Opinión Real | No imagino un Real Madrid sin Sergio Ramos
Pocos futbolistas en la historia del deporte encarnan de forma tan imponente y diáfana la figura de líder como lo hace Sergio Ramos. Su figura es más que respetada en el vestuario del Santiago Bernabéu, que es probablemente el que acapara más egos en todo el mundo. Los jugadores del Madrid se sienten más seguros y fuertes si Sergio Ramos está con ellos.
Así lo avalan los números. Cuando el sevillano no está, el Madrid es más débil y vulnerable. Por poner un ejemplo, en las últimas tres grandes derrotas del equipo en Champions, ha estado ausente el 4. La Juventus llegó a igualar el 0-3 de la ida en la temporada 2017-2018, haciendo temblar los cimientos de un Bernabéu que se temía lo peor, hasta que un claro penalti a Lucas evitó el desastre. Ese día no estaba Ramos. Igual que el fatídico día del Ajax, la temporada siguiente, en el que encajamos cuatro tantos que hacían inútil el valioso 1-2 de la ida. Y, por último, el día del Manchester City, cuando dos errores grotescos de Varane nos apeaban de la Copa de Europa. Porque el Madrid sin Ramos es menos Madrid.
Los rivales, con Sergio Ramos delante, te respetan más. Su mera presencia impone tanto que amilana al contrincante. Porque un jugador de las condiciones de Sergio intimida, y mucho. No solo ya por su gran despliegue defensivo, que tantas noches ha amargado a delanteros monstruosos y exorbitantes. Sabido es que se trata del mejor defensor del mundo. Incluso ‘France Football’ ya se pregunta si es el más grande de todos los tiempos. Sino también por su carácter y su agresividad. Ramos es colosal tanto en su propia área como en la contraria. Su brillante capacidad goleadora nos ha dado tamañas glorias como la noche en Múnich, en Milán o, por supuesto, en Lisboa. Los rivales del Real Madrid se alegran si no juega Sergio Ramos. Y, para los blancos, es preocupante si el camero falta.
El capitán del Real Madrid se ha convertido en el buque insignia del equipo, más todavía tras la marcha de Cristiano Ronaldo. Fuimos muchos los que no aprobábamos que fuese el ejecutor habitual de jugadas a balón parado. No nos parecía lo más adecuado. Pero nos ha dejado sin palabras. Nadie los lanza mejor que él, con esa seguridad, y como buen líder quiso asumir la responsabilidad. Y para ello, lo entrenó como un loco. Un chico que falla un penalti en la tanda más importante del club en lustros, en esa noche ante el Bayern, y es objeto de burlas a nivel mundial. Algo que hubiese podido con cualquiera. Era una cura de humildad que en otro futbolista hubiera tenido como respuesta no lanzar una sola pena máxima nunca. Ramos, a la siguiente oportunidad, resuelve con un Panenka en cuartos de la Eurocopa. Un afán de superación admirable. Lo ha querido perfeccionar hasta la saciedad.
Porque se cuida y se entrena como el que más. No importa tanto la edad si el compromiso es tan alto. Joaquín sigue jugando a sus 40 años, Jesús Navas ha regresado a la selección con un nivel desorbitante a los 34, Pepe sigue siendo un central de primer nivel mundial a los 37, Ibrahimovic continua haciendo goles a sus 39 velas, como Cristiano a sus casi 36, Giggs jugó en el United hasta los 40, Chiellini aun lidera la zaga de la Juventus con 35 años, y Thiago Silva, con esa misma edad, es todavía el defensa insignia del PSG y de la selección brasileña. Y, la mayoría de ellos, sigue siendo internacional. ¿Cómo no va a poder Sergio Ramos continuar a este nivel a sus 34 años? Y especialmente viendo el físico impecable que atesora, y el rendimiento intachable que sigue ofreciendo sobre el césped. Fabio Capello nos dijo en una entrevista a MadridistaReal, hace pocos meses, que «Sergio Ramos se paraba al final de cada entrenamiento para mejorar, había que echarle del campo porque solo quería entrenar, entrenar y entrenar».
A día de hoy, ¿quién puede sustituir a Sergio Ramos? En el mercado, aun pagando más de 100 millones de euros, no hay nadie que atesore las cualidades de nuestro capitán. Y si lo hubiera, estaría por ver que pudiese responder a la tremenda exigencia del Real Madrid, y más todavía bajo la asfixiante presión de tener que suplir a un gigante como nuestro 4. En cambio, Ramos es garantía de éxito. No me imagino a un Real Madrid sin Sergio Ramos. Y creo que el club tampoco. Florentino es la persona que más quiere al capitán. Estoy seguro de que el acuerdo para la renovación llegará en cuanto las circunstancias lo permitan.
Texto: @victorvikingo_
Foto: GABRIEL BOUYS/AFP via Getty Images
