Los mejores momentos de Isco con el Real Madrid
A día de hoy, todos nos acordamos de ese ‘SuperMálaga’ de la temporada 12/13 que casi se mete en semifinales de Champions. Aquel equipo estaba formado por grandes jugadores como Joaquín, Camacho, Baptista o Demichelis que vivieron en el club andaluz uno de los mejores momentos de su carrera. Sin embargo, había un jugador que deslumbraba por encima del resto, un jugador que solo con verlo unos minutos podías apreciar que era distinto. Tenía 20 años, le llamaban Isco y ya se había embolsado el Golden Boy, además de tener a todos los grandes de Europa detrás suya. El Real Madrid y el Manchester City fueron los clubes que más pujaron por él, pero finalmente los blancos pagaron 30 millones de euros y se hicieron con sus servicios. Hoy vamos a repasar sus mejores momentos en estos 6 años y medio que lleva en el club 13 veces campeón de Europa.
PRIMEROS PASOS
Cuando llegas a un club nuevo los primeros partidos siempre son complicados, tienes que adaptarte a un nuevo estilo de juego, a tus compañeros… sin embargo, Isco debutó con el Real Madrid como titular en su primer partido oficial y siendo el hombre clave del encuentro. Se estrenó en la primera jornada de liga ante el Betis, partido que los blancos iban a ganar 2-1 y en el que el malagueño iba a dar la asistencia del primer gol y anotar el segundo a 4 minutos del final para sellar la remontada. En este choque ya íbamos a observar que el joven fichaje del Real Madrid desbordaba fútbol cada vez que tocaba la pelota y, en un mal partido de su nuevo equipo, consiguió llevar el peso del encuentro, demostrar que no le tenía miedo a este reto y que había llegado para ser titular. Con el paso de las jornadas Isco se empezó a asentar en el once titular, Ancelotti le demostraba su confianza y el ex del Málaga no fallaba a su nuevo técnico. Aunque durante el tramo medio de la temporada sus minutos bajaron, la terminó en plena forma, siendo titular en la final de copa ante el Barcelona y jugando 60 minutos en la final de Champions ante el Atlético. Ambos títulos se ganaron e Isco terminó su primer año con matrícula de honor, 53 partidos, 11 goles, 7 asistencias y 2 títulos, números increíbles en la que es hasta el momento su temporada más goleadora vestido de blanco junto con la 16/17.
SU GRAN AÑO DE LA MANO DE ZIDANE
Vamos a irnos directamente a su tercer año en el club de Chamartín, donde el de Arroyo de la Miel iba a vivir uno de sus peores momentos en el club con Rafa Benítez en el banquillo. El técnico madrileño no confiaba en él y no le brindaba los minutos necesarios, sin embargo, los malos resultados provocaron su destitución y la llegada de Zinedine Zidane como nuevo entrenador.
Isco y Zizou ya coincidieron en el año de la Décima cuando este último era segundo entrenador y no era ningún secreto que al francés le gustaba mucho el malagueño. Esto lo íbamos a apreciar en la temporada 16/17, el famoso año del doblete, en el que Isco iba a estallar e íbamos a ver su mejor fútbol. Realmente podría hacer un artículo entero sobre esta temporada porque su rendimiento fue excelso, combinó su capacidad goleadora que vimos en el Málaga y en su primer año de blanco, con su capacidad de liderazgo de los dos años anteriores a este. Isco jugaba en prácticamente todos los partidos y formaba más parte de la unidad A que de la B. Fue en este año en el que se consagró como ‘Magia’, ‘Magisco’ o como queráis llamarle, porque aquí nos demostró lo que sabía hacer, transiciones rápidas, regates increíbles con el balón bien pegadito al pie y gol.
Poco más se le puede pedir, pero además cumplía otra función que pocos apreciaban, si Modric, Kroos y cía no estaban ese día ya se encargaba él de retrasar un poco más su posición y liderar a todo un Real Madrid, algo que pocos jugadores han podido hacer. El resultado de aquel año no podía ser otro que excelente, más en concreto se ganó la Liga, la Champions, la Supercopa de Europa y el Mundialito de Clubes.
