La transformación de Arda Güler
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El turco está siendo una de las mayores sensaciones del Real Madrid en esta pretemporada. Arda, que ya acabó el curso pasado como un tiro y cuajó una Eurocopa espléndida con su selección otomana, está llamado a ser uno de los jugadores que den un salto este mismo año en el conjunto blanco
Arda Güler está imparable. Así lo demuestra en cada partido y en cada entrenamiento de la gira de pretemporada del Real Madrid en Estados Unidos. Carlo Ancelotti, el staff técnico y sus propios compañeros está alucinando, muy asombrados, de la evolución de un futbolista que llegó al equipo con 18 años, que ha sufrido varias lesiones y que ha sabido sobreponerse a esa presión que todo jugador del Real Madrid, por muy niño que sea, tiene que pasar. Eso lo sabe Arda Güler, y se podría decir que lo ha pasado con matrícula de honor.
Tras unos primeros meses en la capital donde el jugador no había podido demostrar sus extraordinarias cualidades, Güler se supo armar de valentía y con mucho trabajo ahora es uno de los jóvenes que están llamados a liderar el Madrid del presente y del futuro. En estos dos encuentros de pretemporada en los que ha deslumbrado a todos los habidos y por haber, con dos grandes actuaciones frente a Milan y Barcelona, ya no hay dudas de que la joya turca se ha asentado en el equipo merengue de la mejor forma posible.
El joven futbolista turco ha vuelto de sus vacaciones más fuerte, con mucho más músculo y físico y con una tranquilidad pasmosa para saber interpretar lo que pide cada partido. Esa calma, bien es cierto, que siempre la tuvo, pero ahora se le ven mimbres de jugador más maduro y más sereno a la hora de llevar el peso de un partido. Es pretemporada y no hay que sacar demasiada conclusiones, pero lo que está claro es que Güler ha dejado a todos con la boca abierto. «Ha llegado muy bien. Ha entrenado muy bien en vacaciones, más potente, más resistente y con más calidad. Va a ser una temporada importante para él, con más protagonismo que el año pasado», afirmó el técnico transalpino tras el primer encuentro ante el Milan.
En un nuevo sistema de Carlo Ancelotti, con el típico 4-3-3 por el que ha apostado casi siempre, Arda se encuentra muy cómodo, jugando, además, con un 4-4-2 en fase defensiva. Volcado al costado derecho, jugando de extremo a pierna cambiada, Arda Güler ha sabido leer muy bien su rol y lo que le pide Carlo. Se mueve muy bien porque tiene la capacidad de leer el juego, de encarar y sobre todo, de ponerle brillo a cada jugada de ataque del Real Madrid.
No solo tiene una zurda exquisita para golpear, también tiende a meterse por dentro y repartir pases en zona de tres cuartos y ser un peligro constante para las defensas. Su fútbol, su manera de jugar, hacen de Arda Güler un jugador indetectable. Un mago con innumerables trucos, a cada cual mejor, y un futbolista que tiene mucho presente y un deslumbrante futuro.
