Crónica Real | Bendito VAR (2-3)
Un potente comienzo de temporada con dos salidas fuera (ya que la primera, que era en casa, se tuvo que aplazar), y además esta segunda de particular mal recuerdo el año pasado.
Tras una importante, convincente y merecida victoria contra el Barcelona, con el equipo mostrando muy buen nivel y competitividad, hicimos en Sevilla uno de los peores partidos que recuerdo, si no el peor. Un verdadero desastre en todos los sentidos que, por fortuna, perdimos sólo por la mínima (2-1), desvaneciéndose la ventaja conseguida las semanas anteriores.
Por si fuera poco, fue la última jornada antes del confinamiento y la interrupción de la competición, con lo que el sabor de boca no pudo ser peor… Los muchachos no dan puntada sin hilo, y nos encerraron en casa “encabronados” para que pasáramos entretenidos al menos las primeras semanas discutiendo sobre todo lo que estaba mal y debíamos arreglar desde nuestro sofá. Por supuesto, con el regreso todo cambió.
Para compensar estos miedos, Zidane propuso una alineación sólida y equilibrada, muy distinta a la de la semana pasada, con mucho músculo en el medio del campo y la incursión del solicitado Jovic. Vamos, una de esas alineaciones que gustará a todo el mundo… menos a los que quieren ver a Vinicius, creen que se carga a Rodrygo, que se es injusto con Isco, que condena a Modric, que habría que dar minutos a Odriozola… Ya saben, las chorradas de la prensa para generar problemas donde no hay y que tanto gusta comprar a mucho madridista.
Un Odegaard de nuevo en el once en un planteamiento que lo liberaba más, escudado por Casemiro y Valverde. Un Benzema que jugaría más a gusto entre líneas, como segundo delantero, sin la urgencia de acudir al área, que estaría ocupada por un Jovic del que se siguen esperando goles y varios partidos seguidos donde pueda coger ritmo. La defensa, con la baja de última hora de Marcelo, repetía con Carvajal, Ramos, Varane y Mendy.
Enfrente, el Betis de Manuel Pellegrini, un estupendo técnico que siempre forma equipos que ofrecen un gran fútbol.
La primera parte fue una noria, un toma y daca, idea y vuelta, donde comenzamos controlando, pero cediendo ocasiones, y terminamos perdiendo el balón pero consiguiendo opciones de gol… Muy Madrid, vamos.
La banda izquierda de nuestro ataque, con Mendy, parecía un buen camino, durante toda la primera parte hubo opciones por allí. Un gol anulado tras gran centro de Mendy y remate de Benzema y otra incursión del lateral francés, al que faltó decisión, marcaban tendencia. Eso sí, Carvajal también dejaba una autopista por su lado, para que no hubiera celos. Un Courtois, de nuevo salvador, logró sacar un remate de cabeza a bocajarro que sería gol en el 95% de las ocasiones.
Lo que son las cosas. Zidane plantea un medio del campo con más músculo y poder defensivo, sin perder creatividad, y, en cambio, nos encontramos con una enorme inseguridad defensiva, además de perder el balón en muchas fases del segundo tramo de la primera parte.
Finalmente, una gran jugada individual de Benzema, que volvió loco a su par en el lateral derecho, originó el primer tanto madridista, con un Valverde que se nos desvirgaba. Que ya era hora, muchacho.
El Madrid volvía a tocar rápido y bien, como la semana pasada en la primera mitad. Fueron momentos donde parecía que el equipo podía resolver, con una increíble ocasión marrada por Ramos (aún me preguntó cómo no ha marcado), de nuevo entrando por la izquierda, y varios robos seguidos en campo contrario… pero el Betis logró recomponerse con personalidad, gracias, en gran medida, a un soberbio Sergio Canales.
El Madrid perdió el balón y se lo quedó Canales. De sus botas llegó un gran caudal de juego sevillano, apareciendo entre líneas y filtrando balones, es decir, haciendo justo lo que esperamos de Odegaard. Tuvo varias el Betis, pero sobre todo tuvo presencia, encerrándonos en nuestro campo. Todo esto tuvo su premio con dos goles casi seguidos que puso a los béticos en ventaja. Canales, de nuevo lúcido, dio la asistencia del primero e inicio el segundo tras una mala salida de Kroos…
Nuestra presión brillaba por su ausencia, al contrario de la semana pasada, sobre todo en el primer tiempo, a pesar de tener a Casemiro y Valverde en el campo. Casemiro muy espeso y Benzema algo fallón. Además, Kroos terminó lesionado y sustituido por Modric… De Jovic poco se supo, muy acobardado, errático y en su línea de poca participación.
Al menos, y como consuelo, nos despedimos con varias aproximaciones, Ramos y Benzema, que pudieron suponer el empate, si bien la sensación era de completa incertidumbre. Así se llegó al final, con muchas cosas que solucionar.
En la segunda parte el equipo salió con otra actitud. Otra actitud táctica. Mucho más serios y cerrando el centro del campo, por donde en algunos momentos los jugadores del Betis camparon a sus anchas en la primera mitad. Un único cambio, Isco por Odegaard.
Las ocasiones y las aproximaciones se fueron sucediendo y el empate no tardó en llegar, en una buena combinación que se cerró con un gran centro de Carvajal y un gol en propia puerta de Emerson Royal, que decidió marcar él el gol que iba a anotar Benzema.
Las ocasiones continuaron. Jovic provocando la expulsión de un rival, de nuevo Emerson Royal, gran artífice de la remontada, Ramos en una falta que salió lamiendo el palo y Valverde fallando en línea de gol… El tercero estaba cerca…
Finalmente fue en una ocasión de Mayoral, jugada que pasó desapercibida en su realidad, cuando el VAR avisó del claro penalti cometido por Bartra por manos dentro del área. No falló Ramos, que se marcó un Panenka.
Se agradece la actitud de Mayoral desde su salida, que es algo que echo de menos en Jovic, mi gran reproche.
Hasta el final, el Madrid controló sin agobios, aunque sin excesivo interés en buscar el cuarto, que pudo llegar en varias aproximaciones, ya que el Betis dejaba muchos espacios, pero se veía a los jugadores extenuados en muchos casos.
En definitiva, un encuentro flojo de los nuestros, que deja dudas, si bien es cierto que enfrente había un rival que jugaba bien al fútbol, aunque concedía muchas facilidades atrás.
Pocos brillaron. Se nota falta de físico y un equipo aún por definir, donde sólo parece asentada la línea defensiva.
No nos engañemos. Otros años este partido se hubiera resuelto con empate o derrota. Sorprende ver cómo ha cambiado la cosa desde que está el VAR, pero sobre todo desde el regreso del confinamiento este mismo año, donde los patrones por los que se regían parecen haber cambiado… ¡Estamos hablando de que De Burgos Bengoetxea, guiado desde el VAR por González González, ha rectificado dos jugadas decisivas, que pasaron casi desapercibidas, correctamente y a nuestro favor! No es moco de pavo, porque un cambio de paradigma en esto, es algo vital para poder competir, como se demostró ya la temporada pasada.
Bendito VAR.
Crónica: @MrSambo92
Foto: One Football / Getty Images