#Opinión | Quedémonos con Bale
A la fría temporada que nos está ofreciendo el Real Madrid éste año, sólo le faltaba el frío de Huesca para terminar de helarnos la sangre y los corazones que, si ya eran blancos, ahora tienen escarcha.
El Huesca, colista de primera división y con importantes limitaciones, consiguió que un Real Madrid sin ambición (otra vez) y que se metió en la cueva a defender un paupérrimo resultado, sufriera hasta el último minuto.
Es lo que tiene pertenecer a la estirpe madridista más laureada de las últimas décadas. No apetece jugar en un estadio pequeñito de Huesca con frío y viento, mucho menos, cuando sabes que en un par de semanas vas a ir a participar al glamouroso Mundialito de clubes. Eso sí mola.
A éste equipo se le ha olvidado remangarse. Nunca le ha gustado mucho el trabajo constante de la liga, pero ahora ya es vergonzoso. En cada salida a estadios humildes, nos cuesta un horror sacar el resultado. Y es que parece que se han metido en la cabeza, que este año quieren tirar la liga mientras van andando y deambulando por los campos de España.
Pero quedémonos con Bale. Porque si hay que quedarse con algo bueno es con algunas participaciones individuales como las de Bale, Courtois o, nuevamente, Llorente. Y me quiero quedar con Bale porque, quizás henchido de optimismo, quise ver “brotes verdes” en su participación del domingo.
Lo ví intentar regates con éxito, lo ví más rápido y participativo y además lo ví más involucrado que en otras ocasiones. Por momentos me pareció ver al Bale que nos había ilusionado años atrás.
No estoy seguro ya ni siquiera de mi criterio. No sé si ante tanta falta de algo ilusionante a lo que agarrarme, veo la realidad tal como es o solo son espejismos. Sea como fuere y por si acaso…quedémonos con Bale.
Texto: Raúl Mesa Nieto
Foto: AS