OFICIAL: El Real Madrid anuncia la salida de Nacho
Ángel Martínez / Getty Images
La entidad madridista ha hecho oficial esta misma mañana mediante un comunicado que Nacho no seguirá vistiendo la camiseta del Real Madrid. El canterano y capitán merengue abandona el Real Madrid después de 23 años ligado al club y una trayectoria historia que le convierte en el jugador más laureado del club
La historia perfecta, la combinación entre madridismo y compromiso y el ejemplo de entrega a un escudo ha llegado a su fin. Todas las historias de amor tienen un final y la de Nacho con el Real Madrid ha terminado de la mejor manera posible: firmando una temporada histórica y con una nueva Champions bajo el brazo. Sus dudas en la pasada temporada a la hora de renovar fueron la antesala de un adiós que ha sido cocinado a fuego lento.
Una historia de madridismo en estado puro
Llegó al Real Madrid en 2001, lo hizo con tan solo 10 años como un canterano más que no sabía cuanto duraría su travesía vestido de blanco. Lo que no sabía el pequeño Nacho es que se iba a convertir en una de las mayores leyendas del club y que desde entones su vida estaría vinculada al madridismo durante tanto tiempo. Comenzó a crecer de la mano de la mejor cantera posible, La Fábrica, y pronto comenzó a destacar por su compromiso y firmeza en defensa.
Fue artífice del histórico ascenso del Real Madrid Castilla en 2012, justo antes de dar el salto al primer equipo. No solo ha vivido una de las etapas más gloriosas de la historia del club sino que ha sufrido todo tipo de momentos dolorosos con el escudo del Real Madrid en el pecho desde que José Mourinho le dio la oportunidad de debutar en 2011. Las 12 temporadas en las que ha estado en el primer equipo han sido las mejores de su carrera y en las que ha vivido los mejores momentos de su vida. Desde el principio nos demostró que era un madridista de corazón y así lo ha hecho hasta el fin de sus días en Valdebebas.
El bueno de Nacho ha levantado 26 títulos con el Real Madrid, convirtiéndose en el jugador con más títulos en la historia del club empatado con Luka Modric. En sus 12 campañas como jugador del primer equipo quiso que se notase su compromiso con la entidad y no paró de ganar títulos: 6 Champions League, 5 Mundiales de Clubes, 4 Supercopas de Europa, 4 Ligas, 2 Copas del Rey y 5 Supercopas de España. Sin duda, Nacho ha completado una trayectoria envidiable en el Real Madrid digna de ser recordada para siempre.
La despedida soñada
Es cierto que nunca se le ha considerado como una de las estrellas de la plantilla pero siempre que saltaba al terreno de juego cumplía. El típico jugador que no tiene malos días, solo días mejores y peores pero su rendimiento siempre era notable y algunas veces sobresaliente. Supo resistir a las tempestades del destino en tiempos de Mourinho, Rafa Benítez, Zidane e incluso con Ancelotti. Nunca ha puesto una mala cara por no jugar lo que le gustaría ni soltó una palabra más alta que la otra para reivindicarse, ya que él lo hacía en el césped.
Con las salidas de Sergio Ramos y Marcelo se convirtió en el primer capitán de la plantilla y, cuando la defensa se vio atacada por las lesiones, ahí estaba él para defender este escudo con el valor suficiente. Al igual que Kroos, ha querido despedirse de la mejor manera posible del madridismo siendo artífice de la consecución de la trigésimo sexta liga del club, de una nueva Supercopa de España y de la Decimoquinta, todos ellos levantados por él mismo.
Llegó siendo un niño y se va siendo una leyenda absoluta del Real Madrid y habiendo levantado con sus propias manos la Decimoquinta en Wembley. No había un mejor final posible para cerrar esta historia de amor incondicional entre Nacho y el Real Madrid. Se ha despedido como un señor con una carta que hará llorar al madridismo pero que nos hará felices por haber visto a Nacho defender nuestros colores. Parece que su futuro pasará por Arabia Saudí pero, después de todos estos años, da igual donde vaya porque el madridismo siempre lo recordará como el canterano que no se cansó de tocar el cielo con el escudo del Real Madrid en el corazón.
Gracias por todo, Nacho. Siempre serás nuestro eterno capitán.
