El partido no pudo arrancar de mejor manera para los blancos, que mostraron su calidad con dos acciones que le permitieron adelantarse en el electrónico (0-4). Los serbios respondieron anotando un triple y obtuvieron la misma respuesta por parte de los merengues, que contestaron con la misma moneda. El argentino Gabriel Deck, salió enchufadísimo al encuentro, anotando 5 puntos en los dos primeros minutos de juego. El equipo dirigido por Chus Mateo plantó una solida defensa, provocando la incomodidad en el juego de los serbios que buscaban una y otra vez de manera errada el tiro de tres. Esto, provocó que los blancos aprovechasen de manera cómoda los rebotes, logrando un parcial de 10-0 a su favor. La entrada del Chacho Rodríguez hizo que el juego de los madridistas mejorase y aumentase aún más su ventaja gracias a las asistencias de este y a los puntos de Cornelie. Esto hizo que el Real Madrid se marchase con una cómoda ventaja al segundo cuarto (25-10).
En los segundos diez minutos, el técnico blanco introdujo cambios en el quintento con respecto a los cinco titulares del primer cuarto. El segundo cuarto arrancó con un Real Madrid relajado y con un conjunto visitante muy bien plantado atrás y acertado en ataque, lo que les permitió ir recortando distancias en los minutos iniciales. Chus Mateo pedía más intensidad a los suyos que no lograban reaccionar y veían como los serbios se acercaban en el marcador, llegando a ponerse a 7 puntos de diferencia (35-28). Musa y Yabusele aparecieron logrando sumar puntos en el electrónico, pero no pudieron evitar que el Estrella Roja se marchase con mejores sensaciones que en el primer cuarto, yéndose al descanso con 9 puntos abajo (30-39).
Tras el descanso, el técnico del Real Madrid volvía a alinear a los mismos cinco jugadores que en el arranque de partido. En el tercer cuarto los serbios volvieron a salir con todo a la cancha, anotando en varias jugadas seguidas, logrando un parcial de (0-6), lo que les permitió plantarse a solo tres puntos de diferencia de los blancos (42-39). Esto hizo reaccionar a los de la capital, consiguiendo establecer una defensa infranqueable que hacía fallar una y otra vez a los visitantes. Esto último, sumado a la entrada de Chacho que volvía a hacer mejorar el juego de los de Chus Mateo, permitieron al Madrid aumentar la diferencia de puntos. Los locales se marcharon al último y frenético cuarto con 10 puntos de ventaja (54-44).
En los últimos 10 minutos, el partido arrancó de la mejor manera posible, el Cacho salió con la misma intensidad que en el cuarto anterior y anotó un triple en la primera jugada. A raíz de esto, el Real Madrid se encontraba bien plantado atrás pero muy impreciso en ataque, consiguiendo tan solo 3 puntos en los primeros cinco minutos. Esto sumado a varias acciones arbitrales dudosas volvieron a permitir que los visitantes recortasen distancias de nuevo (59-54). Los últimos tres minutos de encuentro fueron frenéticos, parecía que los fantasmas de los partidos anteriores podían volver, pero apareció Walter Tavares para espantarlos, anotando un 2 + 1. Esto provocó la reacción blanca, logrando un parcial de 9-0. En los últimos compases de encuentro el Real Madrid se mostró más agresivo atrás, evitando recibir puntos y estando más acertados en ataque. Finalmente, los madridistas lograron terminar el partido con un marcador favorable de 72-56.
Este cuarto partido de la Euroliga le ha permitido al Real Madrid coger aire, olvidando las dos derrotas anteriores y logrando la primera victoria en Europa como locales. En esta victoria fueron claves Musa y Sergio Rodríguez entre otros.