Ni rastro del Real Madrid campeón
CESAR MANSO / AFP via Getty Images
Los blancos pincharon por segunda vez en tres jornadas y las dudas por el juego colectivo, la actitud y la pegada de los de Ancelotti comienzan a preocupar. «Es un problema futbolístico», dijo Ancelotti en rueda de prensa, después de que varios jugadores quedasen señalados por el mal partido en Gran Canaria
Este Real Madrid aún no arranca. Ni colectivamente, ni individualmente. Ni rastro de la solidez defensiva que hizo del equipo de Carlo un bloque invencible. Ni rastro de Vinicius, ni siquiera de Mbappé, que tuvo varias ocasiones -pero aún muy lejos del nivel que se espera-. Ni rastro del fútbol que enamoraba al mundo y que hacía disfrutar cada fin de semana a todos los madridistas. Ni rastro de la contundencia, de la presión, de la gran salida de balón que tenía el Madrid. Nada. Cero. Como si de un reset por completo se tratase, el conjunto blanco no dio la talla y volvió a dejar una imagen bastante débil en Gran Canaria.
El actual campeón de Liga, que ha sufrido ya dos pinchazos en apenas tres jornadas, no está acertado en las áreas, pero ni tan siquiera en los automatismos que le llevaron a convertirse en el justísimo y merecido campeón de la competición nacional. Ancelotti, decepcionado en la sala de prensa tras el encuentro, dejó claro lo que sucede con su plantilla y el por qué esta mala dinámica comienza a arrastrar el juego del equipo y la solidez defensiva de los suyos.
El problema se agrava cuando el centro del campo no da el equilibrio necesario al equipo cuando hay que defender, y la prueba de ello es la falta de contundencia y la pasividad de Tchouaméni, entre otros. El francés no convence y fue uno de los grandes señalados del encuentro ante el conjunto canario. El desplome del equipo se origina casi siempre en la medular, y el ex del Mónaco es uno de los responsables.
«Nos cuesta encontrar la solidez que hemos tenido el año pasado. No hay que buscar excusas porque llega otro partido. Tengo que marcar más la estrategia. Nos está costando más de lo que se podía pensar. Hay que trabajar y centrarse en donde queremos ir. Afortunadamente, este tres partidos me han mostrado muchas cosas que no están saliendo bien. En eso debemos mejorar«, comentó el italiano.
Mbappé y Vinicius, desdibujados
En ataque, los dos máximos responsables de los goles del Real Madrid, tanto Vinicius como Mbappé, no estuvieron para nada acertados. El francés fue el mejor de los tres de arriba, pero muy lejos de su nivel y aún con la pólvora mojada. Se le vio con ganas, pero su fútbol letal y su mordiente de delantero de momento no aparece en la parcela ofensiva de los de Ancelotti.
Por otro lado, Vinicius no consiguió en ningún momento irse del contrario, crear superioridades, desbordar, regatear y crear ese fútbol vistoso del que tan acostumbrados estamos de ver en el ‘7’. Incluso, por momentos parecía que no buscaba a Kylian, que no le miraba y que buscaba originar la guerra por su cuenta. El brasileño fue otro de los jugadores que más decepcionaron a la parroquia blanca.
«Es un problema futbolístico y está detectado. El problema es bastante claro, hay que buscar solución», añadió. «La solución la tengo que buscar yo, no la pueden buscar los jugadores», afirmó Carlo en rueda de prensa. Una solución que parece que no llega, pero de la que el técnico está seguro de encontrar. La imagen no fue nada buena, y las dudas, al igual que el poco fútbol demostrado en estos tres primeros partidos, comienzan a habitar la atmósfera blanca. Hasta el momento, ni rastro del Real Madrid campeón.