FC Barcelona 67-72 Real Madrid: Campazzo lidera de nuevo al supercampeón de España
El conjunto blanco se sometió a su primera final y venció a un competitivo Barcelona en un asalto muy igualado de principio a fin y en el que el base argentino sigue demostrando que no entiende de límites
Nueve meses y medio después, Real Madrid y FC Barcelona se volvían a cruzar en el camino. Esta vez, como el año anterior, en la pelea por el primer título de la temporada. La Supercopa de España se trasladó de Vitoria a Tenerife y, de nuevo, el clásico se ha convertido en la final por el título. Real Madrid tuvo que superar al anfitrión con un Rudy en un sorprendente estado de forma, como si se tratara de una joven promesa del deporte (teniendo en cuenta a las alturas de temporada en la que nos encontramos).
El intercambio de puntos en los primeros minutos de partido nos adelantaba el entretenido enfrentamiento que viviremos este año entre los dos prestigiosos equipos de nuestra liga. El recién llegado Alberto Abalde volvió a salir de nuevo en el quinteto inicial de Pablo Laso, demostrando la confianza depositada en el ex valencianista. El canterano de Joventut dio al conjunto blanco un importante impulso en los primeros instantes. Los argentinos Campazzo y Deck pusieron el carácter para intentar amedrentar a la defensa blaugrana. Nick Calathes, fichaje estrella de los de Jasikevicius, lideró el ataque del Barcelona que no se despegó del Madrid en ningún momento del primer asalto.
Pablo Laso inició la rotación al final del primer cuarto. Los “jóvenes”, que han demostrado en esta pretemporada su candidatura a la titularidad, dejaron paso a la vieja guardia blanca. Los Rudy, Llull, Thompkins, Randolph, sumados a Garuba y Laprovittola, tenían la premisa de mantenerse arriba en el encuentro. El aeroplano Llull hizo del “Facu” del primer cuarto, aunque el FC Barcelona comenzaba a acercarse manteniendo un firme poderío en la pintura con Mirotic, Brandon Davies y Pierre Oriola como dominadores dentro de la zona. Este último capturó y quitó tres rebotes al gigante caboverdiano Tavares y, con la ayuda de Calathes contribuyó a que el conjunto blaugrana se pusiera por delante en el luminoso por primera vez en la final. Remó el Barcelona antes del descanso con un enchufado Calathes, la vieja guardia blanca gritó “Arriba las canas y abajo las ganas” y los de Laso no pudieron marcharse a los vestuarios del Santiago Martín con una victoria momentánea en la final.
La segunda parte tuvo que esperar dos minutos a que alguno de los dos finalistas inaugurara el marcador tras la pausa. Deck volvió adelantar a los blancos y, desde ese momento, la igualdad en el luminoso fue absoluta. Vuelta al intercambio de puntos en ambos equipos y de nuevo FC Barcelona tomando la iniciativa en ataque. Llegaban los triples en el Barcelona (tanto de Mirotic como de Calathes) y la defensa de los blancos cada vez era más pasiva e inestable. Un 2+1 y un triplazo de Abalde, uno de los máximos anotadores de los de Laso, le dio a su equipo el oxígeno para acercarse de nuevo al FC Barcelona. Los blancos lograron colocarse de nuevo a un punto a falta de 33 segundos para el final del tercer cuarto. En el último segundo del cuarto, Trey Thompkins ganó la posición a Calathes en el pivote y logró adelantar a su equipo en el luminoso.
Cuando creíamos que esta inyección de remontada del Madrid pondría las cosas favorables a los blancos, volvió la relajación y el FC Barcelona lo aprovechó con seis puntos consecutivos al inicio del último asalto. El cansancio se sentía en el aliento de los jugadores y el momento de la temporada comenzaba a causar la ineficacia de cara al aro. El Madrid volvió a meter la marcha e iniciar la revolución liderada por el coronel Facundo Campazzo y ejecutada con un triple desde la esquina de Sergi Llull. Los fallos ofensivos fueron el gran protagonista durante varios minutos hasta que Brandon Davies y Campazzo volvieron a avivar el choque.
A Pablo Laso le pitaron técnica y este hecho dio alas a un Barcelona de nuevo a tiro del Real Madrid. Esta mala noticia en el Madrid se compensó con una buena, con la eliminación por faltas del sobresaliente Calathes. Aunque, el Barcelona no se amedrantó y siguió manteniendo la igualdad en la batalla. El tiro libre parecía ser el que determinara como se iría encarrilando el encuentro.
Los galones y la intensidad de Campazzo y la intensa defensa blanca condenaron al FC Barcelona y confirmaron la séptima Supercopa de España para los nuestros. Campazzo siguió seduciendo a la mejor liga del mundo con 20 puntos y una gran actuación en el apartado defensivo.