Jaycee Carroll | El Hombre de Laramie
The Man from Laramie es un western dirigido en 1955 por el gran Anthony Mann y protagonizado por el no menos grande James Stewart. En esta película, Jimmy Stewart interpreta a un capitán del ejército que se hace pasar por comerciante con el fin de descubrir quien está vendiendo armas ilegalmente. Un tipo duro para resolver un asunto muy feo.
Sin embargo, siempre que pienso en El Hombre de Laramie o en un tipo duro, la persona que me viene a la cabeza es el gran Jaycee Carroll.
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Jaycee nació en 1983 en la pequeña ciudad de Laramie, en el estado de Wyoming, en pleno Wild West de Estados Unidos. Una ciudad con una relación muy estrecha con la naturaleza (las Montañas Rocosas están siempre presentes), y marcada por la fiera climatología invernal con temperaturas casi siempre bajo cero y vientos que -créanme- intimidan de forma muy seria.
Por circunstancias familiares, conozco muy bien Laramie, donde Jaycee nació y creció, y por ello creo poder intuir el origen de su profesionalidad, su carácter competitivo, dureza mental, disciplina, tremenda ética de trabajo y búsqueda permanente de cómo mejorar. Solo una persona con estas características podría crecer en Laramie y convertirse en el increíble jugador que hoy es. Casi puedo ver a Jaycee tirando a canasta en las muchas pistas donde yo también lo he hecho…
El pasado jueves 14 de noviembre disfrutamos de un gran partido de Euroliga en el espectacular WiZink Center, el otrora entrañable Palacio de los Deportes de Madrid. El rival que nos visitaba era el remozado y potente Barcelona de los fichajes a golpe de talonario de este verano, encabezados por Nikola Mirotic. Otro de esos clásicos que nunca defraudan… pero este partido era diferente por varios motivos.
El primero, muy obvio, fue la vuelta de Nikola Mirotic y la animadversión (bastante justificada por sus actos y declaraciones) que despierta en la hinchada blanca.
Mirotic hizo otro de sus buenos partidos “estadísticos” mientras que su equipo perdía… En el momento de la verdad, el último cuarto donde se jugaban las habichuelas demostró una vez más su escasa capacidad para lidiar con situaciones difíciles. Para mí no fue ninguna sorpresa. Muchos conocen desde hace años mi opinión sobre este jugador, especialmente desde aquella final ACB 2014 donde “dimitió” en el campo, siendo superado una y otra vez, y el Barça se llevó la llamada Liga del año de los récords.
Pero para mí, ese no fue ni mucho menos el factor más importante del partido… Lo fue Jaycee Carroll. El encuentro del jueves fue un carrusel de emociones y alternativas, con parciales en uno y otro bando que hicieron oscilar el marcador de forma constante. Quizá por ello, no mucha gente se percató de que Jaycee Carroll no jugó ni un solo minuto del partido.
A pesar de no jugar, pudimos verle durante todo el partido en el banquillo con su característica concentración, listo para saltar al campo en cuanto el entrenador se lo pida, y agitar el partido con su frenética actividad aderezada con triples imposibles o sus cada vez más frecuentes entradas con bombita. Y por supuesto, encargándose también de perseguir a su par por todo el campo para erosionar la fluidez de su juego y desgastar su contribución.
Jaycee no jugó ni un minuto, y resulta inevitable pensar que estamos contemplando los últimos partidos de un jugador que ya podemos considerar leyenda, alguien que llegó hace muchos años a nuestro equipo y parece que está con nosotros desde siempre.
Hace unas semanas su esposa Baylee destapó las sospechas que ya flotaban en el ambiente al publicar la foto de una cena de despedida con sus amigas, y confirmando que se marcha con los niños a su rancho de Utah con meses de antelación con respecto al final de temporada. El club no ha confirmado nada oficialmente, pero es un hecho que Jaycee acabará su contrato con 37 años…
Lo cierto es que por su rendimiento no parece un jugador en retirada, pero su edad (como la de Felipe) invita a pensar en lo inevitable por ley de vida.
Jaycee Carroll es un tipo de jugador que entronca con una histórica estirpe de tiradores blancos: Brabender, Walter, Jackson, Herreros, Bullock… Sería difícil decidirse por uno de ellos, aparte de las diferencias de juego entre épocas, pero sin duda Jaycee es el que a priori tiene “menos” condiciones naturales para el juego: es el más bajito, junto con Bullock, de los menos rápidos (que no lento), con poco peso… pero probablemente no haya habido NADIE con su ética de trabajo, con su infinita concentración y su determinación a aprovechar los minutos de juego, sean 7 o 37, para ser útil para su equipo aportando en todo lo posible, en defensa, en ataque, tirando o en penetración…
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Su categoría es conocida desde hace mucho tiempo: fue elegido el mejor triplista de la NCAA en el siglo XXI, por delante de gigantes como Kyle Korver, JJ Reddick o Stephen Curry, 15º en la lista al haber jugado solo 3 temporadas. Como curiosidad, si Curry hubiera jugado una cuarta temporada con los mismos promedios hubiera sido… el segundo de la lista, aún por detrás del gran Jaycee, quien anotó 369 triples con un increíble 46.5% de acierto ¡Que locura!
