Opinión | El abrazo de los Sergios y la reafirmación del madridismo
Hace un par de temporadas, Sergio Reguilón irrumpió –y con fuerza– en el primer equipo del Real Madrid. Era el inicio de una nueva era, comandada por Julen Lopetegui.
En lo individual, fue un gran año para él, en el que tuvo numerosas oportunidades para demostrar su valía, aunque en lo colectivo el equipo no pudo conseguir los objetivos pautados, situación que conllevó a la destitución de dos técnicos en esa misma campaña.
No obstante, hubo un episodio que manchó la reputación del otro Sergio, en este caso Ramos, capitán y líder del equipo. En un entrenamiento, visiblemente frustrado, lanzó un balonazo a Reguilón, el canterano que recién estaba viendo sus primeros minutos. Situación que conllevó a numerosas críticas y que generó dudas sobre la capitanía del andaluz.
Ha quedado claro que esa situación quedó en el pasado y que ya no se duda del liderazgo de Ramos, así como no se duda de la capacidad del lateral izquierdo y canterano merengue para formar parte del primer equipo
Recientemente, ‘Regui’ fue convocado a la selección de mayores y logró realizar su primera aparición vistiendo la camiseta de La Roja, un día que jamás olvidará en su carrera como profesional. Seguramente esta será el primero de numerosos juegos defendiendo los colores de su país.
Por otro lado, Ramos logró un doblete que lo situó en el octavo lugar de máximos goleadores de la selección española, empatado con Don Alfredo Di Stéfano. Así como también es el cuarto máximo goleador de la selección si solamente incluimos jugadores del Real Madrid, según datos de Alexis Martín.
En ese partido de debut de Reguilón y de un hecho histórico para Ramos, ambos se dieron un abrazo que nos enseña que lo del pasado ahí quedó, que Ramos es un gran capitán, incluso más allá del Madrid, y que Reguilón puede contar con él como un líder en el equipo y en la selección.
Texto: @elportuguej