Final Four 2019 | El Real Madrid no podrá defender el cetro europeo (95-90)
El Real Madrid Baloncesto no ha podido defender su cetro europeo, tras caer derrotado en semifinales ante el CSKA de Moscú por 95 a 90, en un partido donde dejó escapar una importante ventaja en el último cuarto.
Laso apostó por un quinteto menos ortodoxo de partida; aquel formado por Campazzo, Rudy, Taylor, Randolph y Tavares. Y el partido no pudo empezar de mejor manera que con un mate de la torre caboverdiana. Pero si algo teníamos asumido incluso desde antes de comenzar el encuentro es de la enorme dureza y tensión que se iba a respirar en cada jugada. Dos canastas sencillas inexplicablemente falladas por Jeff Taylor daban buena muestra de ello.
El juego rápidamente se endureció y las infracciones y errores se sucedían en ambos lados de la pista. El carrusel de tiros libres era una realidad. Con 2 tiros libres de Campazzo, el conjunto blanco ponía el 3-6 en el marcador. Pero un triple de Clyburn volvía a igualar la contienda (6-6, min. 3).
Cada punto costaba sangre y sudor conseguirlo. Y es en este tipo de situaciones donde la experiencia y calidad de jugadores como Rudy son un plus para cualquier equipo. El escolta balear anotaba, asistía y siempre elegía la mejor opción en ataque. Precisamente con una asistencia suya al Facu, que dio lugar a un triple desde la esquina, el conjunto blanco obtenía la primera ventaja relevante del partido (7-13, min. 5).
Con Llull en pista, el ritmo del partido subió un par de niveles. Chacho en el combinado ruso y Randolph en el madridista asumieron el protagonismo ofensivo. Con el norteamericano enchufado y la espectacular aportación de Tavares en la zona, con 6 puntos, 7 rebotes y 3 tapones para 15 de valoración, la hegemonía madridista sobre el parquet se consolidaba al término del primer cuarto, donde solo el Otro parecía responder al envite blanco (18-22, min. 10).
El segundo cuarto comenzó con una dinámica semejante. Pero con diferentes protagonistas. Carroll se estrenaba en el casillero anotador con una bombita, mientras Deck aportaba solidez a la hora de ir al rebote y luchar por cada balón dividido. Pero el Otro seguía entonado, superando a su ex compañero Llull, anotando y buscando en situaciones ventajosas a sus compañeros del CSKA. Así, los rusos no lograrían solamente igualar la contienda sino también ponerse por delante en el marcador por primera vez en el partido con un triple del Chacho (29-28, min. 14).
Un triple de Causeur era contestado inmediatamente por el Otro con un tiro de 5 metros. Sin Tavares, el Madrid adolecía de cierta fragilidad interior, con un Ayón excesivamente fallón. Tras varios intercambios de faltas y errores, el marcador reflejaba la enorme igualdad entre ambos equipos (36-36, min. 18).
El escolta francés seguía entonado de cara al aro, anotando 9 puntos y sosteniendo a su equipo en un momento complicado. Y con un triple de Thompkins los merengues volverían a poner tierra de por medio en el luminoso (37-43, min. 19). Pero los moscovitas reaccionarían justo antes de llegar al descanso, y con un triple sobre la bocina de Clyburn, convertirían su desventaja en testimonial (43-45, min. 20).
Tras el paso por vestuarios, como si de un déjà vu se tratase, Rudy en tareas ofensivas y Tavares en el aspecto intimidador volverían a ser los pilares sobre los que se construiría el juego de los chicos de Laso. Sin embargo, eso no se traducía en una importante ventaja en el marcador (46-51, min. 23).
El ritmo volvería a decaer y el arbitraje ganaría su cuota de protagonismo. Con un 2+1 forzado por el Facu sobre la defensa del Chacho, que suponía su tercera falta personal, y posteriormente con un ganchito de Ayón desde la zona central, el sector de la grada donde se agolpaba la afición madridista estallaría de optimismo (48-56, min. 24). El CSKA vivía sus peores minutos del partido. Con un triple de Randolph, el Real Madrid rompería la barrera de los diez puntos, obligando a Itoudis a cortar la sangría con un tiempo muerto (50-61, min. 25).
Causeur volvía a cobrar protagonismo en el ataque blanco, mientras el Otro parecía haber desaparecido del escenario. Pero un 2+1 de Llull y un buen corte a canasta de Deck no eran suficientes para compensar los errores propios y sostener la ventaja ante el envite ruso en los instantes finales del tercer cuarto (65-73, min. 30).
El último cuarto arrancaba con un intercambio de golpes que no parecía perjudicar a los madridistas. Con un 2+1 de Llull, el Real Madrid ganaba un poco de oxígeno (69-78, min. 32). Era el momento de la verdad, donde la tensión y las palpitaciones baten el récord de la temporada. La experiencia del CSKA poco a poco se iba notando. Tampoco las dos mandarinas de Llull sin final feliz ayudaban a calmar los ánimos (73-78 min. 34).
Además, Laso se encontraba con varios jugadores con serios problemas de faltas, especialmente Rudy Fernández al borde de la eliminación. Una técnica señalada al técnico vitoriano, indignado con el arbitraje sufrido en los últimos minutos, prácticamente suponía el empate técnico. Con un triple de Clyburn, el optimismo y las sensaciones positivas cambiaban de bando (79-80, min. 36).
Jeff Taylor, desde el triple, marcaba el camino. Llevaba un mal partido pero el sueco no iba a hacer dejación de funciones. Una asistencia suya a Randolph que anotaba en mate daba buena muestra de ello (82-85, min. 37). Pero en frente, Higgins empezaba a carburar y un triple de De Colo ponía a su equipo por delante justo en el tramo decisivo del partido (87-85, min. 38).
Randolph fallaba una bandeja que prácticamente era canasta y los nervios hacían acto de presencia. Con 4 abajo, el Real Madrid entregaba su destino en el partido a Rudy. Dos tiros libres anotados por el alero balear volvían a meter en el encuentro a los merengues a falta de 25 segundos para llegar a su conclusión (89-87, min. 39).
Dos tiros libres del Chacho prácticamente certificaban la victoria del CSKA. 17 segundos y 4 abajo (91-87, min. 39). Acto seguido, un triple de Llull rozaba el milagro. Pero Clyburn anotando sus dos tiros libres y un rebote ofensivo birlado en el último momento a Randolph certificaban la derrota madridista en el Buesa Arena. Al final, 95-90. Una vez más se demuestra lo difícil que es repetir el título en la Euroliga. Hala Madrid.
Texto: @Bricepinkfloyd