El Real Madrid debuta en Champions y necesita mejorar
ANDER GILLENEA/AFP via Getty Images
El Real Madrid volverá a su competición fetiche recibiendo al Stuttgart. Mismo trofeo, diferente formato y la necesidad de mejorar sensaciones.
Volverá a sonar el himno de la Champions, aunque con distinta melodía. Y es que, después de ganar la decimoquinta el 1 de junio, el Real Madrid defenderá título y aunque todo parece igual, todo es distinto.
Como si se hubiesen cansado de que el conjunto blanco dominase Europa, por cambiar, no ha sido suficiente con el formato, también han modificado el himno de la competición. Será misión del Real Madrid hacer como si nada y ponerse de nuevo el traje de las grandes noches europeas.
El Real Madrid llega a este estreno europeo tras dos victorias consecutivas, pero con dudas en el juego. Ante la Real Sociedad, lo de Ancelotti demostraron que su capacidad de supervivencia permanece intacta, al igual que el colmillo ofensivo que históricamente ha caracterizado a los blancos.
Sin embargo, las sensaciones del equipo no terminan de ser buenas. La Real Sociedad golpeó los palos hasta en 3 ocasiones y más allá del buen rendimiento de Kylian Mbappé, que fue quien comandó las ofensivas blancas, hubo poca fluidez en el juego madridista.
Los goles llegaron desde el punto de penalti y la buena noticia es que, a pesar de no encontrar excesivo fútbol, Mbappé y Vinícius ya golean con cierta constancia.
Al Real Madrid le falta comandar los partidos, ser más protagonista e imponer su ley. Necesita que los goles lleguen a partir del juego y no al revés. Y sobre todo precisa acumular más minutos de constancia futbolística.
La plantilla tiene un potencial tremendo y la afición está impaciente porque salga a relucir. Más aún viendo el nivel de un Barça que parece ser un equipo radicalmente diferente al del año pasado.
Ancelotti aún está buscando encontrar la tecla para conseguir continuidad en el juego y los resultados. Mientras tanto, los futbolistas sufren los estragos de un calendario tan apasionante como exigente a nivel físico. Las bajas en este inicio de temporada han sido constantes, mermando las posibilidades del staff técnico a la hora de poder introducir alternativas o dar descanso.
Estas bajas han mermado al equipo, afectando a futbolistas tan importantes como Jude Bellingham, Camavinga o la reciente lesión de Brahim. Sin mencionar lesiones que se arrastran de la temporada pasada, como la de Alaba.
Volvemos a recordar que hay futbolistas que apenas han tenido tiempo de realizar pretemporada y es normal que no muestren plenitud física, ni técnica.
Un ejemplo de ello es el de Vinícius, que a pesar de ser determinante, aún no ha encontrado las sensaciones con las que finalizó el año pasado. Algo que también sucedió la temporada pasada.
El Real Madrid aún está ajustando sus piezas, pero lo importante es que mientras se logra alcanzar el nivel futbolístico que se espera, se puntúe de 3 en 3. Lograr la victoria en el Reale Arena, debe ser una inyección de confianza para los partidos que restan en el mes de septiembre.
El siguiente reto será el Stuttgart. El equipo alemán visitará el Santiago Bernabéu en el que será el pistoletazo de salida de la nueva Champions League.
El equipo recuperará a Jude y Tchouaméni, lo que son dos noticias vitales para la plantilla. Militao no se ha entrenado con el equipo, pero Ancelotti ha confirmado que podrá estar mañana con sus compañeros.
Es importante comenzar la competición con 3 puntos, ya que este año la competencia ha aumentado. El Real Madrid formará parte de una liguilla en la cual competirá contra todos los clubes participantes. Los tropiezos pueden pagarse caro, sobre todo de cara a los enfrentamientos contra los equipos que, a priori, tienen más nombre y nivel.
Mañana volverá a sonar el himno de la Champions, pero será distinto. Lo que no cambia es la exigencia blanca, por la cual el Real Madrid sigue estando obligado a ganar.
El Real Madrid debutará con el objetivo de ganar, pero también con la necesidad imperiosa de mejorar.
