Opinión | Raphael Varane, el blanco fácil
Hay jugadores que caen en gracia para la opinión pública, y sin embargo otros caen en desgracia independientemente de su rendimiento diario. El protagonista de mi artículo es de los segundos, y se trata de Raphael Varane. Sus errores ante el Manchester City fueron groseros, pero también la excusa perfecta para que muchos saquen a relucir sus prejuicios ante uno de los mejores jugadores del equipo esta temporada.
Hace algo más de un año escribía en esta misma revista un artículo en defensa de Raphael Varane cuando el francés parecía tener pie y medio fuera del Real Madrid. En ese momento eran habituales comentarios del estilo «hay que venderle y fichar a (inserte aquí el central de moda en ese momento y posteriores)» y que si llegaba una oferta interesante había que escucharla sin concesiones. Un servidor no dudaba en mostrar su confianza en el galo, no por cabezonería o llevar la contraria, sino por el propio nivel de uno de los centrales más infravalorados del mundo. Y sin ánimo de colgarme medallas, creo que llevaba razón.
Pasado todo ese tiempo hay muchas que han cambiado, entre ellas que el Real Madrid se ha convertido en el mejor equipo de España a nivel defensivo. Y en esa metamorfosis ha influido mucho Varane, además de un gran Courtois y el sistema de juego implantado por Zinedine Zidane. Hay que decirlo en el caso del central francés, porque se ha pasado de puntillas por su temporadón. Sin exagerar, ha sido uno de los 3 mejores centrales de Europa esta temporada. Errores ha tenido pocos; se me viene a la mente uno ante el Psg en la fase de grupos y poco más. Sin embargo, su último partido de la temporada, el de la eliminación europea, fue desastroso. Sus dos errores impropios de la categoría del jugador fueron clave en la eliminación, y sirvieron para que la jauría sacara a relucir todos sus reproches.
Y es aquí cuando hay que acudir sí o sí en defensa de un jugador que no merece ciertos comentarios. El habitual es el de «sin Ramos es un central normalito», algo rotundamente falso. Evidentemente cualquier central es mejor con Ramos al lado, eso es una perogrullada. Pero muchos olvidan que, habiendo hecho una temporada magistral, Ramos ha tenido más errores que Varane durante la temporada, y muchos son los partidos en los que el de Camas ha estado peor que su compañero francés, que entre otras cosas gana más duelos aéreos que su compañero de zaga (dato que no debe interesar mucho, pero que es espectacular). Es curioso como alguien puede llevar 9 años en un club, más de la mitad como titular, y ser lo que es por compartir defensa con Sergio Ramos.
El segundo mantra es el de «se diluye en los partidos importantes», más falso aún que el anterior. Ya con 19 años Varane dio exhibiciones impropias de su juventud ante el Barcelona, con dos golazos incluidos, pero es que si uno revisa partidos como las finales de Cardiff o Kiev se dará cuenta de lo ignorante de tal afirmación. Infinidad de cortes de balón decisivos, duelos aéreos ganados y delanteros rápidos que parecían lentos y torpes al enfrentarse a él. No es que se pase de puntillas, es que se obvia ese nivelazo mientras se sacan a relucir hasta la extenuación sus errores, que son bastante pocos. Solo basta repasar el palmarés del jugador y la cantidad de partidos importantes que ha jugado para tumbar esa aseveración, pero a algunos no les da para más.
Hay un refrán que dice aquello de «cuando un tonto coge una linde, la linde se acaba y el tonto sigue», y sirve para explicar lo que sucede con Varane. Algunos tienen instalada una opinión (curiosamente parecida a la de cierta prensa de sobra conocida) y no van a bajarse del burro aunque Varane sea elegido durante una década como el mejor central del mundo. Además de las falsedades citadas en este artículo, se han llegado escuchar cosas del tipo «es blando», «no sabe sacar el balón jugado» y demás lindezas. Muchos son los goles que han nacido con desplazamientos en largo del francés, y en cuanto a ser «blando» algunos tienen interiorizado que hay que ser sumamente agresivo para ser un buen central. O lo que es peor, miden a un jugador en base a dos o tres partidos, obviando una temporada fantástica. De hecho, salvo la 2018/2019 (en la que todo el equipo salvo Benzema y Vinicius estuvo horrible) el nivel de Varane ha sido de notable alto siempre.
Pero me temo que artículos de este tipo servirán de poco, y Varane, aún rindiendo nuevamente a un nivel excelente, será condenado al primer fallo que tenga. Y lo tendrá, no lo duden, como cualquier otro jugador de la plantilla. La diferencia radica en el trato, algo de lo que pueden dar fe otros jugadores como Bale o incluso Benzema, que ha necesitado rendir a un nivel de Balón de Oro para que le empiecen a reconocer algo. Yo no tengo dudas de que exceptuando a Ramos (y solo en los últimos meses tras el confinamiento) y tal vez Van Dijk, no ha habido un central mejor que Varane esta temporada. Y no por el hecho de que se diga poco deja de ser cierto.
En conclusión, en mi equipo quiero centrales tan blandos e inseguros como dicen que es Varane. Si el mejor argumento es que no rinde sin Ramos, hay que echarse a reír, primero por la falsedad del asunto y segundo por la ignorancia de quién lo afirme. Varane ha sido el mejor central de un Mundial jugando al lado de Umtiti, se pasó por la piedra al Barcelona de Messi acompañado de un Carvalho con 35 años y ha hecho partidos de sobresaliente sin la mejor versión de Ramos a su lado. Pero para eso hay que dejar al lado los prejuicios, no escuchar tanto a Manolo Lama ni leer el As y visualizar un poco los partidos y los datos. Y mal que les pese a muchos, quedan muchos años de Raphael Varane en el Real Madrid.