Crónica Real | Líderes bajo la lluvia (2-1)
Victoria del Real Madrid para completar la semana fantástica de la temporada y colocarse líder de la liga. Bajo la lluvia (y al final bajo los esperados lloros de Ronald Koeman) consiguió el triunfo el equipo de Zidane, con Benzema y Kroos ejerciendo de goleadores en la primera parte. A la espera de lo que haga el Atlético de Madrid mañana en el Benito Villamarín, el Madrid alcanza la cabeza de la clasificación y ya puede centrarse en el partido de Champions ante el Liverpool.
Era el partido del todo o nada para el Real Madrid en la liga, en medio de la euforia por el gran triunfo ante el Liverpool pero sabedores de lo que viene el próximo miércoles en el partido de vuelta. Zidane optó por mantener a 10 de sus 11 jugadores, siendo Valverde en el lugar de Asensio la única novedad del equipo titular. La puesta en escena del equipo fue impoluta, sin necesidad de tener demasiado tiempo el balón. Cada vez que el Madrid recuperaba y salía de la presión rival se veía un peligro atroz. Y el paso de los minutos terminó de confirmarlo.
En una de las muchas salidas con espacios del Real Madrid llegaría el magnifico gol de Karim Benzema, omnipresente como acostumbra e indetectable para las defensas contrarias. Valverde y Lucas crearon la jugada, y Karim remató de tacón con Araújo encima, colocando la pelota pegada al poste. Un gol de genio, a la altura de su nivel actual. Y un gol que terminó de espolear al Madrid, que empezó a castigar con Vinicius la espalda de la defensa del Barcelona, sobre todo a Mingueza, al que el brasileño volvió loco en la primera parte. En apenas tres toques llegaba el Madrid al área contraria, y el Barcelona era incapaz de crear ningún peligro en sus numerosos pases horizontales.
A balón parado también inquietaba el Madrid, y en una de esas Kroos amplió la ventaja. Tuvo suerte el alemán, ya que la pelota golpeó primero en Dest y luego en Jordi Alba antes de entrar en la portería, pero el dominio del Madrid era indiscutible. Tras el 2-0 el partido pintaba a goleada, pero el Barcelona tuvo el santo de cara. Primero con el tiro al palo de Fede Valverde y después con una buena intervención de Ter Stegen ante Lucas. Precisamente el lateral fue la mala noticia de la primera parte con su lesión en los minutos finales, provocada por una entrada dura de Busquets (sin amarilla). Odriozola ocupó su lugar.
Era imposible mantener el ritmo en la segunda parte, y pese a todo durante los primeros minutos el que inquietaba era el equipo de Zidane. Vinicius no estuvo fino en la finalización de un par de contras muy peligrosas y en el primer disparo entre palos del Barcelona lograba Mingueza el gol que apretó el partido. No era tanto problema el gol, sino la falta de fuerzas en el Madrid. Vinicius no podía ni con las botas y Zidane tuvo que tirar de jugadores muy poco habituales: Mariano, Isco y Marcelo, además de Asensio. Se le haría muy largo el partido al equipo, y aún así en varias jugadas volvió a rozar el 3-1, sobre todo en un mano a mano desaprovechado por Marcelo.
El final fue de infarto, con el Barça reclamando un penalti irrisorio que nunca se produjo, y un disparo al larguero del joven Ilaix Moriba, que fue un buen revulsivo. El Madrid, que había perdonado durante 60 minutos un resultado más abultado, acababa salvándose sobre la bocina ante un Barcelona que lo dejó todo en los últimos minutos, pero sin exigir demasiado a Courtois. Y todo ello con un Madrid en cuadro, que acabó con un equipo de circunstancias y con 10 jugadores, ya que Casemiro fue expulsado por doble amarilla en los minutos finales al evitar dos jugadas consecutivas de los de Koeman.
Gil Manzano pitó el final, Koeman y Piqué comenzaron su show habitual y el Madrid duerme líder muchas semanas después. Liverpool será otra historia, pero que le quiten lo bailado al Real Madrid de Zinedine Zidane, sin duda el gran artífice de todo.