Jaycee Carroll es contemporáneo de varios de los mejores jugadores (y tiradores) de los últimos 30 años: Juan Carlos Navarro, Vassilis Spanoulis, Nando de Colo, Milos Teodosic… jugadores realmente salvajes en cuanto a anotación y capacidad de decidir. Las comparaciones son casi siempre odiosas, pero yo me pregunto ¿tiene alguno de estos grandes jugadores la eficiencia de Jaycee por minuto jugado? ¿Alguno de ellos no fue siempre la primera referencia de su equipo, el jugador que más tiros lanzaba? Ninguno. Solo Jaycee Carroll tuvo la capacidad de adaptarse a un equipo ganador aceptando un rol secundario después de ser 2 veces máximo anotador ACB (2009-10 y 2010-11) y, aun así, seguir siendo extremadamente productivo…
Su historial habla por si mismo. Lleva 12 temporadas en Europa: 1 en Brescia, 2 en Canarias, y ya estamos en su novena temporada en el Real Madrid. Antes de llegar al Real Madrid, sus promedios ya eran tremendos como primera opción en Teramo y Canarias: jugaba 28 minutos por partido, lanzaba casi 14 tiros y anotaba 18 puntos, con un 52% de tiros de campo, 42% en triples y 88% en tiros libres.
El Real Madrid buscaba un sucesor (que no sustituto) de Louis Bullock, quien había dejado el club un año antes. Los responsables del club (ya sabemos quiénes son, afortunadamente llevan años gestionando bien) vieron claramente que no podía haber nadie mejor que Jaycee Carroll para ese puesto, quien como he mencionado anteriormente, había ganado los dos últimos títulos de máximo anotador, el “Capocannoniere” ACB.
Desde que llegó al Madrid sus números indican lo que realmente es Jaycee: un GRAN jugador de equipo. Como era de esperar, varios de sus promedios bajaron: pasó a jugar 18 minutos por partido, lanzando 7.6 tiros lanzados (casi la mitad) y anotando 10.5 puntos (de nuevo, casi la mitad) … pero elevando sus ratios de efectividad: 48.6% en tiros de campo, 43% en triples y manteniendo su sólido 88% en tiros libres. Además, se convirtió en uno de los puntales de la presión defensiva de Pablo Laso, junto con Slaughter primero y Taylor después. Jamás se quejó y fue siempre fundamental en los éxitos del equipo.
Ha sido un claro protagonista en la ya histórica “era LASO”, ambos han coincidido en sus 9 temporadas en el club, y la lista de títulos ganados “hasta ahora” es impresionante: 2 Euroligas (2015 y 2018), 5 Ligas ACB (2013, 2015, 2016, 2018, 2019), 5 Copas del Rey (2012, 2014, 2015 y 2016, 2017) … no muchos pueden presumir de semejante palmarés.
En cuanto a títulos individuales, aparte de sus logros NCAA, los títulos de máximo anotador en España, así como formar parte del mejor quinteto ACB 2010-11, me he permitido nombrarle el “casi MVP” de varias de las grandes victorias del Real Madrid: en la final de Copa 2012, Carroll hizo 22 puntos, 4 rebotes y 27 valoración, pero el MVP se lo dieron a Llull (quien también lo mereció). En la final de Euroliga 2015 Carroll fue el máximo anotador del Madrid con 16 puntos, 11 decisivos en el tercer cuarto, pero el MVP fue para Nocioni (quien, por supuesto, también lo mereció). En la final ACB 2015 Carroll anotó 19 puntos en el partido definitivo, aunque el MVP se otorgó a Sergio Llull (quien naturalmente, también lo mereció).
Desde un punto de vista personal, Jaycee es un tipo de jugador que me produce una admiración enorme. Su ACTITUD (en mayúsculas), su energía, fiereza competitiva, determinación… y ese tremendo control personal que evita que se “despiste” ante las innumerables faltas que recibe en los “carretones” que necesita hacer para encontrar posición, siempre perseguido de cerca por su defensor. Es normal, todos saben que NO puedes dejar tirar a Jaycee. Por eso algunos han acabado frustrados y han intentado “desequilibrarle”. Un esfuerzo baldío… Es curioso que un jugador tan correcto con Jaycee Carroll, que nunca se mete en ningún problema, despertara en algún momento las iras de gente tan “curiosa” como Víctor Sada o Ante Tomic… incluso Navarro se revolvió una vez contra él, pero la Bomba es tan grande que se lo perdonamos.
Otro aspecto que me admira de Jaycee es su capacidad defensiva, descubierta e impulsada por Pablo Laso, quien supo sacar un gran rendimiento de alguien que fue siempre una máquina ofensiva, y a quien convirtió en el defensor del base rival en todo el campo, algo muy difícil de hacer cuando el contrario es más rápido que tu. Nunca le importó. Siempre hace su trabajo defensivo, contagia su energía, infunde confianza al equipo… y por supuesto, sigue anotando de forma impenitente.
Ahora que parece que se acerca el final, la pregunta es ¿quién ocupará el lugar en el equipo y en la futura historia que dejará el gran JAYCE CARROLL?
Pero esta es una pregunta para más adelante. Lo que ahora nos toca es disfrutar de un jugador LEGENDARIO en los partidos que aún vendrán por delante y, muy importante, pensar en la mejor manera de decir a JAYCEE CARROLL un gigantesto GRACIAS POR TODO.
Para siempre, uno de los nuestros.
Texto: @AlfredoNoya
Foto: GERARD JULIEN/AFP via Getty Images
