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Tanto el francés como el turco mostraron resistencia en el derbi capitalino
En el Día D, el Real Madrid pinchó. Se desplomó. Así, tal cual. Un duro correctivo en el Riyadh Air Metropolitano que tardará en cicatrizar. La afición blanca esperaba un encuentro complicado, de tibia fuerte, pero la opción de caer con un 5-2 en el marcador no estaba en la baraja. Tan solo Kylian Mbappé y Arda Güler lograron librarse de la quema.
Tanto el francés como el turco asombraron al firmamento futbolístico en los primeros 45 minutos. En el 25′, Arda conectó con Kylian mediante un pase cartesiano al hueco. Y la zaga atlética se vio azuzada por el ’10’ madridista, que firmó un disparo seco al fondo de las redes. Gol (el décimo del crack de Bondy en ocho envites), tablas en el electrónico y regreso a la casilla de salida.
Un tramo después, el 1-2 salpicó al Atlético de Madrid gracias a una diana de Güler. Asistencia de Vini y chut contundente del ex del Fenerbahçe, al que no pudo llegar Oblak. El gol, de todos modos, no enarboló al bloque de Xabi Alonso… y la línea defensiva volvió a hacer aguas en el empate a dos. La pescadilla que se muerde la cola.
«En el descanso hemos hablado de que empezaba un nuevo partido, porque después del 2-2 estábamos vivos. Pero no lo hemos conseguido. No fue bueno el juego, además hemos cedido mucho al rival. Nos han penalizado merecidamente», comentó el preparador tolosarra en la sala de prensa del estadio rojiblanco.
El Madrid entró en barrena tras el descanso y su rival golpeó fuerte. Mbappé gozó de alguna oportunidad, al igual que Güler. Aún así, este último se marchó sustituido antes de la hora de encuentro. Una decisión que no gustó en ningún caso al madridismo, dado que el equipo perdió calidad en campo local.