Crónica Real | De todo, menos fútbol (1-0)
El Madrid cae en Mestalla ante el Valencia en un partido que tuvo de todo menos fútbol: tanganas, gritos racistas… Vinicius fue expulsado. Diego López anotó su primer gol en Primera.
El Real Madrid viajaba a Mestalla tras la derrota contra el Manchester City en las semifinales de la Champions. Los blancos querían pasar página y terminar la temporada de la mejor manera posible. Por el momento, son segundos, una posición que tratarán de defender. Por su parte, los de Baraja necesitan los tres puntos para seguir alejándose del descenso.
Este fue el once oficial con el que salió Carlo Ancelotti en las filas del Real Madrid para el encuentro contra el Valencia: Courtois; Lucas Vázquez, Militao, Rüdiger, Mendy; Tchouaméni, Ceballos, Camavinga; Asensio, Vinicius y Benzema.
El Valencia, que celebraba los 100 años de su estadio, necesitaba ganar para inflar un colchón de puntos que le separe de la zona del descenso. Y el Real Madrid, que llegaba a la capital del Turia después del batacazo en Champions ante el Manchester City, tenía cuatro partidos hasta final de temporada para acabar de la mejor forma el curso. Los madridistas querían ver la reacción blanca tras la eliminación.
El técnico vallisoletano pierde a sus centrales titulares (Paulista y Diakhaby) por sanción y recurrirá a Comert y Cenk, que no estuvieron mal en el precedente de la Supercopa de Arabia en enero. Además jugaría Cavani, que, tras sanción, recuperó el sitio en la delantera para intentar hacer daño a la defensa madridista.
En los de Ancelotti, dos ausencias: Hazard y Mariano. El conjunto blanco ha conseguido vaciar la enfermería blanca tras una temporada marcada por las lesiones y afrontará los últimos cuatro partidos de LaLiga (Valencia, Rayo Vallecano, Sevilla y Athletic) con el objetivo de sellar el segundo puesto de la clasificación, el único aliciente para el Madrid en la recta final de la temporada tras el palo europeo del miércoles en Mánchester.
El Valencia apretó de salida y hundió al Madrid en su área. Los locales pidieron penalti de Tchouaméni a Cavani por un contacto buscado (y encontrado) por el delantero uruguayo. De Burgos no pitó nada y el VAR no le corrigió. Aunque fuera sin querer, acertaron.
La jugada encendió a Mestalla pero no espabiló al Real Madrid, que aún sesteaba. El brasileño se sentía en la defensa del Valencia como uno de esos trenes de Cantabria en los túneles: no cabía. Los blancos capearon el arreón inicial valencianista sin grandes agobios. De hecho, el primer disparo a puerta llegó en el minuto 15 con un tiro lejano de André Almeida, que repelió con apuros Courtois.
Pero el Valencia respondió con un sopapo. La jugada la cocinó Gayá ante la pasividad de Lucas Vázquez. Luego pasaron cositas. Que Militao defendía al hombre invisible y no se enteró de nada. Y que Mendy, dormido en el segundo palo, se dejó comer la tostada por el chaval Diego López, que marcó a placer casi en línea de gol.
🏁 FP: @valenciacf 1-0 @realmadrid
⚽ Diego López 33'. #ValenciaRealMadrid | #Emirates pic.twitter.com/35TGJ8a2SZ— Real Madrid C.F. (@realmadrid) May 21, 2023
Los paradones de Courtois abrocharon el primer tiempo infame del Real Madrid, que se marchó al vestuario medio vivo en el resultado pero muerto del todo en juego y actitud. Lo trató de arreglar Ancelotti con un cambio: Rodrygo por Camavinga. El Madrid pasaba al 4-2-3-1 con Tchouaméni y Ceballos en el centro y tres mediapuntas por detrás de Benzema.
Los blancos, morados en Mestalla, cambiaron su actitud para que no les pusieran la cara colorada. Asensio, a pase de Lucas Vázquez, dio el primer aviso en el 47 con un disparo que se marchó arriba. El Madrid lo intentaba pero sin inquietar demasiado a un Valencia que estaba medianamente cómodo.
Atrás el Real Madrid seguía siendo un drama, que no acababa en tragedia por su estupendo portero. Courtois sacó en el 54 un disparo envenenado de Diego López, que campaba a sus anchas ante ese despropósito hecho futbolista que se llama Mendy. Respondió el Madrid con un disparo en el área de Rodrygo que desvió con apuros Mamardashvili.
Al Real Madrid le quedaban 25 minutos para una remontada sin ganas y al Valencia para cazar una contra que sentenciara el partido. Los de Baraja replegaban voluntariamente y los blancos acumulaba ocasiones en el área como la de Rodrygo en el 67. En el 70 De Burgos pitó libre indirecto cuando Cümart utilizó un balón que se había colado en el campo para cortar una jugada.
Luego un energúmeno, por llamarle algo, un animal, amparado en el anonimato en la grada de Mestalla, insultó a Vinicius, que dijo basta. No aguantó más y le dijo a De Burgos que se iba del campo si seguían insultándole. El partido se paró y a punto estuvo de suspenderse. Vinicius y Militao eran partidarios de dejar de jugar, pero el colegiado templó los ánimos, habló con ellos y con Ancelotti y se reanudó el juego.
Los minutos finales, que se jugaron de propina en un partido que debió suspenderse ante los vergonzosos hechos que ocurrieron en ese fondo desde el que en su día insultaron a Casillas en el calentamiento, transcurrieron sin grandes cosas que contarles. Sólo la entereza del colegiado De Burgos Bengoetxea, que mostró una enorme empatía hacia Vinicius y le convenció para que siguiera en el campo, y la capacidad de aguantar de los futbolistas del Real Madrid permitieron que el partido se jugara y que el Valencia se llevara tres puntos que mereció en el campo y debió perder por el comportamiento vergonzoso de su grada.
En los minutos postreros Mamardashvili hizo un paradón a un disparo a bocajarro de Fede Valverde que puede valer una permanencia. Y otro paradón posterior a una falta de Kroos que iba por la escuadra. Alguna tangana final también le sobró a un partido que tuvo de todo menos fútbol desde que algún desalmado en la grada montó el lío. De hecho, lo resolvió De Burgos con una expulsión a Vinicius, que se vio envuelto en la trifulca, y le acabó dando un golpe a Hugo Duro.
Luego, el feo final de un partido que nunca debió terminarse de jugar con público y en el que el Real Madrid demostró que sigue sin recuperarse del batacazo del Etihad.