#OpiniónReal | El Madrid da su último coletazo esta temporada
En las dos últimas temporadas el Real Madrid ha perdido mucho gol. No se puede negar. No obstante, pese a esa reducción ofensiva, el equipo debería estar preparado para mejorar la nula efectividad manifestada en esta última semana. Las palabras de Modric en la previa resultaban sintomáticas. El equipo ha lidiado durante toda la temporada con la inseguridad y la falta de gestión emocional. El partido de hoy puede evocar a la derrota del Madrid en el Bernabéu con Lopetegui en el banquillo. Lo de hoy es peor, porque encima se afrontaba el partido con una ventaja que debería haber aportado calma. Nada más lejos de la realidad. El buen inicio se tornó en ansiedad generalizada. Faltaba confianza. Temple. Fiabilidad. Un jugador otrora paradigmático en esos aspectos como Kroos representaba mejor que nadie el cariz de la coyuntura.
Y la Ley de Murphy comparecía con toda su crudeza. La ausencia de Ramos se hacía notar. Las lesiones de Vinicius y de Lucas condicionaban al equipo. Y cuando se llegaba a la portería contraria, aparecía una vez más el cancerbero de turno. Estaba escrito. Este equipo de leyenda debía consumirse en algún momento. Es cierto que la caída ha resultado más que dolorosa. Especialmente porque se tiene la sensación de que el con esas piezas que decidieron salir, el equipo podría haber tenido una transición menos abrupta.
Creo sinceramente que la desconexión anímica del equipo se da en la segunda parte ante el Girona. Después de 45 minutos favorables, el equipo se vino abajo. Esa derrota sembró dudas. En ese momento el Real Madrid parecía enganchado a todo. Se desfondó. Para mí más en lo mental que en lo físico, aunque hay que reconocer que varios jugadores llegan cargados de minutos.
Los que preveían este futuro han acertado. También es verdad que desde el éxito es muy complicado tomar decisiones importantes. Ahora ya no hay ningún pretexto. El relevo debe darse. Infinita gratitud a tantos jugadores históricos, pero debe prevalecer el bien del Real Madrid. Hay que crear un equipo y se van a tener meses por delante para poder ajustar todas las piezas. Y, por supuesto, el Real Madrid debe volver a ser letal en el área contraria. No puede ser un equipo ineficaz, que tanta mella genera.
No me escondo. Pese a que no haya podido cumplir con el objetivo de mantenerse en las competiciones hasta el final, y pese al doloroso desenlace, mantengo mi consideración sobre Santiago Solari. Se le puede poner en el foco como el culpable del desaguisado y él no va a alterar lo mínimo tal atribución. Mantendrá el silencio sepulcral y seguirá comportándose con lealtad a la institución. Así lo hizo durante sus años como entrenador de las categorías inferiores. Así lo va a seguir haciendo. En el único lugar donde debe hablar es en el club. Que conozcan y sopesen el fundamento de sus –controvertidas para casi todos- decisiones los que deben pilotar el cambio de ciclo.
Foto: MARCA