#OpiniónReal | Opinar sin dogmatismos sobre España
A raíz de un vídeo que grababa para opinar sobre Fernando Hierro he conocido las visiones encontradas que suscita España. Es difícil ahondar en sus errores, porque rápidamente se le atribuye a uno falta de apoyo o incluso, antipatriotismo. Además de acusarme de que opino “desde el sofá de casa”. Creo precisamente que el sofá de casa es un lugar privilegiado, te aporta la perspectiva necesaria para el análisis y garantiza la independencia porque uno no está sometido a la relación personal.
Me mantengo en mis trece. Fernando Hierro ha asumido un papel inhóspito. Se ha tenido que hacer cargo -quién sabe si con ultimátum- de una selección cuyos integrantes concebían un entrenador distinto, como ratificó Saúl. En esta tesitura, el primer paso para Hierro es que los jugadores le vean como “uno de los suyos”. No es sencillo. Para abordarlo Hierro antepone los galones a cuestiones tácticas o de rendimiento. Así en ha sido en la primera fase. Se ha obcecado en obviar el bajo rendimiento de algunos.
Pese a todo, los designios han sido favorables. España ha sido primera de grupo, un alto premio para su escasa productividad ante Irán y Marruecos. A partir de ahora, con partidos a vida o muerte, es probable que Hierro pueda introducir cambios, que le dé menos vértigo hacerlos.
La anterior tesis, de tratar de catalogar a Hierro como un negado a la hora de entender el fútbol ni la contemplo. No se necesita un gran currículum como entrenador para ser capaz de ver lo que pasa en el terreno de juego.
Pero repito, mi favorito para ganar el Mundial es España. Más que el resto. Haber tenido tantas dificultades en la primera fase es una fórmula de madurar. El cuadro está muy despejado y hay jugadores en la reserva que tendrán un hueco a partir de octavos.
Alguno me acusa de querer quedar bien con todo el mundo, pero simplemente expreso mi opinión, híbrida y nada dogmática. España ha sido decepcionante. Hierro se ha entregado por completo a las vacas sagradas en la primera fase y, pese a todo, pienso que España es la principal candidata ahora mismo para ganar este Mundial.
Lo creo con sinceridad. También creo que todo hubiera sido más llevadero y fácil, con no haber violentado la concentración, pero a día de hoy, el camino para el final se torna viable. Y el fútbol a veces nos congracia con la paradoja; a menos méritos, más resultados. La España del 2010, la Francia de Zidane que ganó de milagro a Italia o Paraguay o la Brasil de 2002, son ejemplos de selecciones que recordamos porque ganaron, pese a que dejaron sombras en el recorrido.
Texto: @DBenavidesMReal
Foto: ElPaís