El Madrid se lleva un punto del Pizjuán. El Sevilla anotó gracias a un gol en propia de Alaba y Carvajal anotó el tanto del empate. De Burgos Bengoetxea, señalado tras su actuación polémica en Nervión.
Sevilla y Real Madrid se midieron en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán. El líder visitaba la casa de un conjunto hispalense con ganas de empezar a coger impulso en la competición. No han sido capaces de encontrar la regularidad en este inicio de temporada, lo que ha llevado a la directiva a tomar decisiones.
Durante el parón de selecciones, decidieron cesar a Mendilibar para contratar a Diego Alonso, que tendría un estreno de aúpa. Además, sería un partido especial para Sergio Ramos. El defensa camero se iba a medir al Real Madrid por primera vez desde su salida del conjunto blanco.
El Real Madrid llegaba a este duelo en buena racha. Tras once partidos, los blancos habían ganado 10 y solo habían perdido uno. Unos números inmaculados que permiten a los madridistas ser líderes en la Liga y a estar muy cerca de los octavos de final en la Champions. La dinámica es más que positiva, pero los de Nervión siempre ponen en apuros a cualquiera, difícil de batir en su campo y eso, Ancelotti, lo sabía. El italiano salió con: Kepa; Carvajal, Rüdiger, Alaba, Mendy; Valverde, Tchouameni, Kroos; Bellingham; Rodrygo y Vinicius.
El inicio de partido del Real Madrid fue arrollador. A los 4 minutos de partido, Fede Valverde anotó el tanto que desatascaba el partido a la salida de un córner botado por Kroos, pero el VAR anuló el gol por un fuera de juego milimétrico a la par que dudoso, de Jude Bellingham.
En el minuto 9′, otro jaleo. Rüdiger le quita la pelota a Ocampos, luego le da un golpe y se queda en el suelo. De Burgos le dice que se levante y unos segundos después decide parar el partido con el jugador del Sevilla en el suelo y el Madrid en plena contra peligrosísima… que acaba con gol de Bellingham que no vale. Los jugadores del Madrid explotaban y no se lo podían creer. Nivel tétrico de De Burgos Bengoetxea.
El Sevilla se iba animando y poco a poco reaccionaba. Carvajal se equivocó en la salida, Ocampos recuperó el balón y Rakitic, tras un recorte, remata y el propio lateral de Leganés evita bajo palos el primero de los hispalenses. Poco después, Kepa se tuvo que emplear a fondo para despejar un balón a la escuadra que se colaba, tras un chut del jugador argentino del Sevilla.
El Madrid apretaba, y antes del descanso, tuvo dos ocasiones claras para ponerse por delante. Una, tras un chut de falta de Kroos que saca Ramos, pero que el colegiado no indicó córner. Otra, en el 40′, de Vinicius. Balón a la espalda de la defensa de Valverde que salva Nyland. Antes del descanso, otra jugada polémica. Jesús Navas empuja por detrás a Vinicius y el brasileño se quejó y reclamó penalti. Parecía muy claro, pero el VAR no avisó al vasco. Partido entretenido en Nervión, que se saldó con tablas al intermedio.
El Real Madrid no encontraba su sitio ante un Sevilla que comenzaba a perder fuelle. En el 56 la tuvo Rodrygo y la falló. Fue un pase genial de Valverde que el brasileño controló a la perfección dentro del área, pero resolvió mal con un disparo cruzado dentro del área que abortó Nyland con un pie salvador. En el 57 otra vez Rodrygo desperdició el gol al ejecutar de forma defectuosa una vaselina ante Nyland que sacó Sergio Ramos en el área pequeña. Perdonó el Real Madrid, marcó el Sevilla. Lo hizo Alaba en propia puerta al intentar despejar un remate de En-Nesyri tras un centro de Acuña que se comieron Carvajal primero y Rüdiger después.
Poco le duraría la alegría al Sevilla, apenas un par de minutos, los que tardó Carvajal en cabecear una falta magistralmente sacada por Kroos al primer palo. Ancelotti, que olió la sangre, metió a Joselu por el desacertado Rodrygo. La ocasión, al filo del 80, fue para el Sevilla en un cabezazo mágico de Ramos que abortó Kepa, el que nunca sale, con una estirada monumental.
El duelo acabó con una falta en la frontal del área del Sevilla que el infame De Burgos Bengoetxea permitió que la barrera se formara a cuatro metros del balón. Al Real Madrid le salió cara la emboscada y espantosa actuación arbitral de De Burgos Bengoetxea.
Cubriendo al Real Madrid en MadridistaReal. Valdebebas y el Bernabéu, mis dos 'casas' favoritas de Madrid.
Disfrutando y aprendiendo de la profesión más bonita y vocacional que existe.
En el minuto 9′, otro jaleo. Rüdiger le quita la pelota a Ocampos, luego le da un golpe y se queda en el suelo. De Burgos le dice que se levante y unos segundos después decide parar el partido con el jugador del Sevilla en el suelo y el Madrid en plena contra peligrosísima… que acaba con gol de Bellingham que no vale. Los jugadores del Madrid explotaban y no se lo podían creer. Nivel tétrico de De Burgos Bengoetxea.
El Sevilla se iba animando y poco a poco reaccionaba. Carvajal se equivocó en la salida, Ocampos recuperó el balón y Rakitic, tras un recorte, remata y el propio lateral de Leganés evita bajo palos el primero de los hispalenses. Poco después, Kepa se tuvo que emplear a fondo para despejar un balón a la escuadra que se colaba, tras un chut del jugador argentino del Sevilla.
El Madrid apretaba, y antes del descanso, tuvo dos ocasiones claras para ponerse por delante. Una, tras un chut de falta de Kroos que saca Ramos, pero que el colegiado no indicó córner. Otra, en el 40′, de Vinicius. Balón a la espalda de la defensa de Valverde que salva Nyland. Antes del descanso, otra jugada polémica. Jesús Navas empuja por detrás a Vinicius y el brasileño se quejó y reclamó penalti. Parecía muy claro, pero el VAR no avisó al vasco. Partido entretenido en Nervión, que se saldó con tablas al intermedio.
El Real Madrid no encontraba su sitio ante un Sevilla que comenzaba a perder fuelle. En el 56 la tuvo Rodrygo y la falló. Fue un pase genial de Valverde que el brasileño controló a la perfección dentro del área, pero resolvió mal con un disparo cruzado dentro del área que abortó Nyland con un pie salvador. En el 57 otra vez Rodrygo desperdició el gol al ejecutar de forma defectuosa una vaselina ante Nyland que sacó Sergio Ramos en el área pequeña. Perdonó el Real Madrid, marcó el Sevilla. Lo hizo Alaba en propia puerta al intentar despejar un remate de En-Nesyri tras un centro de Acuña que se comieron Carvajal primero y Rüdiger después.
Poco le duraría la alegría al Sevilla, apenas un par de minutos, los que tardó Carvajal en cabecear una falta magistralmente sacada por Kroos al primer palo. Ancelotti, que olió la sangre, metió a Joselu por el desacertado Rodrygo. La ocasión, al filo del 80, fue para el Sevilla en un cabezazo mágico de Ramos que abortó Kepa, el que nunca sale, con una estirada monumental.
El duelo acabó con una falta en la frontal del área del Sevilla que el infame De Burgos Bengoetxea permitió que la barrera se formara a cuatro metros del balón. Al Real Madrid le salió cara la emboscada y espantosa actuación arbitral de De Burgos Bengoetxea.