#CrónicasVikingas | Desmontando el Caso Di Stéfano
A pocos días del cuarto aniversario de la muerte de la gran “Saeta Rubia”, es de recibo poner el foco en una de las leyendas urbanas más socorridas del fútbol patrio: Franco y el poder de sus “interminables”tentáculos para ayudar al Madrid.
La España de los años 50 era golpeada y aislada internacionalmente por su régimen fascista, aunque a partir de 1953 y con la ayuda inestimable de USA empieza a ver una pequeña luz con los acuerdos que derivan en la instalación de polémicas bases yankees en sitios estratégicos como Torrejón y Rota (entre otras) a cambio de una inyección económica que ayuda al país a respirar un poco dentro de su sórdida y triste realidad.
En esta complicada situación parece ser que el Generalísimo no tenía nada mejor que hacer, además de inaugurar pantanos, que seguir todas las ligas internacionales con el inexistente Bein Sports de la época …y como decían que el sexo tampoco le interesaba mucho pasaba las noches analizando posibles fichajes que devolvieran el éxito al muy secundario Real Madrid post-república: recordemos un demoledor dato, a partir de la instalación de la durísima dictadura el Club no ganó ninguna Liga hasta 1954, repartiéndoselas curiosamente el Athletic de Bilbao y el Barça en los años más duros y represivos del Régimen franquista…
Para rematar la surrealista situación se asegura que Franco exigió que ante el litigio entre Madrid y Barça por la estrella argentina la FIFA diera el pase al club de la capital, detalle muy verídico y posible viendo el enorme poder que tenía España por aquellos tiempos en el exterior (ironía modo on). Un país hundido, aislado y económicamente casi en la miseria que ahogaba sus múltiples penas con la copla, el flamenco y otras artes características de un país sin referencias anglosajonas de estilos emergentes como el jazz, blues o un incipiente rock and Roll que empezaba a abrirse paso con un tal Elvis como abanderado, aunque gigantes como Sinatra o Glenn Miller ya empezaban a marcar tendencias diferentes.
Aunque la leyenda negra quede desmontada, la realidad es que por esa terrible época el equipo de los militares era el Atlético Aviación, formado en su cúpula por personas importantes y muy cercanas al poder (años después se convertiría en el Atlético de Madrid )mientras el Madrid se encontraba en un segundo escalafón de los equipos grandes, intentando variar esa dinámica llegando a un acuerdo con Millonarios de Bogotá por el talentoso Di Stéfano, crack argentino que había huído de River y que solo jugaba partidos amistosos en Colombia en una liga ajena a la FIFA poseedora del pase del delantero (cedidos por el club argentino), aprovechando River ese resquicio y llegando a un acuerdo con el Barça por 4 millones de pesetas de la época para fichar a Alfredo.
El lío era mayúsculo, los dos rivales históricos tenían acuerdos por el jugador con su antiguo y actual club, y ya con el crack en Barcelona ocurre que el húngaro Kubala empieza a salirse en el club azulgrana…ésa situación y la imposibilidad del argentino de debutar por la falta del pase hace que el club catalán enfríe su interés, agravado con la decisión de jugar un año en cada equipo como trato salomónico.
Viendo la nueva realidad el Madrid oferta comprar el pase del jugador al Barça y éste acepta a cambio de los 4 kilos que pagó a los argentinos, siendo el resto por fortuna gloriosa historia blanca mientras miles de españoles se buscaban la vida por medio mundo con Suspiros de España como triste y nostálgica banda sonora.
Va por usted, DON ALFREDO!!
Texto: Guillermo Caridad
Foto: Kaiser Magazine