#Opinión | El Play-Off de la Euroliga
Real Madrid vs Panathinaikos. Mismo enfrentamiento de Play-Off que en la exitosa temporada anterior, pero con el factor cancha invertido. Misma emoción entre dos clásicos del baloncesto Europeo.
Se enfrenta el Real Madrid con sus 10 euroligas, frente a Panathinaikos que tiene 6 en sus vitrinas. El Real Madrid es el vigente campeón y la última vez que Panathinaikos levantó el trofeo fue en 2010 y con Zeljko Obradovic en el banquillo.
Desde el año pasado han cambiado muchas cosas.
En el Real Madrid ya no está Luka Doncic, “Wonderboy” que dominó la pasada temporada con su magia, y que decidió ese cuarto partido con un triple a tabla que hizo llevarse las manos a la cabeza a Xavi Pascual, en un gesto de incredulidad e impotencia, cuando los verdes no bajaban los brazos.
El mismo Xavi Pascual, que dirigía al equipo Heleno, fue cesado esta temporada y fue substituido por Rick Pitino.
Rick Pitino, entrenador con un gran currículo universitario, no en vano es el único entrenador en llevar a tres universidades diferentes a la final four de la NCAA: Providence, Kentucky y Louisville, pero ha tenido que emigrar de su país. Tiene también en su historial un feo asunto relacionado con prácticas ilegales en el reclutamiento de jugadores, con el FBI de por medio, ocultando pagos encubiertos, algo totalmente prohibido en el baloncesto Universitario, e incluso reclutando prostitutas como parte del reclamo para convencer a los jóvenes jugadores para que jugaran en su equipo.
Las dos etapas en las que Pitino ha entrenado en la NBA no fueron tan exitosas, como su labor puramente deportiva lo fue, en el mundo universitario. Entrenó de 1987 a 1989 a los Knicks de Pat Ewing, llegando a semifinales de conferencia, y posteriormente los Boston Celtics tres temporadas y media, desde la 97/98 hasta ser destituido en la 00/01 sin lograr ni siquiera jugar Play-Off.
Pitino ha conseguir revitalizar a Panathinaikos, un equipo que parecía ir a menos esta temporada, y que sin embargo ha hecho un final de ligar regular muy bueno, lo que le ha permitido escalar a las sexta posición.
Pitino ha construido el equipo desde dos pilares: la defensa y Nick Calathes. De éste último llegó a decir que tiene mejor visión de juego de la que tenía Magic Johnson. Parece que el señor Pitino sabe cómo dar confianza a sus jugadores.
Desde luego que a Pitino se le ve ilusionado con su aventura europea, y le gusta el juego del viejo continente, con mucha más intensidad y juego colectivo que el que se practica en la NBA. Un juego más parecido al universitario, que él tanto domina. Pocos apostaban porque Pitino encajara en una complicada plaza como la de Atenas, pero de momento el experimento funciona.
El Real Madrid deberá de cuidar el alto nivel físico que imponen los verdes, con jugadores como James Gist, Stephane Lasme, Deshaun Thomas y Thanasis Antetokounpo. El año pasado esa intensidad en el primer partido le salió muy cara al Madrid, aunque luego le sirviera para resurgir y practicar su mejor baloncesto.
El faro que guía a los verdes es Nick Calathes. Promedia 12,3 puntos y 8,9 asistencias, que en Europa es una verdadera barbaridad, pero tiene su talón de Aquiles en el porcentaje de tiro exterior. Un paupérrimo 25,8%. Una verdadera muñeca de madera. Además el equipo tiene demasiada dependencia de él. Ha terminado la temporada regular con más de 31 minutos de media por partido, y eso que en la era Pascual jugaba menos. Ojo en un Play-Off largo eso puede pesar y el griego puede terminar fundido.
El año pasado en temporada regular Campazzo le sacó de sus casillas. Calathes no es un jugador que se maneje bien en el juego canchero, y en esta seria puede haber mucho de esto.
Los tres principales escuderos de Calathes son Keith Langford, un exterior de esos que en ocasiones se le atragantan al Madrid, Ioannis Papapetrou que puede tener un interesante duelo con Deck y Deshaun Thomas, un viejo conocido que se medirá a los potentes 4 del Madrid.
El Madrid, tanto por plantilla como por juego es netamente superior. La diferencia en el juego interior con el factor Tavares, Ayón, Randolph, Thompkins más la aportación de Felipe debería de ser suficiente para decantar la balanza.
En el duelo de Atenas de la última jornada de fase regular, el Madrid sin jugar bien ganó. Eso dice mucho.
Sin embargo la sensación que hay al inicio de este Play-Off no es esa. Este año el Madrid no ha terminado de jugar bien. No ha puesto esa velocidad de crucero, no ha sido constante. Ha demostrado en algunos partidos la enorme calidad que tiene, y ha quedado tercero en la fase regular, lo cual es muy complicado. Pero en otros partidos no ha mostrado esa contundencia y eso ha generado dudas.
Llega el momento de la verdad. Si el Madrid saca su juego, pone la intensidad en defensa que sabe poner, y luego toma buenas decisiones en ataque, poco o nada tienen que hacer los griegos. El Madrid es superior.
Si vemos esa otra cara del Madrid, donde la defensa se difumina, en ataque no juega agresivo, deja de meter el balón dentro y se limita a probar suerte en el triple, comenzarán los problemas.
Con la baja de Llull Campazzo se antoja fundamental, aunque por fin Preprelic empieza a mostrar síntomas de hacerse con el equipo, sobre todo en el pic&roll, y surtiendo de balones a Tavares. Ojo puede ser su serie.
Fundamental el concurso de Rudy en este Play-Off, para poner ese nivel defensivo y de concentración y las aportaciones de Causser y de Taylor en la defensa de Calathes. Campazzo no lo podrá hacer solo.
El lanzamiento exterior de Randolph y de Thompkins caso de entrar, facilitaron mucho las cosas. Y si se tuercen las cosas, Carrol hará de “comodín del público” una vez más.
Mi opinión personal que este Real Madrid siempre da la cara. Cuando genera dudas, cuando las casas de apuestas empiezan a no contar con él, cuando hay run run, sale y demuestra que hay que confiar en él. Que es un bloque sólido, bien construido, con un proyecto detrás.
Yo apuesto por el Real Madrid y apuesto que nos vamos a divertir.
Texto: Paco Gallo
Foto: AS