Previa Liga | Balance previo a la evaluación final
Juan Manuel Serrano Arce / Getty Images
El Real Madrid visita El Sadar antes de enfilar el grueso duro de la temporada. Osasuna, un rival de tintes titánicos.
Una vez que suene el pitido final en el feudo rojillo, los internacionales del Madrid montarán la maleta, dirán adiós a Valdebebas por unos días y se marcharán con sus respectivas selecciones. En todo caso, no deja de ser un parón superficial que radica en engrasar la máquina con la vista puesta en dos torneos estivales: Copa América y Eurocopa. Pero, primero, al equipo madridista le toca seguir esculpiendo su majestuosa obra por tierras pamplonesas antes de nadar entre tiburones -llámase FC Barcelona o Manchester City- en abril y meses posteriores. Lo de esta tarde pasa a ser un parcial, una última preparación de cara al momento crucial del año.
Y para esa prueba, Carlo Ancelotti («Partido muy importante, antes de un parón. Queremos acabar bien», dijo el italiano en la rueda de prensa previa) no quiere sustos. Ya le atraparon los nervios frente al RB Leipzig, en el Metropolitano y en unos cuantos desplazamientos más donde resaltó tímidamente la luz de emergencia. En aquellas coyunturas… siempre resolvió un Jude Bellingham que cumple su segundo, y definitivo, encuentro por sanción. Su falta es de las que hacen mella, aunque Brahim sirve de sanador.
Si el malagueño lima asperezas, el triunfo contundente ante el Celta diluyó dudas, peligros y miedos en el Real Madrid. Un 4-0, en el Santiago Bernabéu, más que necesario para llenar el depósito de moral, porque sí, no andaba con paso firme el cuadro capitalino en la competición doméstica. Valió también de cura para el menos hablador de la clase, quien si no que Arda Güler, del que se piden más oportunidades sobre el césped. El turco agarró las migajas, las mutó en pan y se merendó su primer gol con el club de las 14 Copas de Europa.
Sin ser definitivo aún, la mayoría barrunta la Liga en favor del Real Madrid. Por estas fechas, el Barça parece lejos de subirse al tren por el título, mientras que el Girona, principal perseguidor, no termina de mantener recta la línea vitalicia y cosecha más desencantos que logros. El sacar los tres puntos de Pamplona puede seguir edificando un trofeo cercano en el horizonte. Motivación extra para Courtois y Militao, ‘dos cruzados’ que volverán al verde, si nada se tuerce, después del paréntesis por selecciones.
El Sadar, plaza benévola
Por mucho que Osasuna suela hacer de su estadio -normalmente- un fortín de magnitudes incalculables, esta campaña ni mucho menos está haciendo honor a esa historia que le corresponde. Lo que sí logró el curso pasado, ni en pintura se ha avistado en este 2024. Ahora le llega un Madrid con la vitola de mejor visitante de la competición, habiendo sacado 31 puntos como forastero. Y, además, no hinca rodilla en ese mismo escenario desde 2011 (1-0, con Mourinho en el banquillo).
Una semana más, Vinicius ha vuelto a ser víctima de episodios racistas por parte de la afición del Atlético de Madrid. Fuera de lo injustificable e irracional, al crack brasileño se le presenta otra cita sin Jude, su compañero de ceremonias. Sin él ha seguido brillando y haciendo lo que mejor sabe: marcar goles y deleitar a la parroquia merengue. Sergio Herrera, portero de Osasuna, se ha referido a Vini horas antes del choque en Gol Play: «Como futbolista sobran las palabras porque es un jugador increíble. Muchas veces empaña sus partidos con gestos y actitudes. Le animo a que mejore eso».
Jagoba Arrasate acumula una racha positiva que ha permitido a los suyos asentarse en la zona tranquila de la tabla. Sin sobresaltos para el tramo final. Es sin duda un manjar para un Club Atlético Osasuna que rozó con las yemas de los dedos la clasificación a la UEFA Conference League en agosto y, como no, en el recuerdo permanece la final de Copa frente al Real Madrid, de la que han pasado ya diez meses.
Oroz, baja sensible
El técnico vasco pierde a un elemento clave dentro del ecosistema rojillo, no es otro de Aimar Oroz (22 años), baja por lesión en el recto anterior de la pierna izquierda. Pocos centrocampistas con su poso quedan en el fútbol español y si no entra en la convocatoria de la absoluta es en parte culpa de la alta competencia que hay en la medular. Hombre de futuro. Y un problema menos para Ancelotti.