minutos de Tavares, Campazzo, Hezonja… y el Madrid llegó a mandar por más de 20 puntos. Aunque, para desgracia de los nervios madridistas (y seguro que para los de Sergio Scariolo también) la distancia llegó a ser de 4 puntos quedando algo más de un minuto de partido, dejando señal de la relajación de los de la capital, algo parecido a lo que pasó en Vitoria en la última jornada de Liga Endesa.
El Madrid necesita desquitarse como sea de estas sensaciones finales que se han repetido en los dos últimos encuentros y buscará en casa de Estrella Roja mantener durante 40 minutos un gran nivel defensivo y su calidad y puntos en ataque. Alberto Abalde apunta a ser baja de nuevo y los descartes del jueves fueron Procida y Almansa, algo que entendemos que puede repetir Sergio Scariolo.
Visitar Belgrado es una de las fechas que tiene marcado en el calendario cualquier jugador de Euroliga. Es una prueba a fuego de que estás preparado para pelear por grandes cosas en la temporada. Estrella Roja ha cambiado recientemente de entrenador y buscará ganarse a los suyos ahora a los mandos de Sasa Obradovic. Actualmente se encuentra con un récord de 2-2 en la competición continental y viene de ganarle a Zalgiris Kaunas el pasado martes.
Tendrá que demostrar el 100% de su nivel el Real Madrid para poder ganar su primer partido a domicilio de la temporada, algo que no pondrán difícil ni los 12 jugadores a pie de cancha ni las miles de almas serbias que asistirán al pabellón.