#CrónicaReal | Carvajal y Bale dan la primera victoria (2-0)
El Real Madrid se ha impuesto dos a cero en el duelo que los blancos han disputado ante el Getafe en el encuentro que cerraba la primera jornada del campeonato nacional de liga 2018-2019.
El conjunto de Julen Lopetegui ha dominado por completo el partido en un Bernabéu semivacio (apenas 48.000 espectadores) pese a que el técnico vasco ha partido con las ausencias de jugadores en principio titulares como Varane, Casemiro y Modric (y quien sabe si Courtois) y el juego de un Getafe que en más de una ocasión sobrepasó los límites de la violencia.
Desde el primer momento se vio que lo expuesto por Lopetegui durante la pretemporada lejos de ser una probatura era una declaración de intenciones y el Madrid, carente de la explosividad de otras temporadas, intentaba mantener el balón todo lo posible.
En efecto, durante la primera mitad el Getafe apenas olía el esférico (el Madrid acabaría con un 81% de posesión tras estos primeros 45 minutos) y se limitaba a dar patadas pero también es verdad que el balón apenas inquietaba a los azulones hasta que en el minuto 16 Gareth Bale remataba al larguero un buen centro de Marcelo, la que fue la primera oportunidad de los blancos en el partido y un aviso de un gol que no tardaría en llegar.
Apenas 3 minutos después, un centro desde la izquierda despejado por David Soria y Carvajal, más listo que nadie, remachaba la pelota a la red mediante una vaselina de cabeza convirtiéndose en el primer goleador liguero de la temporada (en las 3 temporadas anteriores había sido Gareth Bale).
Nada cambiaría con este gol y el partido seguía sin apenas más alteraciones que las patadas de los visitantes. Sin embargo, cuando todo hacía indicar que se iría al descanso así en el minuto 34 aparecería el VAR por primera vez en la temporada. Y es que después de que el árbitro señalara un claro penalti sobre Bale, el videoarbitraje le corregía por fuera de juego previo de Benzema.
Con esta acción y un gol anulado por una discutible falta de Ramos acabaría la primera mitad de un partido que el Madrid dominaba en todas sus facetas de forma clara salvo en el marcador.
El paso por vestuarios no cambiaría demasiado el ritmo del encuentro salvo por el hecho de que los de Bordalás incrementaron aún su dureza sobre el terreno de juego (ni Djene ni Adams deberían haber acabado el partido). O al menos eso parecía hasta que en el minuto 51 Marco Asensio rompía esa balsa de aceite en la que estaba convertido el encuentro con una internada sorpresa que acabaría remachando Gareth Bale.
Curiosamente la sentencia del choque sería lo que animaría definitivamente el partido. Bueno, eso y la entrada en el campo de Luca Modric y Casemiro. Con un 11 mucho más acostumbrado a la verticalidad y menos al fútbol control, el Madrid parecía acercarse más a la portería visitante. Algo que también haría ligeramente el Getafe tras la entrada de Alejo aunque sin llegar a inquietar a Navas gracias a un Nacho imperial durante toda la noche.
Justo en ese instante se produciría una nueva acción polémica cuando una internada en el área de Asensio era claramente interrumpida por un empujón del defensa del Getafe que Estrada Fernandez, culminando su pésimo partido, decidía obviar y ni siquiera recurrir al VAR.
Conscientes de que cuando restaban apenas 15 minutos era más importante mantener la ventaja que meter otro gol, Lopetegui decidía meter a Lucas Vázquez en vez de Bale para ayudar en defensa. El gallego no le fallaría y haría más kilómetros que el AVE desbaratando un par de internadas peligrosas del Getafe y terminando de cerrar un partido que deja bien a las claras que el control de la pelota es la principal obsesión del nuevo míster blanco.
Texto: José María Cañas
Foto: Realmadrid.com