No fue suficiente con Jude Bellingham y Rodrygo Goes
Angel Martinez/Getty Images
El Madrid empató en Vallecas a pesar de los goles de Valverde, Bellingham y Rodrygo. El inglés y el brasileño, autores del 2-2 y 2-3, fueron los que más peligro crearon en Vallecas, pero no bastó para derribar el muro rayista y conseguir los 3 puntos
El Real Madrid no pasó del empate en Vallecas ante el Rayo a pesar de reponerse y remontar momentáneamente el marcador adverso que había conseguido el conjunto rayista con todo merecimiento. Los goles de Fede Valverde, Jude Bellingham y Rodrygo Goes dieron la vuelta a la tortilla al mal arranque de los de Ancelotti, que nuevamente les volvió a pasar factura. Un mal inicio de encuentro condenó al Madrid, que vio cómo los goles de Unai y Mumin incendiaban las gradas de Vallecas, ante un público totalmente entregado a los suyos. Después de la gran reacción y remontar 3-2, Isi convertía el zapatazo de Lejeune en el 3-3, en un encuentro de ida y vuelta en el que el Madrid perdió una oportunidad de oro.
Jude Bellingham fue el encargado de hacer el empate en el marcador antes del descanso, después del gran gol de Valverde. El inglés, que anotaba su sexto gol consecutivo en Liga, y su séptimo en ocho partidos, volvió a ser el alma y el líder del Madrid en una noche fría en Vallecas. Sin duda, Jude es el líder de este Real Madrid y, probablemente, el mejor futbolista del mundo en el panorama actual.
Su presencia en el campo, su lucha incansable por cada balón, la elegancia a la hora de plasmar su fútbol sobre el terreno de juego y su manera de arropar a los compañeros, hacen de él «un jugador muy importante» para el Real Madrid, tal y como confirmó Carlo Ancelotti en la previa del partido. Un jugador sinigual, carismático y con un símil entre Zidane y Alfredo Di Stéfano, que ha recuperado el nivel del curso pasado.
La otra gran noticia para los intereses del Real Madrid fue Rodrygo Goes. A pesar de que el Madrid no consiguió el triunfo en Vallecas, Rodrygo fue de los aspectos más rescatables y positivos en el partido. El brasileño, jugando por la izquierda, sin Mbappé ni Vinicius, creó peligro y fue creciendo de menos a más. Suya fue la asistencia en forma de centro para que Bellingham anotara el 2-2 y su latigazo desde fuera del área, en la segunda mitad, sirvió para poner al Real Madrid líder momentáneo y firmar la remontada, hasta el gol de Isi. El brasileño llevaba 81 días sin marcar, y frente al Rayo, consiguió por fin romper su sequía.