Opinión | Tchouameni y diez más
El título de mi artículo es bastante indicativo de lo que quiero expresar: la importancia que tiene un jugador como Tchouameni en el actual Real Madrid. La posición de pivote defensiva, tan infravalorada siempre, puede hacer ganar campeonatos, y en el Madrid se tiene la suerte de contar con el que va a ser uno de los dominadores de la próxima década. Jugando a fútbol ficción, uno de los «problemas» que tuvo el equipo a nivel defensivo la temporada pasada fue no contar con el francés, primero por lesión y luego por decisión técnica, en el tramo crucial de la temporada. Este año no debería haber mucha discusión sobre su papel en el equipo.
Y es que todos los equipos campeones en los últimos lustros tenían algo en común: un «5» de plenas garantías. El ejemplo más claro es Casemiro, con cuya presencia empezaron a caer Copas de Europa como churros. Pero ahí tenemos a Rodrigo, héroe del City la pasada Champions, o nombres como Busquets, Fabinho o Jorginho, jugadores clave de sus equipos en cada una de las Champions ganadas en la última década. Pero es que además Tchouameni no es un pivote «normal»; distribuye mejor de lo que aparenta, tiene un gran disparo y, sobre todo, mucho tiempo para aprender. Y una característica esencial: su presencia libera a Kroos y Modric de trabajo defensivo, puede permitir que Camavinga juegue de lateral (algo necesario con la lesión de Mendy) y, sobre todo, que jugadores como Valverde o Bellingham tengan más libertad para pisar área contraria. Sin desmerecer el papel de otros jugadores (Kroos, sobre todo) en el puesto de pivote, se antoja fundamental darle galones al bueno de Aurelien.
Pero no solo se trata de la libertad que otorga un jugador como Tchouameni al resto de centrocampistas; es que también puede ser un gran aliado de la línea defensiva, sobre todo de los laterales. La memoria es corta y selectiva para algunos, pero antes de su lesión a finales del 2022, el Madrid volaba, y el francés destacaba en cada partido. Recuperaciones, ayudas, algún pase de gol…abarcaba todo. No es casualidad que con su lesión y posterior «bajón» se empezará a resentir defensivamente el equipo. Es prioritario tenerlo enchufado y en forma, porque con su edad (23 años) debe no solo cumplir con su fundamental papel, sino darle esa energía extra al equipo que en ocasiones faltó al equipo, tan acostumbrado además a que un jugador (Casemiro) en esa posición hiciera una labor tan importante e infravalorada. Y ojo; Casemiro solo hay uno, pero de entre sus posibles «sustitutos», Tchouameni es el que mejor encaja.
Habrá que ver lo que depara la temporada, pero tras ver los primeros amistosos, repasar las debilidades de la pasada temporada y analizados los fichajes de la presente, tiene que ser el año de Tchouameni. Necesita galones y confianza para demostrar que no solo no fue un error ficharle, sino que puede ser un jugador que, desde su posición y con una labor poco vistosa pero efectiva, puede condicionar para bien el sistema de Carlo Ancelotti, independientemente del que utilice. Y es por eso que, a día de hoy, el once titular deberían ser Aurelien Tchouameni y 10 más.
Foto: Real Madrid