Crónica Real | Líderes al ritmo de Vinicius (1-2)
Victoria importantísima del Real Madrid en su visita al Reale Arena que le sirve para recuperar el liderato de la liga. Vinicius brilló con luz propia al provocar el penalti que transformó Sergio Ramos, y Benzema volvió a ser fiel a su cita con el gol. Los pupilos de Zinedine Zidane dependen de sí mismos para ser campeones a falta de 8 jornadas para el término del campeonato, y confirman su buen estado de forma al sumar 9 puntos de 9 posibles tras el parón.
Era el partido de los partidos para el Real Madrid ante la Real Sociedad, sobre todo tras el pinchazo del Barcelona en el Sánchez Pizjuán. Y lo cierto es que por momentos no lo pareció, al menos en la primera parte. Los equipos se respetaron mucho en la media hora inicial del partido, y solo un enchufado Vinicius ponía velocidad al partido. Lo cierto es que el brasileño le tiene tomada la medida a la Real Sociedad, equipo ante el que rinde especialmente bien. Los locales fueron todo voluntad, con Odegaard filtrando pases a Isak de forma constante, pero la pareja de centrales del Real Madrid volvió a mostrarse inexpugnable.
La primera parte transcurrió con poca emoción, aunque fue el Real Madrid quien más se acercó al gol. Benzema y Vinicius hicieron emplearse a Remiro, mientras que Courtois fue prácticamente un espectador más en el primer acto. A Zidane le estaba funcionando su apuesta por Vinicius, al que sus compañeros buscaban casi siempre en los ataques, pero James, la otra novedad en el once, estuvo algo perdido en la banda derecha. Fue la única modificación al descanso: el colombiano centraba su posición y vino a recibir más entre líneas, aunque se le vio algo faltó de ritmo tras mucho tiempo sin jugar.
No es que la segunda parte tuviera un ritmo alocado, pero el Madrid empezó a dominar el partido, de nuevo bajo la pauta que marcaba Vinicius. En una de esas empezó a bailar con la defensa de la Real, recortando y tirando caños hasta provocar un penalti muy discutido, pero en el que el árbitro pareció tener pocas dudas. El brasileño no estuvo fino en la definición, pero realizó una jugada de crack muy en la línea del partido que se estaba marcando. El final de todo esto es el mismo de siempre: Sergio Ramos transformando la pena máxima con su sangre fría característica. Un gol que hizo daño al equipo de Imanol, que lo intentó constantemente, pero sin ningún acierto.
Tras el penalti llegaría el siguiente momento polémico del partido, en este caso en el área contraria. Januzaj pareció empatar el partido con un disparo lejano, pero el árbitro lo invalidó por un fuera de juego posicional de Mikel Merino. De nuevo el árbitro lo tuvo claro desde el principio, pese a las dudas que pueda despertar la acción. Sin embargo esa acción espoleó a la Real…hasta que llegó la tercera jugada controvertida, aunque esta vez no hay dudas: Benzema controla el centro de Fede Valverde con el hombro. El francés amortiguó la pelota con su clase habitual y definió por abajo para lograr su gol número 22 en la temporada (17 en liga). Quedaban 20 minutos, pero una mala noticia: Sergio Ramos se tuvo que retirar por un golpe en la rodilla. En principio nada grave, pero puede que no esté ante el Mallorca.
Pero la Real Sociedad no es un equipo que se venga abajo tan fácilmente, y tras el 0-2 siguió intentándolo hasta conseguir el premio del gol. A menos de cuarto de hora lo lograba Mikel Merino, protagonista de su equipo todo el partido. El mediocampista de los locales conectó un zurdazo imposible para Courtois y ponía emoción a un partido que en realidad no acabó teniendo demasiada. El Madrid aguantó bien e incluso tuvo en las botas de Mariano la sentencia, demostrando la solvencia defensiva que empieza a caracterizar al equipo de Zidane. El Madrid ganó y pone paso firme hacía una liga que cada vez parece más posible.
Pero por encima de todos, Vinicius. Le falta gol, pero no descaro y talento. Y su velocidad llega a asustar por momentos. A eso hay que añadir el enorme esfuerzo que ha hecho durante los 90 minutos, defendiendo y tapando los huecos que dejaba Marcelo, pero teniendo fuerzas para ser el más determinante con la pelota en los pies. Un porcentaje muy alto de la victoria debe recaer en sus hombros.