Sentimiento Real | Se equivocó Valverde
Hizo un partidazo Federico Valverde en la final de la Supercopa de España ante el Atleti. Nada a lo que no nos tiene ya acostumbrados. Tiene el uruguayo todo eso que le pedimos a cualquier futbolista que se pone la camiseta del Real Madrid: sacrificio, solidaridad, coraje, corazón, cojones y fútbol. Y todo eso lo despliega sobre el césped en cada partido. Y nosotros muertos de amor con Fede.
Cuando corría detrás de Morata, en esos segundos donde veíamos que se nos escapaba la final a la que fuimos invitados, todos corríamos con él. Cazó a ese jugador que se fue al Atleti porque no encontró otra cosa mejor y respiramos aliviados. Sabíamos que se iba a la calle, pero también éramos conscientes del minuto en el que estábamos. Corrieron los del Atleti a rodear al árbitro, a ver si de rebote expulsaban a alguno más.
Una estrategia muy del Barcelona. Valverde abandonó el terreno de juego, Simeone lo tocó, que fue como tocar la Copa, y ahí perdió la final.
Pero se equivocó Federico. Nos dio la Supercopa de España y después cometió un error. El error de pedir perdón por hacer lo que todos desde nuestras casas, cuando corríamos con él a la caza de Morata, esperábamos que hiciera. A esa gente, a los del Atleti, que nos odian con todas sus fuerzas, que primero son antimadridistas y después de su equipo, no se le puede pedir perdón por nada y menos aún por hacer tu trabajo. Con Morata, que si tiene la más mínima oportunidad se viste de tribunero para ver si así le dedican una canción los del Frente Atlético, cero condescencia. Esa falta, esa expulsión de Valverde ha pasado ya a la historia del Real Madrid en las finales contra el Atleti.
No sabe bien Federico cuánto lo queremos, que si pudiéramos lo arroparíamos todas las noches para que no pase frío. Entre él y Courtois sostuvieron el partido para poder llegar a los penaltis y repetir lo de Milán, pero igual que el belga no se disculpó por pararle un penalti a su ex equipo, Valverde no debería haber pedido perdón por hacer lo que todos los madridistas le gritabamos a la tele que hiciera.
Texto: Paula Pineda
Foto: Francois Nel/Getty Images