El resurgir de Tchouaméni: de señalado a indiscutible
Angel Martinez/Getty Images
El francés ha pasado de ser señalado por la afición a convertirse en un pilar fundamental del centro del campo del Real Madrid
Aurelien Tchouaméni ha vuelto a ser ese jugador que el Real Madrid fichó con la esperanza de dominar la medular durante la próxima década. Tras un inicio de temporada complicado, donde llegó a ser silbado por la afición en el Santiago Bernabéu, el francés ha dado un golpe sobre la mesa. Su actuación ante el Rayo Vallecano es la prueba definitiva de que ha recuperado su mejor versión.
Desde que los pitos resonaron en la grada en aquel partido contra el Celta en la Copa del Rey, Tchouméni ha mutado en un futbolista esencial para el esquema de Carlo Ancelotti. Se ha convertido en el pivote perfecto: preciso en el pase, dominante en el juego aéreo y un muro infranqueable en la medular. Su capacidad para cortar balones, ganar duelos y darle equilibrio al equipo han sido claves en el resurgimiento del Madrid en el tramo más exigente de la temporada.
Su exhibición ante el Rayo fue una obra de arte en el centro del campo: 93 minutos jugados, 65 toques, 92% de acierto en el pase, 100% de efectividad en balones largos, 6 duelos ganados, 4 intercepciones y 2 despejes. Números de un mediocentro defensivo de élite, demostrando que su sitio está en la base del equipo y no como improvisado central, donde se le vio fuera de lugar.
Tchouaméni, inamovible del 11 de Ancelotti
La competencia con Camavinga parecía equilibrada hace unos meses, pero la realidad es que Tchouaméni le ha ganado la partida. Mientras su compatriota sigue sin encontrar su mejor versión, Aurelien se ha erigido como el dueño del centro del campo. Ancelotti lo dejó claro en rueda de prensa: «Tiene una personalidad muy fuerte. Es un profesional serio. Ha aceptado muy bien las críticas y juega muy bien con y sin balón. Es increíble. La pareja con Modrić ha funcionado muy bien».
Con el derbi ante el Atlético de Madrid en el horizonte, Tchouméni apunta a ser clave en el equilibrio defensivo del equipo. En un partido que promete ser un auténtico duelo de estilos, el Madrid necesitará su capacidad para cortar ataques rivales y marcar el ritmo del encuentro. Si mantiene este nivel, nadie podrá discutir su condición de indiscutible en el once de Ancelotti. El Bernabéu pasó de dudar de él a rendirse ante su resurgir. El mediocentro que el Madrid soñaba ya está aquí.