RECITAL EN GIJÓN
Probablemente su mejor partido con la camiseta blanca y como no, tenía que ser en esa temporada 16/17, ha tenido otros muy buenos esa temporada como ante el Atlético o Betis, pero en mi opinión el del Sporting es el mejor de todos. Estábamos en la jornada 32, Real Madrid y Barcelona estaban empatados a puntos y tocaba ganar para seguir con el liderato. El equipo de Zidane venía de asaltar Múnich esa misma semana, por lo que había que rotar el equipo, en esas rotaciones entró Isco, que formó centro del campo con James y Kovacic.
El encuentro no empezó bien ya que los locales se adelantaron con el gol de Duje Cop, pero en ese momento sacó la varita Isco y comenzó el festival. Cinco minutos después el ‘22’ recibió la pelota dentro del área, se marchó de tres rivales y con un gran disparo superó a Cuéllar. Hasta sus compañeros se reían en la celebración por la locura que acababa de hacer, en ese partido al malagueño le tirabas cualquier cosa y te la bajaba, parecía que tenía un imán en la bota.
Tras los goles de Vesga y Morata el 2-2 imperaba en el marcador, por lo tanto Francisco tenía que ponerse el mono de trabajo, ya estuvo a punto de marcar en una jugada en la que se marchó de cuatro rivales y dejó a otros dos en el suelo, ya sabéis, locuras de las suyas. Pero como aquel Real Madrid era el del famoso minuto 90, pues había que hacer las cosas a su debido momento, por lo que, en ese mismo minuto, recibió un pase de Marcelo y desde fuera del área superó a Cuéllar con un disparo raso y puso el 2-3 definitivo. ‘Genio, Genio’ o ‘Isco vale por tres’ fueron algunas de las portadas de los principales diarios deportivos al día siguiente, para que veáis que no exagero.
SKOPJE, EL BARÇA Y EL BALÓN DE ORO
Tras culminar aquel gran año con la Champions ante la Juventus, llegaba otro nuevo año con el complicado reto de superar al anterior. El Real Madrid empezó con las dos Supercopas, primero la de Europa ante el United en la que el de Arroyo de la Miel fue nombrado MVP del partido, tuvo loco al United durante todo el encuentro e incluso anotó el 2-0 tras una buena pared con Bale.
Después de conseguir el primer título de la temporada, llegaba la Supercopa de España ante el Barcelona, quizás no le recordemos tanto en este campeonato pues quedó eclipsado por su amigo Marco Asensio. Solo jugó en la ida, pero prolongó su buen momento de forma, en una actuación que no fue tan buena como contra el Manchester de Mourinho, pero en la que pudo dar la asistencia a Cristiano para el 1-2. Todo esto lo iba a conseguir dentro de 2017, su gran año, en el que, tras continuar con buenas actuaciones en Liga y Champions, iba a terminar consiguiendo el 12º puesto en el Balón de Oro.
LA CHAMPIONS DE KIEV
Esta Champions estará en la memoria de cualquier jugador del Real Madrid, no solo porque llevaban dos seguidas, sino por la dificultad de los rivales. Dortmund, Tottenham y Apoel para empezar en fase de grupos, en octavos esperaban el PSG de Mbappé y Neymar, en cuartos la Juventus, en semifinales el siempre complicado Bayern y para finalizar el Liverpool de Klopp al que temía toda Europa. Isco tuvo un papel protagonista en este título, fue titular en todos los partidos a excepción de la vuelta ante el PSG, donde salió desde el banquillo, y el partido ante el Apoel en Chipre, donde no jugó.
Si hay que remarcar un partido suyo en esta edición es sin duda la ida de cuartos en Turín, es cierto que todos nos acordamos de la chilena de Ronaldo, pero el encuentro fue mucho más que eso. Isco completó con acierto los 54 pases que intentó, dio la asistencia del 0-1 y fabricó el 0-3 junto con Marcelo y Cristiano. En resumen, se volvió a merendar a un rival al que ya se merendó en la final de Cardiff.
Haciendo síntesis de lo que ha conseguido con la camiseta del Real Madrid, 4 Champions, 4 Mundiales de Clubes, 3 Supercopas de Europa, 2 Supercopas de España, 1 Liga y 1 Copa del Rey. En total, 15 títulos y casi 300 partidos vestido de blanco, que esperemos que sean muchos más para que pueda seguir maravillándonos con su fútbol en el Bernabéu.
Foto de portada: La Sexta.