#PartidosConHistoria | El gol del Aguanís
Aquel 1 de Diciembre de 1998, el Real Madrid de Guus Hiddink, lucharía por conquistar en el Estadio Nacional de Tokio, su segunda Copa Intercontinental tras 38 años de espera.
Un Real Madrid que llegó a ésta finalísima tras derrotar a la siempre temida Juventus de Turin en aquella inolvidable final de Amsterdam. Y un Vasco de Gama que lo haría tras ganar la Copa Libertadores, por primera vez en su historia de la mano de Antonio Lopes, al equipo ecuatoriano del Barcelona de Guayaquil.
LA PREVIA
En la rueda de prensa previa a ésta final, el técnico del Real Madrid resaltó que la victoria blanca sería el mejor bálsamo para acabar con la tensión que se vivía en el equipo blanco en aquéllos momentos.»Estamos como locos por ganar éste título», comentaba el holandés.
Guus Hiddink recordó que sería muy importante la concentración al jugarse éste título a un sólo partido.»Éste no es un partido de Liga donde se puede recuperar lo que has perdido, tengo experiencia en ésta competición y no positiva precisamente».
Los jugadores blancos también hablaron en las horas previas al choque. El montenegrino Pedja Mijatovic (el héroe de la Séptima), comentó que el partido podría marcar sus carreras. «Cada uno tiene que dar lo mejor de sí mismo, porque si no lo hacemos, en el futuro nos podremos acordar de esta oportunidad».
Roberto Carlos no quiso mostrarse menos ambicioso que su compañero.»El Vasco de Gama es un equipo duro y difícil, pero tenemos que imponer nuestra calidad. Después de haber ganado la Séptima, éste es el mejor regalo que podemos hacer a nuestros adicionados».
Por su parte el hispano-argentino Fernando Redondo comentaría lo siguiente: «En lo personal éste título es algo muy deseado. En Sudamérica, la Copa Intercontinental tiene una gran importancia, es la final del mundo».
El técnico del Vasco de Gama Antonio Lopes, se mostraba seguro de las posibilidades de su equipo para ganar la Intercontinental. «Nuestro equipo va a jugar como siempre lo hace. Da lo mismo que nos enfrentemos al Real Madrid ya que nosotros tenemos un estilo de juego y una gran personalidad». También alabó al equipo blanco. «Todos los jugadores del Real Madrid son internacionales. Desde el primero al último, todos tienen calidad».
EL PARTIDO
No llegaba bien el equipo de Guus Hiddink a la capital japonesa. Su nivel de juego y de forma no era a priori el más óptimo para afrontar una final de ésta transcendencia. La racha de tres derrotas consecutivas preocupaban, y de qué manera al Real Madrid.
Hiddink repetiría el mismo esquema del último partido jugado en Milán apuntalando el eje de la defensa con Sanchis, Hierro y Fernando Sanz. Los comienzos del choque fueron muy alentadores para el equipo blanco. Se pudo observar a un Real Madrid muy bien plantado sobre el terreno de juego. Se veía también un equipo muy serio y disciplinado presionando desde el inicio al equipo de Antonio Lopes.
A pesar de esto, pronto llegaría la primera acción de peligro del Vaco de Gama. No había transcurrido el primer cuarto de hora, cuando Fernando Hierro tuvo que cortar milagrosamente una acción de peligro del delantero brasileño Luizao.
Pero diez minutos más tarde (minuto 25) y de una manera fortuita, marcaba el Real Madrid el primer gol del partido.
Dispararía Roberto Carlos con dureza, y el jugador del Vasco de Gama Naza con su cabeza, despistaba al meta e introducía el balón en su propio portería. Era el 1-0 para los de Hiddink.
El resto de la primera parte estaría muy controlada por el equipo blanco con un gran trabajo de Roberto Carlos y Savio por las bandas. Así se llegaría al descanso, con victoria justa pero por la mínima de un Real Madrid que fue superior al equipo brasileño.
Al poco de comenzar la segunda mitad, Raúl pudo hacer el segundo gol para los suyos, pero su tiro salio rozando el palo izquierdo de la meta de Germano. Una grandísima oportunidad para el Real Madrid de haber incrementado el marcador.
