Opinión Real | Florentino: dos décadas dedicadas a encumbrar al Real Madrid
El 17 de julio del año 2000 es una fecha muy importante para la historia del Real Madrid. Quedan dos días para esa fecha pero en MadridistaReal nos anticipamos y recordamos lo que sucedía en una semana como esta hace ya 20 años. Es un día que no suele estar marcado en los calendarios de las efemérides como lo están las fechas de conquista de nuestras tan preciadas Copas de Europa que abanderan las imponentes, majestuosas y venerables vitrinas del estadio Santiago Bernabéu. Aquel día, don Florentino Pérez accedió a la Presidencia del Real Madrid por primera vez. Después de prometer -y cumplir- la llegada de Luis Figo, ganó las elecciones a un gran candidato como era Lorenzo Sanz (q.p.d), que venía con dos Champions bajo el brazo tras tres décadas de sequía. Fue a partir de la llegada de Florentino cuando el Real Madrid comenzó a escribir las páginas más gloriosas de su historia desde la era de Alfredo Di Stèfano.
Esta semana se cumplen 20 años desde que Florentino asumió las riendas de un club que no marchaba bien en asuntos extradeportivos. Tras estas dos décadas, hablamos de nuestro actual Presidente como el mejor de la historia de la entidad, con permiso de don Santiago Bernabéu. No creo que ambos sean comparables, aunque sí es cierto que Pérez parece hecho a imagen y semejanza de Bernabéu, pero con las dotes de modernidad imprescindibles en nuestros días. Florentino ha sido capaz de manejar el club como una empresa, lo cual ha significado una gestión económica y financiera ejemplar y envidiable, tremendamente perfecta. Ahí está la gestión del club con el COVID-19, que ha esquivado ERTEs y demás medidas del estilo. En el año 2000 la posibilidad de que el club dejara ser de sus socios era real, y eso fue lo que empujó a Florentino a tomar las riendas de la institución, aplicando sus conocimientos empresariales a la estructura diaria del club. Gracias a ello el Madrid sigue siendo de sus socios. Y gracias a esa tarea a nivel financiero, vienen los éxitos deportivos. Es una sinergia que en el fútbol actual, aunque guste más o guste menos, resulta inevitable y necesaria. No se puede prescindir de ella y nosotros tenemos al mejor gestor en ese sentido. Florentino lo vio antes que nadie. Siempre ha sido un adelantado a los tiempos, supo prever la situación del fútbol moderno igual que a día de hoy está sabiendo leer mejor que nadie el contexto de un mercado inyectado por petrodólares y riquezas ajenas a lo que un club es capaz de generar por sí mismo. Es el mejor reinventando. De ahí que estemos reclutando a los mejores jugadores jóvenes y la puesta en marcha del nuevo Bernabéu, del que hablaré enseguida.
Pero lo cierto es que Florentino no es alguien que necesite de ningún tipo de presentación. Sí, a mi modo de ver, es justo cualquier reconocimiento que le haga el madridismo. Nunca me cansaré de pedir que la Ciudad Deportiva de Valdebebas reciba el nombre de Ciudad Deportiva Florentino Pérez. La inmensidad de su legado será valorada en su justa medida con el paso de las décadas, quizás cuando el club no goce de la estabilidad actual o cuando lo deportivo no marche como toca, algo que a día de hoy no es una preocupación, pues no tenemos la certeza de que cada partido y cada competición que disputa el Madrid vaya a ser un paseo triunfal, pero sí sentimos que ganar es más que una posibilidad. Algunos socios compromisarios han dicho en la Asamblea que «para qué queremos el mejor estadio si no sabemos competir», algo que me sorprende porque es faltar a la verdad habiendo sido dicho en una época donde se han conquistado 4 Champions en 5 años. Los resultados están ahí. No hay equipo que gane más que el Madrid.
