Crónica Supercopa | Un Madrid a la defensiva se mete en la final (89 – 83)
Emilio Cobos - ACB photo
El conjunto de Chus Mateo podrá pelear mañana por su séptima Supercopa consecutiva tras imponerse al Barça en un apretado encuentro. Campazzo estuvo sensacional con 18 puntos y 6 asistencias (33 de valoración), acompañado de un gran Tavares que se fue a los 11 puntos, 2 tapones y 6 rebotes para 17 de valoración.
Leve superioridad sin recompensa
El conjunto de Chus comenzaba sin ideas, poco movimiento en ataque al que sólo las individualidades de Musa y Xavier conseguían colocar puntos. El canadiense comenzó tenso, air ball en los tiros libres y fallo en el triple. Sin embargo, encontró en la defensa el impulso para sumar en ataque. Como un motor diésel el equipo fue siendo más reconocible a medida que avanzaba el cuarto, remontando la ventaja que habían puesto Punter y Parker. La entrada de Deck enriqueció el juego de los blancos con un Campazzo magistral para irse a cinco de ventaja. Lapro con 2+1 sacado a un ansioso Feliz, empañó el final del primer cuarto.
Mucho más cómodo el Madrid en el segundo cuarto en cuanto los azulgranas dejaron de sumar de tres, los de Chus ganaron mucho terreno. Sensacionales minutos de Alberto Abalde, letal desde el triple y media distancia para coger una renta de ocho puntos. Imperial también Ibaka en defensa, un muro bajo el tablero. El músculo culé con Anderson y Parker poco a poco fue acercándose hasta que un triple de Brizuela colocaba las tablas. El tramo final de la primera parte fue un toma y daca, el Madrid sobrevivía gracias a un gran Facu, pero Hezonja estaba cuajando una mitad desastrosa. Desconectado en ambos lados de la cancha con fallos impropios del croata (0/4 en TC). Brizuela que se caracteriza por una facilidad pasmosa para entrar en calor terminó el parcial culé con otro triple (3/4 en la primera parte) para dejar a los de Peñarroya 41 – 42 al descanso.
Sin pólvora pero con defensa
La vuelta de vestuarios sentó bien al Madrid y concretamente a Hezonja. El croata encadenó dos triples para devolver la ventaja. A partir de ahí, masterclass de Tavares bajo los tableros en ambos lados de la cancha. La defensa aguerrida de los blancos desembocaba en un nuevo triple, esta vez de Facu para ponerse por primera vez a dobles dígitos. El tiempo muerto de Peñarroya surtió efecto, se cimentó en el talento de Jabari Parker y Abrines para recortar hasta 6 la diferencia. Una antideportiva en ataque de Willy le dio al Madrid la oportunidad de sumar 4 puntos y volver a los dobles dígitos, sin embargo, una vez más a los blancos les costó cerrar el período y terminaron 67 – 61.
Y derrepente… Iblocka (Acabó con 4 tapones). Qué seguro tiene el Madrid en los dos cinco de la plantilla, las penetraciones del Barça tenían el condicionante de las intimidaciones de la pareja de pívots. Sin embargo, el conjunto blanco entraba en sequía anotadora que aprovechaba el Barça para poner el partido a dos puntos entrando en los últimos cinco minutos. Momentos de locura en el partido con un Madrid negado desde el triple, pero orgulloso en defensa. Una y otra vez lo intentaban los blancos desde más allá del arco y cada vez se encontraban con el hierro.
Final de infarto
Con empate en el marcador Mario Hezonja saltaba a pista para sacar un 2+1 que se igualaba con un triple de Satoransky en la siguiente jugada. Dibujaba en la pizarra Chus para que en la posesión del Madrid le llegara el balón a Tavares y salió a las mil maravillas. Campazzo encontraba al caboverdiano para que pivotando colocase un gancho que les ponía a dos de ventaja a falta de 40 segundos.
Espléndida defensa del Madrid una vez más y robo de balón de Facu para castigar a la contra. El Barça sin tiempo que perder encontraba a Vesely para que a falta de 24 segundos pusiera a los suyos nuevamente a 2. Los blancos consumían pocos segundos hasta que Llull era mandado a la línea de libres sin perdonar ninguno. Jugada rápida del Barça que acaba con Vesely visitando también la línea aunque este sí que erraba el primero. Ventaja de 3, posesión y 11 segundos en el crono. En cuanto Campazzo recibió la bola, era cazado por Anderson llevando al argentino a la personal y colocando el choque a 5 a falta de diez segundos. Lapro fallaba el tiro y Campazzo recogía el rebote, el Madrid a la final.
