Gonzalo García: «Mi prioridad era tener ficha del primer equipo, el dorsal es secundario»

Michael Reaves/Getty Images
El delantero madridista vive su primera experiencia en la Sub-21
Radiante de felicidad y con ganas de comerse el mundo, Gonzalo García ha concedido una entrevista al Diario AS durante la concentración con la selección Sub-21. La pasada semana recibió la llamada de David Gordo, técnico que ha recalado en La Rojita en detrimento de Santi Denia, y el canterano blanco ya se prepara para afrontar los envites ante Chipre y Kosovo valederos para la fase de clasificación de la Eurocopa.
Convocatoria con la Sub-21: «Muy contento y feliz de estar en la Sub-21 y representar a la Selección. La verdad es que me enteré por el móvil, antes de salir a entrenar cuando salió la lista. Y con todo el revuelo que se hizo por redes».
¿Piensa en el Mundial con la Absoluta?: «Claro que sí. Mi ambición siempre es máxima. Poder representar a mi país en un Mundial… es un sueño. Como lo será para cualquier otro jugador».
Diferencias entre Xabi y Carlo Ancelotti: «Con Ancelotti el año pasado subí en momentos muy puntuales. Le estoy muy agradecido por darme la oportunidad de debutar con el primer equipo. Tampoco es que pudiera estar tanto tiempo el curso pasado como para opinar. Lo que puedo hablar es de Xabi y de lo que nos viene diciendo. De que hay que pulir esos detalles para acercarnos a lo que él nos está transmitiendo».
Titularidad ante el Al-Hilal: «No voy a mentir, sabía que había una posibilidad, porque Kylian estaba enfermo. Obviamente me sorprendió, pero lo afronté con confianza. Seguro de mí mismo, porque había trabajado para aprovechar cualquier oportunidad. Y muy contento por cómo me fue».
El galimatías con el dorsal: «En verano mi representante negociaba con el Madrid y me comunicaba las opciones que había, pero al final, mi prioridad era tener ficha del primer equipo. El número es secundario. Lo importante es poder jugar en el mejor club del mundo. ¡Con cualquier dorsal!».
El salto de Gonzalo García al primer equipo: «Al final sí es cierto que pasas de jugar en el Castilla y de ver a tus ídolos por la tele a entrenar con ellos y eso, claro, te impresiona. Luego el tiempo pasa, te acostumbras y lo que estás es muy agradecido de poder compartir vestuario con ellos, con los mejores jugadores del mundo».