El legado de Florentino es inmenso, pero para mi se resume en esa frase que con insistencia ha repetido con reitero como gran objetivo de su trabajo: situar al Real Madrid en el lugar que le corresponde, en el primer lugar en el mundo. Sus 45 títulos entre fútbol y baloncesto avalan este hecho. Tenemos un prestigio mundial gracias a nuestros éxitos deportivos, y gracias también a que Florentino y su junta directiva ha sabido explotar mejor que nadie la universalidad que tiene la masa social madridista, porque hay hinchas blancos alrededor de todo el mundo.
Al Real Madrid le corresponde ser el club más laureado del mundo, el que domine en Europa. Hace 20 años, cuando llega Florentino, el Madrid tiene 8 Copas de Europa. A día de hoy no las podemos contar con los dedos de las manos. 13, es una absoluta locura. Además de ser el club con mejor coeficiente UEFA durante los últimos años sin ningún tipo de oposición. Y nos corresponde también tener el mejor estadio del mundo. Parece que la reforma de nuestro templo será la guinda al pastel de la etapa de Florentino en la presidencia. Y no hay nada mejor. Lo que ha costado conseguirlo, pero es ya una realidad. Nos emocionaremos todos en la inauguración de nuestra casa renovada. El Presidente podría dedicar sus esfuerzos únicamente a que el Madrid tenga éxitos inmediatos. Sin embargo, con muy buen tino el club está preparando al club para cuando ya no tengamos al mejor gestor posible. Trayendo a los mejores jugadores del futuro y construyendo ese estadio que va a ser la principal fuente de ingresos del club. El presidente de un club como el Real Madrid no tiene solo la obligación de mantenerle arriba en el presente, si no que tiene que velar por asegurar el futuro de la entidad, y Florentino está dejando preparado el Madrid para los próximos 50 años.
Le agradeceremos en el futuro haber traido a Vinicius, a Rodrygo, a Take, a Odegaard, etc. tal y como hoy agradecemos los fichajes del pasado. Es el culpable de que Zinedine Zidane se enamorase locamente de este club. Nos ha dado todo, como jugador, como segundo entrenador y como entrenador. Tamaña leyenda sale una cada 50 años. Lo mismo con Cristiano Ronaldo, el jugador que se ha puesto a la altura de Di Stèfano. O Luka Modric, que a quién se le podía ocurrir traerlo teniendo a Alex Song, Miguel Cuevas o Santi Cazorla en el mercado, a Sergio Ramos, que viene siendo un niño y se irá siendo un capitán legendario, o Karim Benzema, esa mezcla de Ronaldo y Zizou al que Florentino fue a buscar a su casa en Francia. Dirán que no tiene proyecto deportivo, o que no sabe de fútbol, pero estos nombres que han escrito páginas doradas en nuestra historia, son apuestas de nuestro Presidente. Entre tantas presiones mediáticas, recuerdo por ejemplo que con buen criterio supimos resistir a las presiones de aquellos que pedían vender a Karim para quedarse a Morata.
Sin olvidarnos de la sección de fútbol femenino. Un gran paso para la historia de este club y que a buen seguro será un equipo que nos emocionará y nos hará vibrar a todos los madridistas. El himno de la Décima dice «Historia que tú hiciste, historia por hacer». Hay algunos que ven a nuestro equipo únicamente desde la perspectiva de la historia ya hecha y, en cambio otros como Florentino, no dejan de trabajar con vistas al futuro, buscando crear, construir y hacer historia. Así se engrandece todavía más algo que ya de por sí es inmenso.
A ningún madridista nos emociona pensar qué será del club una vez Florentino decida poner punto y final a su historia aquí. Más bien nos asusta, nos atormenta. Su legado será eterno y los madridistas estaremos siempre agradecidos. Pero lo que sé es que el próximo que venga, lo tendrá muy fácil porque el Madrid del futuro ya lo está modelando con precisión miliméteica don Florentino Pérez. Muchas gracias Presidente por estos 20 años de dedicación, esfuerzo y éxitos a nuestro Real Madrid, por colocarle en el lugar que le corresponde y por hacernos disfrutar del equipo. Enhorabuena y ojalá sean muchos años más.
Texto: Víctor Ortíz
Foto: Getty Images