Opinión | Lunin, un héroe sin capa
Fran Santiago / Getty Images
Es difícil llenar el vacío que dejó Thibaut Courtois desde su lesión. Andriy Lunin ha logrado ganarse al madridismo y la confianza del técnico italiano gracias a su nivel bajo palos. Esfuerzo y sacrificio que se remonta a seis años atrás
Persistencia ucraniana
Andriy Lunin llegó al Real Madrid en el año 2018, desde entonces su trayectoria futbolística ha sido semejante a la de una montaña rusa. El guardameta ucraniano fue cedido hasta tres veces para crecer como futbolista. CD Leganés en 2018 y, Real Valladolid y Real Oviedo en 2019.
Desde el 2020, Lunin se asentó en el Real Madrid, asumiendo el rol de portero suplente, siempre a la sombra de Thibaut Courtois. Desde entonces, solo ha tenido la oportunidad de jugar diecisiete encuentros a lo largo de tres temporadas (Uno en 2021, cuatro en 2022 y doce en 2023).
Debido a la lesión de Thibaut Courtois, a principios de temporada, el ucraniano ha sabido ganarse la confianza de Carlo Ancelotti pese a que el club merengue fichase por necesidad a otro portero (Kepa Arrizabalaga), el cual le ha hecho competencia hasta el mes de enero.
Una titularidad y renovación merecida
Buenas actuaciones bajo palos han llevado a que el ucraniano logre la titularidad como portero del Real Madrid. Y esta semana, en Champions League, ha demostrado de lo que es capaz. Su gran partido en la portería del Red Bull Arena transmitió un alto nivel de seguridad que dejó satisfecho a Carletto, quien después del encuentro le felicitó.
Es evidente que Andriy Lunin ha hecho méritos para ser el portero titular del equipo hasta final de temporada y con ello también una renovación, la cual ya está trabajando el club desde las oficinas.