Crónica Real | El Madrid y el fútbol moderno (2-0)
El madridismo en tensión, de los nervios, como el velocista esperando la salida, sin saber si se anticipará al disparo o lo apurará como es debido ante una situación crítica. Reírse antes del partido tras la goleada recibida por el Barcelona o esperar mesuradamente hasta asegurarse de no caer en el ridículo.
Tras una accidentada, irregular y, por momentos, calamitosa fase de grupos, el Real Madrid se encontraba en la última jornada con la opción firme de ser primero de grupo logrando la victoria, viendo entre divertido y nervioso cómo otros quedaban segundos tras un paso casi impecable hasta hoy.
Era la segunda final de una semana brutal donde el equipo, básicamente, se jugaba las dos principales competiciones. Semana que terminará con la final del sábado ante el Atlético de Madrid.
No presentó sorpresas Zidane con su alineación inicial. La única novedad fue Ramos, que como todos sabemos y no es alocado pensar, si está bien él mismo es capaz de alienarse. Carvajal no tuvo tanta suerte, por lo que Cafucas Vázquez mantuvo su puesto en el lateral.
Teniendo en cuenta que el fuerte del Borussia son las contras, cabía pensar en la opción de Lucas en el mediocampo para fortalecerlo, pero confió en Rodrygo, que ciertamente no escatima en trabajo.
Kroos, Casemiro y Modric, que cuantos más años cumple más minutos juega, fueron el medio campo clásico para consolidar el dominio. El mencionado Rodrygo, Benzema y Vinicius fueron las puntas de lanza.
Y es que no hay mucho más, ya que los jugadores más ofensivos en el banquillo eran Asensio, Isco y Arribas, lo demás defensas. Militao, Carvajal y Odriozola, que ya están recuperados de sus lesiones, y un Marcelo que también podría ser opción ofensiva. Cualquier cambio atrás podría permitir la incorporación de Cafucas a un rol más ofensivo también. ¡Menuda merma en la plantilla entre lesiones y traspasos!
En definitiva, encarábamos una final con el mejor equipo del que disponíamos, básicamente el mismo que ganó al Sevilla. Y ya sabemos que el Madrid no juega finales. Las gana.
Y así fue, porque el Real Madrid ha rubricado el mejor partido del año. Fresco, intenso, dinámico, sin lagunas durante los 90 minutos, con una gran presión y circulación de balón. Sí, amigos, esto es el Real Madrid.
Una gozada de primer tiempo, seguramente los mejores 45 minutos que hemos vivido esta temporada. Un ritmo frenético, intenso, con una circulación de balón fluida y rapidísima, unas bandas profundas y percutiendo, pases perpendiculares que descolocaban a la defensa rival y una presión perfecta y asfixiante que permitía recuperar el balón casi al instante. Puro placer.
La presión alta dio para la primera aproximación de un Modric que se marcó un colosal primer tiempo. No tardó mucho en llegar el primer gol. Fue por banda derecha, un puñal todo el partido. Asistencia medida de Cafucas Vázquez y perfecto remate colocado de cabeza de Benzema. Precioso.
El Borussia se mostró incapaz durante todo el primer tiempo de salir de su campo. Lo hizo dos veces, un remate seco que repelió Courtois con seguridad y una ocasión, esta sí clarísima, practicando su mejor arma, la contra, que marró Plea con un remate desviado ante la salida de Courtois
El Madrid incapacitó completamente la salida de balón alemana, marcando un ritmo demencial. Decían que nuestro equipo no tenía ritmo de fútbol moderno, pero esta primera parte lo desmintió por completo.
Las bandas funcionaron como un reloj. Vinicius incisivo, pero desacertado, amenazando con regularidad. Rodrygo preciso y muy participativo, entendiéndose a la perfección con Cafucas. Así llegaron las mejores aproximaciones y el segundo gol. Perfecto centro de Rodrygo que Benzema, en puro 9, remató, con todo, de cabeza otra vez a la red.
Otra combinación entre Rodrygo y Cafucas terminó con un pase raso de este último a Modric que remató al palo desde el centro del área. Además tuvimos otra ocasión a centro de Kroos y un gol anulado a Modric por fuera de juego de Varane. ¡Quién nos iba a decir que nuestra banda derecha iba a ser la punta de lanza!
Pero independientemente de la ocasiones, la sensación constante de peligro y de ver un equipo completamente desmelenado, confiado y suelto ha sido el gran regalo para los madridistas. Eso y un Modric de antología, recuperando, distribuyendo, desbordando, asistiendo, rematando, marcando (el anulado)… Tremenda exhibición del croata.
El único lunar fue un Casemiro tremendamente errático con el balón, encadenando pérdidas, si bien se centró un tanto en la parte final de primer tramo. Además, sus pérdidas las solía corregir Modric…
La segunda mitad siguió los mismos derroteros, pero con menos acierto de cara al gol. Un partidazo realmente completo. No dejamos de apretar ni de que traer sensación de peligro en cada acción, con desbordes, combinaciones o centros.
La banda derecha siguió siendo un bastión. Por allí llegaron numerosas opciones. Desborde de Rodrygo y remate de Benzema que detuvo el portero, el mejor de los suyos. Hay que ir hablando ya de la sociedad Rodrygo-Benzema, que ya marcaron al City en la pasada Champions.
Rodrygo rubricó su gran partido, seguramente el más completo y regular desde que está en el Real Madrid, con un gran disparo cruzado cerrando una magnífica jugada del equipo.
Otra de Cafucas, que además pegó un disparo al palo. Lo adoro. Se ha marcado otro partidazo con una actitud y brega que es puro madridismo, pero sin renunciar a la calidad. No se le va un control y desbordó constantemente.
La izquierda también dio frutos y no paró de amenazar. Alarma la ocasión marrada de Vinicius, que al quedarse solo y con todo a favor, en vez de rematar buscó el centro del área, manifestando miedo y falta de confianza, a lo que no ayuda la actitud de Benzema ni los comentarios que del delantero francés salieron.
Hubo más. Kroos y un disparo al ángulo que salvó el guardameta del equipo alemán. Una increíble doble ocasión con remate de Ramos de cabeza y paradón de Sommer, y posterior remate al larguero de Benzema. Un remate final de Benzema tras otro centro desde la derecha…
El único peligro del Borussia en la segunda parte vino en un disparo desviado tras un rechace.
No hizo falta presionar tan alto, alternando momentos donde se dejaba salir a los alemanes para aprovechar los espacios, también con acierto. El partido fue muy completo también en lo físico y lo táctico.
Zidane sólo hizo dos cambios, muy en la línea del partido contra el Sevilla, si bien el equipo no tuvo ningún desvanecimiento físico y mantuvo el control y el dominio los 90 minutos. Asensio y Arribas salieron por Vinicius y Rodrygo.
Todos y cada uno de los jugadores han gozado de lo lindo. Se ha notado. Portentoso Modric, glorioso Benzema, tremendos Rodrygo, Ramos, Cafucas, Kroos… Lo único malo es que el resultado fue muy corto respecto a los merecimientos.
Una rúbrica perfecta para esta fase de grupos en la que tanto hemos sufrido, donde el Madrid ha demostrado que no le es ajeno el ritmo del futbol moderno.
Texto: @MrSambo92
Foto: PIERRE-PHILIPPE MARCOU/AFP via Getty Images