Todo Nervio Y Corazón | Victoria de equipo
Casemiro, ese medio centro defensivo, tan defensivo que tras el partido contra el Valladolid marcó su vigésimo noveno gol, sí, 29. Al que llamaban la escoba del equipo, o algo así. Deberían ser esos que se alegraban de que Benzema no pudiera jugar contra el Valladolid. De las 9 bajas que tenía el equipo, se podían haber dado de baja también esos que quieren ver al equipo de esa forma tan peculiar. Aunque cada vez lo sean menos.
Puesto que este post versa sobre algo más grande que de esa parte de la afición, el partido en Pucela fue una demostración de cómo resurgir no de entre las cenizas, sino de entre las críticas sin criterio, opiniones vacías que se sustentan porque “lo dicen en jugones, en el chiringuito. ¿Cómo no va a ser así? Debe ser que sus padres no le decían la frase mítica de si tus amigos se tiran por un puente, ¿tú también te tiras? Desde luego el equipo blanco va a donde la fuerza y resiliencia de sus jugadores le lleve, y en esta última ocasión a su cuarta victoria consecutiva y la quinta de seis.
Los gurús del fútbol que saben más que nadie de este, incluso saben más que el propio staff , médicos incluidos. Les debe llegar a casa los informes de las pruebas médicas a las que se someten nuestros jugadores. Sea como fuera, el equipo pucelano nos contagió de ese ritmo plomizo con el que pretendía transmitir un sopor suficiente para bloquear nuestras ideas. El comienzo parecía una repetición de los anteriores; con faltas no sancionadas, tarjetas no mostradas, que de haber sido de otra manera, el equipo rival no hubiera acabado con once en el campo. Pero shhhh, no hablemos de arbitraje ni de juego, que cuando otros lo hacen está bien pero cuando lo vemos en el Real … Hay que lapidar. Que otros equipos ganan por un gol in extremis, se le aplaude porque cada uno tiene su estilo de juego y bajas. (Algo que nosotros desconocemos)
Por otra parte, no menos importante, Lucas Vázquez, a parte de realizar otro gran partido que revolvió la bilis de muchos. Pobres que la paladeaban y sentían desde su vesícula a su garganta.
Y esto solo se resume en que llueve sobre mojado, porque Courtois no se queda ni mucho menos atrás. Otro partido con portería a cero, otro partido con paradas soberbias… Pero bah, eso solo se traduce en que si se necesita al portero, el equipo juega mal. Con ese razonamiento, debería haber bajo palos porteros ramplones que a penas costaran al club, ¿no?
Texto: @angiemg82
Foto: Real Madrid