Pero desgraciadamente para nuestros intereses, Vasco de Gama empataría muy pronto el encuentro. Juninho anotaba el 1-1 después de un rechace del meta madridista Illgner a un gran disparo del delantero brasileño Luizao. Un autentico golazo que nada pudo hacer el meta alemán. Tan sólo se llevaban once minutos de la segunda mitad y el equipo de Antonio Lopes nivelaba la contienda.
En empate de los brasileños, descolocó el encuentro. El control y la presión que tuvo el Real Madrid en la primera mitad, empezó a perderse y dejaría paso al juego de ataque del Vasco de Gama que a punto estuvo de dar la vuelta al marcador en varios acciones de mucho peligro. Felipe pudo marcar en los minutos 35 y 36 de ésta segunda mitad, pero Bodo Illgner lo evitaría con sus grandes intervenciones. El Real Madrid empezaba a desinflarse como un globo hasta que llegó la jugada mágica del partido.
Corría el minuto 83 del encuentro y los 60.000 espectadores que llenaban el Estadio Nacional de Tokio, fueron testigos del talento de un jovencísimo Raúl Gonzalez. Una prodigiosa jugada del delantero blanco, cuando peor lo estaba pasando su equipo, daba al Real Madrid la segunda Copa Intercontinental de su historia.
Un grandisimo pase de Seedorf era controlado maravillosamente por el siete blanco que dejó sentado a Vítor y a Odvan y batía al meta brasileño Germano en una de las acciones más maravillosas que se recuerdan en un campo de fútbol. Sin duda, el gol se su vida. Un gol que hizo feliz a todo el madridismo. El gol del Aguanis. Era el 2-1 para el Real Madrid. Tan sólo restaban siete minutos para que el equipo blanco se alzara con su segunda Copa Intercontinental.
Pero aún hubo tiempo para más. A cuatro minutos del final del partido, Fernando Sanz, bajo palos, evitaría el gol del empate del Vasco de Gama cuando Illgner estaba batido.
Minutos más tarde, el arbitro chileno Mario Sanchez, decretó el final del partido y el Real Madrid se alzaba con todos los honores, pero sufriendo, con su segundo entorchado mundial. Raúl Gonzalez fue elegido como el mejor jugador del partido y fue premiado por la Organización con un coche de la marca Toyota.
Al final del partido, el presidente del Real Madrid Lorenzo Sanz, no pudo contener la emoción abrazándose a todos sus jugadores y al técnico holandés. «Esta Copa nos permite superar un mal momento, el equipo dio la cara». «Hemos devuelto al Madrid a su lugar en la historia».
El técnico blanco Guus Hiddink, que se resarció en Tokio de la derrota que sufrió con el PSV en la misma competición, comentó lo siguiente. «El título nos dará confianza «. «El tanto de Raúl fue un golazo de calidad y sangre fría».
Por contra el técnico del Vasco de Gama Antonio Lopes, se lamentó por la derrota de su equipo.»Lo tuvimos en nuestras manos y no lo supimos aprovechar». «Ellos con la mitad de ocasiones que nosotros se alzaron con la Copa Intercontinental».
En resumen, una jugada prodigiosa de Raúl Gonzalez, cuando peor lo estaba pasando el Real Madrid, le dio a su equipo la segunda Copa Intercontinental de su historia.
FICHA TÉCNICA
FINAL COPA INTERCONTINENTAL
Estadio Nacional de Tokio (60.000 espectadores)
Real Madrid 2: Illgner, Sanchis, Hierro, F.Sanz, Panucci, Seedorf, Redondo, R.Carlos, Raúl, Mijatovic (Jarni), Savio (Suker).
Vasco de Gama 1: Germano, Vagner (Vítor), Odvan, Galvao, Felipe, Juninho, Luisinho (Guilherme), Naza, Ramón, Donizete, Luizao.
Árbitro: Mario Sanchez (Chile)
Goles: 1-0 Naza (p.p), 1-1 Juninho, 2-1 Raúl
Texto: @ang_royo (Ángel Royo)