Euroliga | Un Real Madrid con la pólvora mojada se deja su imbatibilidad en Grecia
Los blancos viajaban a la metrópolis griega en busca de mantener la imbatibilidad y conseguir la segunda victoria de Euroliga en un pabellón que, aunque no estuviera lleno se podía respirar el ambiente de clásico europeo.
Tavares estrenaba el marcador para los blancos pero tenía que retirarse por un corte en la ceja. Con un planteamiento muy defensivo por parte de ambos equipos, los primeros minutos del choque estuvieron marcados por la baja anotación y ataques largos. Los de Laso se encontraban con una falta de fluidez en ataque que les lastraba en un inicio muy ajustado. Los griegos dominaban el rebote ofensivo lo que desembocaba a que se produjeran faltas personales bajo canasta. Llull conseguía acabar con la sequía de los madridistas y ponía a los merengues a 3 puntos. El Madrid acababa el primer cuarto abajo en electrónico (13-10).
Llull arrancaría el segundo cuarto con un triple y ponía fin a la mala racha desde el 6,75. Pero Printezis y Larentzakis mantenían la ventaja para Olympiakos. La pareja interior más dominante de Europa jugando a la vez en pista reventaba el aro en dos ocasiones consecutivas y mantenía al Madrid enganchado en el marcador. Nigel Williams-Goss anotó tres tiros libres e igualaba el encuentro a 30 puntos a tres minutos del descanso. Poirrier mostraba su dureza defensiva bajo el aro con un tapón para salir al contraataque y recibir una falta que supondría la primera ventaja de los blancos en el marcador (33 – 34). Aunque los griegos se resistían a otorgar la ventaja a los madridistas, un tiro de Heurtel pisando la línea de triple dejaba una mínima ventaja al descanso para el Real Madrid (35-36).
El choque se reanudaba con ritmo muy intenso en el que ambos conjuntos se intercambiaban canastas en cada ataque . Yabusele volvía a anotar un triple a pesar del escaso acierto de los merengues en este ámbito (2/11) y colocaba al Madrid a 3 puntos (43 – 46). Los griegos ponían un parcial de 6 a 0 para volver a tomar el control del marcador. NWG se encontraba cómodo sobre el parqué y con una bomba por encima de Fall retomaba la ventaja blanca, aunque poco iba a durar ya que Dorsey el flamante fichaje de Olympiakos, que estaba teniendo un discreto papel en el choque anotaba un triple que ponía a los griegos dos arriba de cara al último cuarto. (54 – 52)
Los últimos diez minutos arrancaban con una igualdad máxima en el electrónico hasta que Sasha, Larentzakis y Hassan encadenaron tres acciones de tres puntos de forma consecutiva que dejaban la máxima diferencia del encuentro (65 -56) a falta de 6:30 para el final. Aunque Hanga volvió para romper el parcial, Dorsey volvía a enchufar un triple para poner a los suyos 10 arriba. El Madrid se veía arrastrado en el marcador por los tiros de Dorsey y los tiros libres de Williams-Goss eran lo único que sostenía al conjunto de Laso. A falta de 1:40 el marcador lucía una ventaja de (71 – 63) para Olympiakos. El base de Oregon volvía a anotar dos tiros libres y ponía su casillero en 16 puntos y dejaba al Madrid a 6 puntos. Heurtel volvía a hacer el oasis en el desierto de fallos y anotaba un triple que acercaba a los de Laso a tres puntos. Vezenkov anotaba una canasta que casi fue taponada por Taylor y con un fallo de Tavares en el otro lado se daba por sentenciada la victoria local. Larentzakis anotaba su último tiro libre y dejaba el (74 – 68) final.
Partidazo el que se ha vivido en el Estadio de la Paz y la Amistad de Atenas que deja a los griegos ilusionados por este gran inicio de Euroliga. A pesar de los 15 puntos de Tavares y el mejor encuentro de NWG con la camiseta blanca, los errores en el rebote y en el triple lastraron a los merengues. Los madridistas siguen sin verse acertados en el tiro exterior (3/12) y se evidencia el gran error de este nuevo Madrid que cae por primera vez derrotado en lo que va de temporada. Veremos cómo soluciona estas debilidades Laso de cara al miércoles que recibiremos al Mónaco de Mike James en el Wizink Center.