No hay que ser alarmistas
Veo mucho alarmismo en un gran sector del madridismo a causa de los sendos tropiezos que ha tenido el Real Madrid en los dos últimos partidos de liga; pero cabría que recordarles que esto no es como empieza, sino más bien como acaba, y si echamos la vista atrás podemos ver como en la temporada pasada a finales de septiembre y principios de octubre el equipo también cosecho tres empates seguidos y luego vimos como acabo la temporada, ganando todo lo que se disputó excepto la Copa del Rey.
Además, hay que analizar estos empates, donde más que jugar mal o no tener una actitud correcta simplemente se ha tenido mala suerte y la pelota no ha querido entrar. Contra el Valencia vimos como Neto lo paraba todo, excepto los dos golazos de Asensio; y contra el Levante, si bien es cierto que el equipo salió sin intensidad, como bien dijo Zidane en la rueda de prensa, y concedió un gol muy rápido, luego acabó coronando al guardameta del Levante, Raúl Fernández, como héroe inesperado al ser el gran artífice de que el conjunto granota sacase un punto del Bernabéu.
Confianza. Eso es lo que hay que tener en Zidane, que ya nos ha demostrado que las rotaciones son necesarias para llegar frescos a final de temporada y ser competitivos hasta el final. Si bien la lesión de Benzema, que estará fuera un mes aproximadamente, es una complicación añadida, no me cabe la menor duda de que el entrenador francés sabrá sacar el máximo recurso a la plantilla optando por Cristiano como máximo referente arriba en Champions y en liga cuando acabe su sanción, y dándole minutos a Borja Mayoral, que seguro que aguarda la oportunidad para reivindicar su puesto en esta plantilla.
Queda toda la temporada por delante, así que, hay que tener paciencia y no encender ya todas las alarmas.
Victor Adeva Piudo