#MiradaBlanca | Asalto al infierno
En el deporte solo las leyendas son capaces de ganar independientemente de donde jueguen. Da igual que sea en su propia casa o en un infierno capaz de amedrentar al jugador más frío.
Pues bien, este último ambiente es el que va a tener que afrontar y superar el Real Madrid en estas próximas 48 horas. Y es que pese al subidón de moral que supuso el triunfo en el segundo choque, la derrota en el primero todavía sigue siendo una losa para los madridistas que les obliga a ganar al menos uno de los dos encuentros del Buesa Arena.
Este mismo domingo a las 18,30h tendrán su primera oportunidad los de Laso en un tercer encuentro que generalmente es decisivo en la eliminatoria. La clave para conseguir el triunfo parece clara: mejorar defensivamente y no permitir los 92 puntos de media que han encajado los blancos en los dos primeros choques ni, por arranques tan nefastos en lo que a intensidad atrás se refiere como el del pasado viernes.
En este sentido puede tener especial importancia la probable baja de Voigtmann. El alemán, que se lesionó en el último partido, sin ser un jugador referencia para Pedro Martínez, estaba siendo decisivo para abrir huecos a Shengeila o Poirier sacando de la zona a Tavares por lo que su ausencia puede ayudar a que el gigante de Cabo Verde construya un muro en su zona. Si los blancos logran cerrar en la pintura y no permitir a Janning, Huertas o Beaubois jugar liberados fuera la victoria estará mucho más cerca en un ambiente que pese a ser infernal no lo es más que el OAKA (y ahí ya sabemos que se puede ganar).
Texto: @jmcanasv
Foto: AS